"Serás Mía Pequeña"

Capitulo 30: baño de agua helada

CONNOR:

Y ahí la tenía, frente a mi, en verdad tenía un hermoso cuerpo.
Yo solo la miraba mientras ella intentaba cubrirse con la toalla.

- ¿podrías darme mi ropa al menos? - pregunto después de darse cuenta de que esa pequeña toalla no era suficiente para cubrirse por completo.

- tal vez no quiera dártela - conteste con picardía.

Tomo un cojín de la cama y lo lanzo en mi cara.

- eso no me dolió - dije y luego reí.

- ¿a no? - pregunto para luego lanzarme un pequeño objeto de cerámica.
- ¿que tal ahora? - dijo nuevamente pero ahora con una sonrisa victoriosa en sus labios bien formados y carnosos.

- no debiste hacer eso.

- ¿pues que crees? ya lo hice y no lo siento - dijo repitiendo mis palabras.

- ¿te crees muy lista eh?

- lo suficiente - contesto arrogante.

- no eres lo que pareces.

- ¿entonces que soy?

- no lo se, dímelo tu, ¿que eres?

Suspiro - solo dame la ropa.

- de acuerdo, toma - dije y la puse a un lado suyo.

- no me vestiré contigo aquí.

- entonces no te vistas, porque yo no me iré.

- al menos date la vuelta.

- sabes, sigo insistiendo, si ya te vi en ropa interior, ¿porque no puedo ver como te pones el resto de la ropa?

- porque no quiero provocarte una erección - contesto y luego río con tono arrogante.

Trague saliva - vaya, no conocía ese vocabulario tuyo Camile Adams, pero aunque no creo que lo hagas, te haré caso y me daré la vuelta.

Después de muchos segundos que parecieron minutos, voltee un poco la cabeza y la vi a través de un espejo, aun no terminaba de vestirse, tenía una blusa holgada que colgaba mientras se ponía los pantalones, por lo que dejaba al descubierto su pecho.
Me quede unos segundos mirándola.

- ya puedes volt... ¡agh, eres un idiota! - grito y lanzo un cojín mas, pero fui mas rápido y lo esquive.

cuando gire por completo, ella volteo a ver mis pantalones y sonrió pero esta vez de manera burlona.
Baje la mirada, y si, efectivamente, haberla mirado había causado un efecto en mi.

- ¿decías...? - pregunto sin dejar de verme.

Entre al baño y acomode mi miembro de manera que no se notara tanto.

- yo... el caso es que... ¿no querrás dejarme así cierto? - pregunte saliendo del baño y acercándome hasta estar frente a ella.

- ¿disculpa?

- ya sabes... yo... oh vamos.

- no Connor, no tendré sexo contigo - dijo rápido.

- ¿estas segura? - pregunte con tono pervertido acercándome a su rostro.
Ella se quedo quieta mientras mas me acercaba.
Luego comencé a besarla con pasión, y ella siguió el beso.
Después de un rato, baje a su cuello y luego me separe, ella abrió los ojos y subió sus manos hasta mis hombros, pues ya me encontraba encima de ella, tomo fuerza y luego me empujo lejos de ella, yo caí al suelo desconcertado.

- toma un baño de agua helada - hablo burlona y vacío un vaso de agua que estaba en un pequeño mueble sobre mi.

Rechine los dientes y me levante rápido - ¿sabes? tal vez seas inteligente, pero te falta una cosa por saber - dije un poco molesto.

- ¿a si? ¿cuál? - pregunto alzando las cejas.

- que cuando yo quiero algo, lo consigo - conteste y luego salí de la habitación para marcharme.
Baje las escaleras corriendo e intentando secar mi cara, y justo cuando salí de la casa me tope con un tipo.

- ¿disculpa, se te perdió algo? - le pregunte con el ceño fruncido.

- oh, hola, soy Alex - respondió sonriente.

- no pregunte quien eras.

- Okay... y yo no tengo porque decirte que hago aquí - dijo desviando la mirada y dirigiéndose a la puerta de Camile.

Entonces empezó a marcar un número en su celular y lo coloco en su oído.

¿Camile? estoy afuera de tu casa.
Oh, ¿enserio? ¿quieres que pase? - dijo esa frase con tono de burla y mirándome a los ojos.

- oye imbécil, no te quieras pasar de listo conmigo - hable aproximándome a él.

Oh, no pasa nada, solo es tu amigo, ¿cual era su nombre? - volvió a hablar al teléfono.

- Connor, mi nombre es Connor - conteste molesto arrebatandole el celular de las manos.

Hola Camile, soy Connor, solo para avisarte que tu amigo ya se esta yendo - dije empujando con una mano al tipo.

- ¡ya basta! devuelvelo - hablo exaltado echándose encima de mi.
Era igual de alto que yo, pero claramente yo era mas fuerte, así que lo derribe, pero al encontrase abajo de mi, tomo fuerza y me lanzó y ahora yo me encontraba abajo, y así fue por unos largos minutos, primero yo, y luego él, yo sangraba del labio inferior y él de una ceja.

- ¿que demonios pasa chicos? - preguntó la amiga de Camile parada a un lado nuestro junto con Matt.
- ayudame a separarlos - hablo nuevamente dirigiendo sus ojos a Matt, el me miro y luego río, pues ahora yo estaba abajo.

- claro que no, quiero que le den una paliza a este imbécil - contesto refiriéndose a mi.

Yo lo fulmine con la mirada y luego separe al tipo y me levante aproximándome a Matt.
- ¿cual es tu maldito problema? - pregunte empujándolo del pecho.

- no, mejor dime tu, ¿cual es el tuyo? - contestó ahora él empujandome del pecho.

Entonces tome fuerza y lo golpee cerca de la boca con el puño.

- ¿que rayos? - dijo Violetta golpeando mi hombro y acercándose a levantar a Matt.

Entonces el se levanto y estampó su puño en mi nariz haciendo que sangrara un poco.

- ¡ya basta! - grito Violetta - si no se tranquilizan llamaré a la policía.

- bien, yo paro si el para - contesto Matt mirándome con furia a los ojos.

- de acuerdo - dije aun dudando.

- bien, ahora entren, debo curarlos - dijo Violetta entrando a la casa de Camile y los tres la seguimos, el problema es que los tres queríamos pasar al mismo tiempo, Violetta volteo atrás y entonces, entro Matt, luego yo y al final el tal Alex, en verdad esa chica daba miedo.