[ VI ]

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-¡Suéltame! ¡Lo matare!

-¡Si hace eso, será expulsado y será arrestado!

Koyuki y Aoi observaban el como Amaya intentaba detener a su maestro, la peli lila sostenía de la cintura a su maestro para evitar que siguiera avanzando poniendo la mayor fuerza en sus pies y bajando su centro de equilibrio, Akaza por su parte lanzaba golpes al aire, Douma por su parte se encontraba sentado a una distancia prudente de ambos mientras saludaba con burla a la tercera luna creciente.

-¿Siempre son así?-pregunto Aoi.

-Algunas veces, Hakuji siempre trata de controlarse aunque no siempre es posible, ten cuidado con el cuchillo, podrías cortarte.

-Si me cortara podría regenerarme.

-Pero aun así sentirías dolor ¿no? ¿O es que te gusta sentir dolor? ¿Eres masoquista?

-¡Para nada!-exclamo negando con la cabeza

Koyuki le sonrió para después darle indicaciones a la demonio, ambas preparaban la comida de los cazadores, esperando que los alimentos calmaran a la tercera luna creciente.

Al ver que el ambiente ya estaba más calmado, Koyuki se acerco a su prometido para darle una ración de comida la cual fue robada por la segunda creciente, las venas se enmarcaron en el rostro de Akaza quien agarro las espadas que tenia al alcance para luego lanzárselas a Douma quien salió ileso del ala de la tercera luna creciente mientras que este se encontraba refunfuñando.

-No tienes que ponerte así, preparamos comida extra en caso de que esto pasara-hablo Koyuki.

-Tampoco era necesario que lanzara mis espadas-murmuro la peli lila

Aoi le jalo levemente el ahori a la cazadora, Amaya volteo con curiosidad observando a la demonio.

-Ya es hora de que vayamos a la siguiente ala.

-Tienes toda la razón, Akaza-san nos retiramos a la ala de Douma-san.

-Si, claro, cuando lo veas entiérrale una espada en la parte trasera de su cráneo.

-Dudo poder hacer eso-dijo soltando una risa nerviosa.

-(T / N)-chan, Aoi-chan lleva la comida de ambas, traten de comportarse en las demás alas.

Amaya asintió para después emprender camino junto a la demonio.

-Es agradable pasar tiempo con esa humana.-dijo queriendo entablar una conversación.

-Me alegra que por lo menos te agrade pasar tiempo con algún humano.

-¿Cómo es la siguiente luna? Aparte de insoportable e infantil.

Amaya rio, por alguna razón le causaba risa el como Aoi describía a los humanos.

-Douma-san es. . .-ambas pasaron a un cuarto oscuro, que inmediatamente al pasar comenzaron a caer-¡un hijo de puta!

Cayeron sobre algunos cojines mientras se escuchaban unos aplausos de fondo.

-¡Qué extraordinaria forma de caer!

Ambas se levantaron observando el como la segunda luna creciente se encontraba sentado sobre algunos cojines mientras aplaudía.

-Sabe Douma-san pudo avisarme sobre que había modificado su ala.

-Oh, pero así no te sorprenderías al experimentarlo por ti misma, ¿Y bien que te parece? Nakime-chan hizo un estupendo trabajo ¿no lo crees?

-Si que lo creo, ¿y como para que serviría eso?

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