School Dance

341 23 191
                                    

FELINETTENOVEMBER

.

DIA 9:

School Dance

o Baile de Escuela.

.

.

.

.

Notas:

Letras en cursiva y entre comillas, nos referimos a lo que escucha o lee.

Letras sólo en cursiva, pensamientos, introspección.

.

.

.

.

"Un imán, de forma similar a lo que ocurre con una masa o una carga eléctrica, produce una alteración de las propiedades del medio que lo rodea, de forma tal que si se coloca otro imán en sus proximidades, éstos percibirán una fuerza con respecto al otro. Podemos entonces decir que originan un campo magnético ."

El sol entraba por los cristales del salón, los haces de luz caían casi perpendicularmente sobre el suelo. Las copas de los árboles lucían verdes y frondosas. Había botones de flor a punto de brotar en cada matorral del jardín. La primavera aparecía tímida aún. Un espectáculo bello a contemplar, pero, sentada en su escritorio, Marinette Dupain-Cheng se encontraba abstraída en sí misma, alejada del entorno.

- Dos imanes, un campo magnético. - ella pensó, entendiendo rápidamente la lección.

Él y ella, juntos, amor.

"...si se sitúa un conductor eléctrico en el seno de un campo magnético, y hacemos que circule por él una corriente eléctrica, se producirá una interacción con el campo y aparecerá una fuerza sobre el conductor..."

Así como él se había introducido en su vida.

Tan de repente, tan sin pensarlo.

Nunca entendió en realidad, el fin de su relación con Luka Couffaine.

No iban mal, pero era más una relación de amigos que de novios, aunque por momentos, sí que lo eran. Besos y abrazos. Y largas tardes en su barco. Ni una pelea. Marinette no recordaba haber estado enfadada con Luka, nunca. Ni él con ella. A pesar que habían empezado su relación, justamente después que Adrien y Kagami Tsurugi hicieran pública la suya. Esa pareja sí que le dolió. Un dolor punzante y constante. Un picor inexplicable en los ojos que siempre terminaba en llanto. Pero entonces, aparecía Luka, rasgaba su guitarra, le hablaba de la vida y Marinette escuchaba lo que él le decía, porque lo admiraba. Eso la distraía del desamor.

Sin darse cuenta, a pesar que Adrien y Kagami habían dejado lo suyo, ella continuó con lo de Luka. Ahí, entre las paredes de su barco y entre los sonidos de su guitarra, Marinette aprendió a amar otras cosas. La buena música, una canción, un poema recitado, una mirada solidaria, debates filosóficos sobre porqué las agujas del reloj van siempre en el mismo sentido. O un susurro comedido, una travesura cómplice.

Ella, que no había tenido hermanos, tuvo en Luka a uno.

Cuando todo terminó, ella se sintió mal por perder ese estilo de vida, estable y cariñoso. Se volvió a sentir sola, algo vacía. Y así, en ese leve desequilibrio emocional que le produjo el fin de su relación con Luka, ella lo conoció.

Félix se había introducido en su campo electromagnético un buen día de setiembre, cuando Madame Bustier determinó que el chico nuevo se sentara al lado de la alumna más dócil de todo el centro educativo.

--La verdad sobre el amor-- **Felinette November 2021**Tahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon