Realidad de una Noche (Finalizado)

Futuro

Ya en la suite del hotel Wang Yibo estaba quitándose un poco la ropa para ponerse cómodo mientras admiraba la vista que éste tenía, Xiao Zhan estaba en el baño y después de unos minutos salió, Wang Yibo al escuchar volteó a mirarlo y se quedó quieto por un momento casi con la boca abierta con su ropa a medio caer, Xiao Zhan tenía puesto solo una camisa ligera dejando a la vista su torso, se paró en el marco de la puerta, no hacía falta que hiciera poses extravagantes o muy rebuscadas, él era sensual sin esforzarse, una sonrisa tímida o morder su labio era suficiente para hacer que el otro atravesara la habitación y quisiera tomarlo en ese instante.

Wang Yibo se acercó a él y no pudo contenerse, lo besó mientras colocaba sus manos en su cintura acariciando la suave piel, quería quitarle lo poco que tenía encima y a la vez no, la imagen de su esposo justo así era demasiado sexy.

Lo llevó a la cama y se entregaron al amor y al deseo, desde que se habían reencontrado aquella tarde el hambre de tenerse a pesar de la niña que dormía en la habitación contigua era constante, pero esta noche era diferente, el hecho de ser esposos se sentía mejor, Xiao Zhan quería que éste fluyera en él tanto como quisiera y por supuesto Wang Yibo deseaba complacerlo.

Se tocaron, besaron y dejaron llevar por horas hasta que cansados cayeron sobre el colchón y las sábanas revueltas.

Wang Yibo estaba recostado y Xiao Zhan sobre él, tenía su cabeza en su pecho y jugaba con su dedo sobre la manzana de este, había dejado marcas rojas alrededor, le gustaba mucho era su punto preferido y Wang Yibo se derretía al toque.

Luego miró su dedo y la argolla en el.

Z: Wang Yibo, mi esposo, ¡estamos casados!...
Dime, aquella tarde que llegaste a buscarme, me preguntaste si estaba con alguien, de haber dicho que sí, ¿Qué hubiera pasado entonces?

WY: Antes de ir a buscarte pensé en todas las posibilidades, me dolía imaginarlo, claro que me lo merecía lo sé, pero cuando contestaste que no, fue como si el alma regresara a mi cuerpo.

Z: Pude sentirlo...

WY: Fui recompensado, tuve otra oportunidad y no la iba a desperdiciar.
Mmm... Y ahora tengo una familia.

Z: Wang Yibo te amo, demasiado.

WY: Ven aquí...

Buscó sus labios y comenzaron de nuevo.

Los siguientes días disfrutaron de la ciudad, comieron en distintos lugares probando todo tipo de platillos, disfrutaron de un paseo por la bahía, se sintieron con la confianza de hacer actividades a pleno día como enseñar a Xiao Zhan a andar en bicicleta, visitaron un hermoso y famoso lugar donde las hojas de sus árboles se pintan de un color lila, Wang Yibo tomó todas las fotos que pudo de su esposo, quería capturar cada detalle de él, esta vez Xiao Zhan era el modelo.