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Capítulo 144: Francés

Xu Chengyan no se dio cuenta de la anormalidad de He Yang y siguió charlando con la novia.

La novia preguntó: "¿Estás aquí de viaje?"

"Sí".

"París es ideal para que las parejas viajen... y para una boda".

Xu Chengyan negó con la cabeza: "No tan rápido todavía".

La novia miró a He Yang a un lado y se dio cuenta de que los ojos de He Yang siempre se habían posado en Xu Chengyan, así que dijo: "Será pronto, ¿no?".

Xu Chengyan sonrió y no respondió.

Después de que ambos charlaran brevemente en francés, la novia volvió al lado de su marido con el ramo en los brazos y siguió con su sesión de fotos.

He Yang miró la espalda de la novia cuando se fue, pero no hubo ningún cambio de emoción en su rostro, y preguntó con voz algo descuidada: "¿Tuvieron una buena charla?"

Xu Chengyan también recordó que He Yang no sabía francés, así que casualmente encontró una excusa: "Sólo charlamos sobre si había buenos sitios para comer cerca, y ella me recomendó algunos lugares".

He Yang no respondió, tomando la mano del joven y caminando lentamente hacia el frente, sin rumbo.

Sin saberlo, los dos entraron en un bar de aperitivos, así que compraron algo de comiday eligieron un asiento en la ventana para sentarse.

Mientras Xu Chengyan comía, miró por la ventana y vio por casualidad que al otro lado de la calle había otra pareja que estaba haciendo una sesión de fotos, y era una pareja del mismo sexo.

La pareja del mismo sexo llevaba el mismo traje negro, y el hombre, ligeramente más alto, rodeaba al otro por detrás, mientras el fotógrafo seguía pulsando el obturador.

El fotógrafo no dejaba de pulsar el obturador. Además de la pareja que hacía la sesión de fotos, también había muchas parejas jóvenes que salían de compras, o parejas jóvenes con sus hijos de paseo.

Xu Chengyan miró por la ventana a las parejas que iban y venían y, sin darse cuenta, hasta se olvidó de comer.

Es tan bonito...

Cada uno ha encontrado su sitio.

Xu Chengyan se distrajo un poco por un momento, sentado inmóvil en su silla hasta que escuchó una voz masculina en su oído.

"Yanyan".

Sólo entonces Xu Chengyan recuperó el sentido común y miró a la persona que estaba a su lado.

Probablemente, porque estaba afectado por el ambiente romántico de las calles de París, Xu Chengyan se inclinó hacia He Yang y se acercó un poco más.

He Yang también tomó una de las manos del joven entre las suyas, bajó la cabeza y sus ojos se posaron en el dorso de la mano del joven.

En este momento, el dedo anular del joven seguía vacío, siempre tenía la sensación de que le faltaba algo.

Si pudiera ponerle un anillo, quedaría muy bien.

Pensando en esto, He Yang no pudo evitar tocar su dedo anular y frotarlo suavemente.

He Yang se tocó el dedo y volvió a preguntar: "¿Quieres ir luego a la fuente?".

"Claro". Xu Chengyan asintió con la cabeza.

Los dos se sentaron durante un rato, luego se levantaron y salieron.

La fuente estaba en otra calle, y cuando Xu Chengyan se acercó, vio que había bastantes turistas reunidos allí.