Preach ↠Jichen/Chensung↞

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Jisung no llegó a la casa de Sungchan, así que Chenle, a pesar de haber insistido en esperarlo un poco más, terminó por cantarles a sus demás amigos, siendo poco consciente de si estaba haciéndolo bien o no.

Estaba demasiado ocupado pensando en Jisung como para que su nula afinación le importara, sus amigos terminaron por decirle que lo intentaran otro día y terminaron el día jugando videojuegos en la consola de Sungchan. Las hermanas de Sungchan les prepararon snacks deliciosos, el hermano de Sungchan jugó una partida con Chenle, Renjun bromeó un poco con sus hermanas y, aunque no entendieron del todo, ellas aceptaron llamar a Seojeong en masculino y ella se los agradeció bastante.

Secretamente Chenle también lo hizo y sabe que Renjun igual, puesto que Seojeong no solía sentirse cómoda con las chicas, ya que ellas la trataban mal de forma directa o indirecta, no siempre aceptaban llamarla en masculino y recalcaban su sexo biológico como si ella no fuera consciente de cómo había nacido. Pero con ellas fue diferente, porque Seojeong incluso intercambió números con la menor de las dos hermanas, con quien de hecho compartía el segundo nombre y la mayor platicó con ella todo el rato de la obra de teatro en la que estaba trabajando.

Cuando Sungchan le dijo que tenía tres hermanos, Chenle creyó que se encontraría con cuatro clones de Sungchan, todos chicos, todos igual de callados, misteriosos y directos, pero la verdad fue que no.

Todos eran carismáticos y agradables, la que era más parecida a Sungchan era Soojung pero después de eso, no eran nada como Chenle los imaginó.

Fue un día agradable y Chenle lamentó que Jisung no hubiera ido a pasar el rato con ellos, pensó en que tal vez se arrepintió de aceptar la salida y que por eso no fue, o tal vez le surgió algo muy importante por lo que no pudo asistir, o tal vez aceptó por compromiso y realmente no tenía intenciones de ir.

Pensando en ello, Chenle decidió mandarle un mensaje preguntándole si todo estaba en orden.

“Todo bien? -CL”.

Esperó pacientemente a que Jisung respondiera, pero pasaron los minutos y luego las horas y para cuando Chenle se fue a dormir, no tenía idea de si Jisung siquiera hubiera leído el mensaje.

Quizás había hecho mal al invitarlo, tal vez no le dieron permiso al final o tal vez no lo pidió y sólo le dijo que iría sin estar dispuesto a ir. La verdad estaba decepcionado, se había preparado mentalmente para cantar frente a él, había querido demostrarle todo su talento y pasar un rato con Jisung, como amigos. Entendía que se hubiera arrepentido, pero seguían siendo amigos, ¿no? Podría haberle mandado un mensaje para avisar.

Para cuando dio el lunes, Chenle estaba definitivamente muy impaciente por ver a Jisung y preguntarle qué había pasado, qué si le había surgido algo, qué si estaba bien.

Dieron las siete y Jisung no llegó, aunque Chenle pensó que tal vez llegaría más tarde, a veces algunos llegaban después porque pedían permiso, no era usual que ocurriera, pero ocurría y tal vez era el caso. Pero dieron las ocho, las nueve, las diez y para cuando empezó el primer receso, Chenle suspiró y luego, cuando sus amigos aparecieron en la puerta del aula, corrió a abrazar a Renjun, aunque él se quejara de ello.

—Oh, Dios. —La voz de Renjun le llegó amortiguada, porque al momento de abrazarlo le cubrió la cara con su cuello. A Renjun no le gustaba que lo abrazara, principalmente porque le recordaba que Chenle ya era más alto que él, pero igual lo dejó estar. —Necesito desparasitarme urgentemente.

—Jun, déjalo. —Seojeong le dio un ligero empujón a lo que creyó que era Renjun, puesto que Chenle estaba aferrado a él y no se le veía el principio ni el fin a ninguno. —¿No vino hoy, Leche?