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Capítulo 187: Vengativo

La habitación tenía un ambiguo aroma a rosas.

Las esposas chocaron con la cabecera de la cama con un crujido.

La cama doble se movió ligeramente cuando He Yang presionó a Xu Chengyan, como si fuera un castigo, sin piedad.

Xu Chengyan no pudo aguantar más. Su mano derecha estaba esposada a la cabecera de la cama, y su mano izquierda estaba presionada contra su cabeza, por lo que sólo podía susurrar y pedir clemencia, pidiéndole que se calmara un poco.

Al escuchar los ruegos en sus oídos, He Yang no sólo no bajó el ritmo, sino que intensificó sus esfuerzos.

"¿Todavía en forma?" El tono de He Yang era todavía un poco peligroso.

Sólo entonces Xu Chengyan entendió lo que estaba pasando y tuvo que decir: "Sólo lo dije casualmente..."

"Ni siquiera está bien decirlo casualmente". La voz de He Yang seguía siendo fría, pero todavía ralentizaba su ritmo, y la fuerza de su mano se aflojaba ligeramente.

Xu Chengyan finalmente tuvo un poco de tiempo para respirar y una mano recuperó su libertad. Por lo que no pudo evitar estirar la mano y tocar la cara de He Yang, las yemas de sus dedos limpiaron el sudor de la cara de éste y se burlaron diciendo: "¿Por qué eres tan vengativo...?"

"¿Vengativo?" Las cejas de He Yang se fruncieron, aparentemente enfadado por estas palabras, y sus movimientos se volvieron temerarios.

Al principio, Xu Chengyan todavía tenía el corazón para pensar en todas esas tonterías, pero pronto, no le quedaba más energía, y su atención estaba completamente controlada por He Yang.

El sonido de las esposas chocando se hizo más y más fuerte, y la cama tembló.

Cuando los sonidos del movimiento en la habitación finalmente cesaron, ya era temprano en la mañana.

Xu Chengyan aún no se había desprendido de la aventura, miró al hombre que estaba encima de él, se levantó un poco e intentó reclamar un beso.

He Yang respondió al beso, mientras quitaba las esposas de las manos de Xu Chengyan.

Las esposas eran unas esposas eróticas, especialmente fabricadas con una capa de acolchado suave en su interior, para que no dolieran al esposar las manos.

Sin embargo, hubo un poco de movimiento cuando lo hicieron, y las muñecas de Xu Chengyan todavía estaban un poco rojas.

He Yang ayudó a frotar sus muñecas y lo levantó de nuevo, dirigiéndose al baño.

Xu Chengyan tenía tanto sueño que estaba a punto de dormirse sobre el hombro de He Yang.

Cuando He Yang terminó de limpiarse y acercó el gel de ducha para ayudar con el baño, de repente se dio cuenta de que su mano derecha estaba vacía y frunció el ceño: "El anillo ha desaparecido".

"¿Eh?" Xu Chengyan se levantó de golpe y abrió los ojos.

He Yang tendió la mano a Xu Chengyan y volvió a repetir: "El anillo ha desaparecido".

Xu Chengyan miró la mano de He Yang y sólo entonces se dio cuenta de que He Yang estaba hablando del anillo de ratán.

El anillo había sido improvisado por él y era bastante frágil, por lo que probablemente se rompió cuando estaba en la cama.

"Si se ha ido, se ha ido". Xu Chengyan tocó el dedo anular de He Yang.

Sólo que He Yang seguía muy preocupado por ese anillo y dijo: "Compensa".