"Serás Mía Pequeña"

Capítulo 42: ¿La primera vez?

Hola pequeñas personitas, se que prometí terminarla pronto, a decir verdad ya no recuerdo cuando fue la ultima vez  que publique un capitulo y me siento mal por eso, espero disfruten uno de los últimos capítulos, los amo <3

Pd: no olviden votar

POV CAMILE

Habían pasado ya un par de semanas, básicamente todo era mas que perfecto y créanme que hablo literalmente de todo, Violetta y Matt estaban en la mejor parte de su relación, Connor cada día se comportaba mejor y le estaba yendo super bien con las tutorías, durante ellas, teníamos conversaciones bastante profundas, me conto los planes de su madre y su padre real que también era el de Copper, a lo que yo le di buenos consejos, a mi punto de vista, el no debería alejarse de su papá y su madrastra pues con ellos había estado prácticamente toda su vida, aunque también le dije que podría ser buena idea que conversara con su madre, seguramente ella lo amaba.

- Hola bella dama - dijo Connor besando mi mejilla, aun me parecía algo extraño, pero me gustaba mucho.

- Hola - conteste un poco seca y luego me arrepentí, empezaría con sus preguntas.

- Hmm, alguien amaneció de malas eh - se acerco y se sentó junto a mi - ¿Qué le pasa a mi pequeña torpe? ¿acaso no durmió bien? ¿tienes hambre? - preguntó acercándose a mi rostro - creo que traigo comida por aquí - empezó a husmear en su mochila.

- No tengo hambre y te aseguro que dormí mas que bien, tranquilo, no pasa nada, es solo que aun no se como reaccionar, eres raro - hice una mueca 

- ¿No te gusta que sea así entonces? - se alejo y se puso serio

- No es eso, solo que de un par de semanas para acá, todo ha cambiado bastante y sinceramente me estoy adaptando, pero me gusta como eres - vi como volvió su sonrisa - ¿de acuerdo?

- Esta bien, tratare de ir mas lento, ¿te parece?

Asentí con la cabeza - gracias joven lindo - sonreí y lo abrace mientras la mayoría nos veía 

- Bien, ¿Qué harás hoy?

- Bueno, teniendo en cuenta que mañana es el examen que definirá si pasas el curso o no, planeaba darte la ultima tutoría

- ¡rayos! - gruño - estoy harto - hizo pucheros - por favor eso no, prometo que ya estoy mas que capacitado, tengo a la mejor maestra - dijo coqueto - mejor tomemos el auto y vayamos a uno de esos paseos en carretera que relajan la mente, así ganamos los 2

Me estaba convenciendo pero no se lo dejaría así de fácil - convénceme - dije viéndolo a los ojos

se quedo pensando un par de segundos - bien, haremos esto, iremos por comida y golosinas, llevaras el libro de química, llegamos a nuestro destino, damos una ultima pasada a los apuntes, comemos y al final disfrutamos el momento, ¿trato? - extendió su mano

la mire y la estreche - trato.

- bien, te llevaré a tu clase y luego yo me iré  a la mía - tomo mi mochila

- recuerda que ya puedo con esto - la arrebate de sus manos, hace un par de días me habían quitado el yeso, ya estaba mas que bien - no me trates como una niña pequeña - dije colgando mi mochila y comenzando a caminar

- pero si eres mi pequeña - me siguió - solo trato de ser un caballero 

- Bien, pero hay cosas que puedo hacer por mi cuenta, se un caballero y trátame como tal, no lo arruines - golpee su pecho con suavidad y luego bese sus perfectos labios - me di la vuelta, me despedí con la mano y entre al salón.

el se quedo ahí, quieto, tal vez asimilando lo sucedido

Después de dos largas horas de aburrida clase sonó el timbre de salida, llame a mi madre para pedirle permiso y ella accedió, realmente estaba feliz de que comenzara a salir.

Encontré a Connor en el pasillo, caminamos al auto y nos dirigimos primero al supermercado y compramos todo lo necesario, luego a la pizzería mas cercana y por fin estábamos rumbo a nuestro destino, de hecho yo no sabía a donde iríamos, tardamos unos 30 minutos en llegar, había una pequeña cabaña, salimos del auto y Connor saco las llaves 

fruncí el ceño - ¿es tuya? - pregunte mientras miraba a mi alrededor 

- mía lo que se dice mía, no, lo será en unos meses, pero entra y ponte cómoda - dijo sacando las cosas del auto

entre observando cada detalle, era tan acogedor - ¿te parece si nos sentamos aquí? - pregunte señalando un tapete algo acolchonado

- claro, parece cómodo - me siguió y se sentó frente a mi estirando sus piernas y entrelazándolas con las mías - yo digo que empecemos - estiro sus manos y tomo mi mochila, saco el libro, un bolígrafo y un lápiz, busco las paginas y luego de que las encontró, me miro y dijo - oh, a la mierda, no quiero, se que te dije que lo haríamos, pero te prometo que ya estoy a tope - lanzo las cosas a un lado - por favor no me obligues u olvidare todo - hizo pucheros - te lo suplico 

reí, en verdad era tierno - Hmm, de acuerdo, pero tendrás que compensarme - lo mire acomodando mi cabello tras mi oreja, el me miro confundido

- ¿de que hablas? - pregunto acercando su rostro al mío y cuando menos lo espere ya estaba encima de mi - ¿acaso quieres...? - pregunto en tono pervertido y luego... un ataque de cosquillas, yo estaba a mas no poder, moría de risa mi respiración estaba toda agitada

- ¡Para, por favor para! - le dije entre risas, golpeando su pecho y retorciéndome debajo de el - te lo ruego - volví a decir y luego el se detuvo

- bien, ahora tu me tienes que convencer de que pare - hizo señal de volver a empezar

- no, espera - me enderece un poco, tome su mandíbula entre mis dos pequeñas manos y lo bese, el se acercaba mas en cada movimiento, puso sus manos primero en mi cintura y luego en mis muslos, su respiración se agito en un par de segundos, cada vez, el beso tomaba mas intensidad, así que lo detuve - ¿ya vas a parar? - pregunte acomodándome recargando mi espalda en uno de los sillones

- ¿tu quieres que me detenga? - realmente ya no sabia de que hablábamos - parecía que te gustaba - se acerco nuevamente, trague saliva, creo que ya se a que se refiere

- yo... - y no me dio tiempo de hablar, comenzó a besarme nuevamente 

y bueno, no entrare en detalles...