Capitulo 16 - Tarde.

1.2K 119 121
                                    

Llegué a casa con las bolsas en mis manos y la mochila en mi espalda y sin pensar en nada más me desplomé apoyada en mi puerta tras haberla cerrado. Cerrado con llave. No sé como sentirme, no sé cómo actuar ahora; me siento perdida, siento que mi cabeza está ruidosa. 

Necesito saber cómo está Pico, necesito saber que todo está bien y por qué no está acá. ¿Qué está haciendo?

...

Realmente no hace falta ser un genio para tener una idea, ¿un chico paranoico con problemas y armas tras una situación así? Lo que más me preocupa es que se meta en un grave problema por alguna tontería que él cometa. Lo llamé, lo llamé y lo volví a llamar. No me moví de donde estaba por aproximadamente una hora. Estaba apunto de olvidar todo lo que aprendí en mis estudios para tener un colapso mental, hasta que recibí un mensaje de Pico.

"Bañandome. Ya voy para allá." era lo que este decía. 

¿Es en serio?

...

Me metí a bañar rápidamente, pero esta ducha me ayudó a calmarme un poco. No quita que siga impactada por lo sucedido.
Me cambié de conjunto por uno más cómodo y libre. Nada destacable, tampoco muy escandaloso. Solo un conjunto para una reunión en casa. Preparé todo lo mejor posible pero en 20 minutos exactos escuché a alguien tocar mi puerta. Cuando fui y la abrí, era un pelirrojo reluciente de lo limpio que estaba, con ropa un tanto distinta a la usual. Esta vez tenía jeans negros y una sudadera verde similar a su prenda común. Además, cargaba más frituras en una bolsa que llevaba en su mano.

—¿Cómo?– Le pregunté con una sonrisa de medio lado y las cejas arqueadas al impecable Pico, que se había presentado a mi puerta sin tener llave alguna de la residencia. Realmente no comprendía cómo lo hizo.

—¿De qué?– Me preguntó, mirándome confundido.

—¿Cómo demonios entraste?

Por mientras él respondía yo abría la reja de mi apartamento.

—... Me colé.—Me dio como respuesta mientras me brindaba una sonrisa cínica.– Por cierto, hola. — Su expresión cambió a una de seriedad total. Entró directamente a dejar las bolsas que trajo en la isla de la cocina y luego a sentarse en uno de los sillones. — Ahora, háblame.

La forma en la que me miraba de manera fija me intimidaba, no voy a mentir, y la verdad es que no entendía a qué se refería. Me senté en el sillón frente a él para conversar más cómodamente con él.

—¿Qué quieres decir?

—¿Qué pasó? ¿Te hicieron algo?

—Pues-— Cuando iba a responder, él mismo me interrumpió.

—Pues claro que lo intentaron. ¿No sabes defenderte?

Pico se levantó de su asiento, y tomó su arma en una de sus manos, mostrándomela desde todos sus ángulos. Pude ver cada detalle de ella; y cuando digo cada detalle, es cada pequeña salpicadura que esta tenía. Me puso los pelos de punta, Pico ¿qué haz hecho?

No todas se veían recientes.

—¿Sabes usar una de estas? Te sacaremos un permiso sea como sea.

—...

Sólo pude quedarme en silencio por unos segundos, intentando pensar en cómo formular una pregunta específica sin desatar un problema.

—¿Cómo es que estás capacitado para portar armas?...—Pregunté, era obvio que con su... situación sería imposible que tuviese posesión legal de armas.

—Tengo contactos, nunca fue un problema para mi. Y si es necesario tú también los tendrás. Es mucho más fácil así.

—¡Yo no quiero tener problemas por posesión y porte ilegal de armas!

LIKE A BULLET THROUGH MY MIND (PicoxT/n) [FnF]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora