Secret [Hermione y tu]

Capítulo 17

Maratón 1/3

Hermione POV.

Su expresión cambió por completo en un segundo a vergüenza y un poco de miedo. No lo comprendí hasta que habló.

—Perdón, no quise decir eso. Creo que fue un sueño o algo parecido. No estoy diciendo que seas irresponsable.

¿Qué imagen de mi le había metido Pansy a la cabeza para que pensara eso?

Negué varias veces. Estaba comenzando a recordar y yo la ayudaría lo más posible.

—No, no fue un sueño —le confesé, acomodándome en la cama—. Y no me pidas perdón. No me molesta quedarme en los dormitorios si es con mi mejor amiga.

Me dolía tener que fingir amistad frente a ella, pero cualquier confesión que sonara medianamente romántica ponía en riesgo todo. Sus recuerdos, nuestra amistad y sus verdaderos sentimientos por mi.

—Vamos, terminemos esto.

Su sonrisa fue lo único que no fue una completa mierda esa noche.

T/N POV.

Estaba en el comedor. Mis ojos aún me pesaban y no sabía si terminaría totalmente dormida sobre la mesa. Solo jugaba con los huevos revueltos en mi plato y bostezaba algunas veces.

Una conocida Slytherin se sentó a un lado de mi y me dedicó una suave sonrisa. No pude evitarlo y se la devolví. Un sí se sentía un poco raro.

—Buenos días —me dijo con esa voz brillante y cantarina que tenía todas las mañanas. Me miró bien por un par de segundos e hizo una mueca—. Te ves mal.

—¿Qué? —¿En verdad me había dicho eso?

Tenía casi disgusto marcado por toda su cara. Aquello me revolvió el estómago y me hizo sentir extremadamente mal. Tal vez me veía como me sentía en ese segundo.

—¿Ya no soy suficientemente buena para ti como para que decidas dejar de arreglarte? ¿Valgo tan poco para ti? —Prácticamente me gritó.

Me sostuve las sienes y suspiré.

—Pansy, no me levantes la voz...

—¡No! Que todos sepan, que todos se enteren lo egoísta que eres —habló en voz alta, captando las miradas de un par de estudiantes.

Las miradas sobre mi me hicieron encogerme en mi sitio sin querer hablar. Me sentía aún peor ahora que estaba gritando todas esas cosas sobre mi.

Siguió dando el show de una década hasta que me puse de pie, sostuve sus mejillas y la callé con un beso.

—Perdón. Me arreglaré más para ti, ¿bien?

Me sonrió dulcemente y acomodó mi desastroso cabello.

—Lo sé, cariño. ¿Como se dice?

—Gracias, Pansy.

—De nada, linda. Te amo.

—Te amo —dije, y fue la primera vez que me sentí sofocada al pronunciar esas palabras.

Aún si a mi cuerpo lo recorría una sensación de alivio puro cada vez que decía algo que a mi novia le agradara. No lo sabía describir, solo sabía que era tan extraño. Solo me alegraba haber arreglado todo y haber detenido su pequeño espectáculo.

Iba a darme una larga ducha si me veía tal y como me sentía. Como lo peor del mundo.

Harry POV.

Mi respiración estaba agitada. Cada vez sentía que nos alejabamos más de donde deberíamos estar.

—¿Estás seguro de que vamos bien?

Asentí, pero no estaba seguro.

—Si, vamos. No podemos usar magia sin que nos rastreen.

Habíamos guardado nuestras varitas y habíamos rondado sin dirección por un grande y largo bosque que les pertenecía a los Parkinson. A las únicas personas responsables de la desaparición de mi Draco.

Estabamos tan enfocados en no tropezar y yo en intentar saber si estábamos cerca que solo reaccionamos cuando unas pisadas y voces se hicieron más cercanas a donde estábamos.

—Escóndete —le ordené a Ron y nos arrastré detrás de unos frondosos arbustos, tratando de escuchar.

Vi unas siluetas altas. Un hombre y una mujer caminando, como si buscaran algo. O a alguien. A nosotros.

—¿Lo escuchaste? —el hombre habló primero—. Tal vez tengamos una mina de oro en nuestras manos.

La mujer se rió de forma maníaca y burlesca. Bellatrix, pensé.

—Por supuesto que lo tenemos. Podemos traicionar a la niñita Parkinson y llevarnos al Malfoy lejos de aquí. Imagina la fortuna que darán sus padres para tenerlo de vuelta.

—¿Esos traidores? No —comenzó, riendo entre dientes—. Yo digo que lleguemos hasta el niño dorado. Está tan perdido por Malfoy. No nos dará riquezas, Bella. Nos dará su vida. El Lord al fin triunfará.

Aquello me heló la sangre, me tensó e hizo que casi diera un brinco cuando Ron puso su mano en mi hombro como señal de apoyo.

Bellatrix dejó de caminar, se detuvo a mirar al hombre y sonrió, como si acabara de encontrar una bolsa repleta de galeones.

—Tienes razón, Barty. Tienes tanta razón... —dijo mientras pensaba—. Haz una reunión, trae al chico antes de que la chiquilla Parkinson vuelva y contémosle a nuestro señor sobre los planes.

Barty simplemente asintió y se alejó.

—El niño hará todo por amor. Y esta vez Lily Potter no lo va a salvar.

Y con una última risa Maniaqua Bellatrix desapareció.

Solté todo el aire en mis pulmones y caí sentado sobre la hierba. Ron me abrazó por los hombros y acarició mi brazo con cuidado. No podía calmarme, no ahora que sabía que podían dañar tanto a Draco. No me entraba en la cabeza y nada coherente se formaba.

—Por Merlin —dijo Ron.

No pude contestar, me desconecte. No sabía qué hacer ni qué decir. No sabía cuál era la mejor opción. Aun si me sacrificaba por él, por todos,Voldemort reinaría y no podría salvar a nadie. A Ron, a Draco, a Hermione, ni mucho menos a T/N. No iba a dejar que pasara.

—Hay otra forma —dije y me puse de pie—. Levántate, vamos a seguirlo.

Ron me hizo caso y no me preguntó al ver mi expresión. Tenía miedo, pero no dejaría que me paralizara. Si había una profecía con mi nombre, significaba que las cosas no acabarían así. Aún no.

***

Me sentí mal por no traerles capítulos en el último mes, así que les traigo un maratón, pondré más notitas al final <3.

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