Capítulo 12

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Camila creyó que iba a desmayarse.

—¡Mi padre!—Exclamó, perpleja. Lauren asintió—¿Cómo lo sabes?

—Lo descubrí hace tiempo—Confesó luciendo casi avergonzada.

—No puedo creerlo—Camila sacudió la cabeza con incredulidad—No puedo creerlo—Lauren se sentó junto a ella—¿Él lo sabe?

Lauren asintió.

—Sí.

Camila se cubrió el rostro con las manos al instante que sintió sus ojos inundarse de lágrimas incrédulas. Lauren le acarició el cabello consolandola con delicadeza.

—Por eso sentía que me unía a él algo especial—Camila elevó su rostro mirando a Lauren  con ojos llorosos—¿Sabes quién es mi madre?

—Sí.

Camila apretó los puños.

—¿Quién?

—Vanessa Cabello, tu tía—Susurró Lauren mirándola fijamente.

Camila abrió la boca atónita, no daba crédito a lo que acababa de escuchar.

—¿Mi tía?

—Parece ser que era un poco rebelde y tu familia la desheredó—Explicó ante la mirada atónita de la morena—Su hermano, Alejandro, le prohibió la entrada en la casa familiar—Hizo una mueca pero continuó—Cuando se quedó embarazada la obligaron a darte en adopción.

Camila la miró con expresión de sufrimiento.

—He encontrado algunas fotografías en una Biblia—Rebuscó en su bolso temblando y se las dio.

Lauren las miró sin prestarles atención y Camila pensó que no era la primera vez que las veía.

—No parece extrañarte.

Lauren la miró nuevamente.

—No—Confesó.

—Tú sabías que mi tía vivía en esa casa, ¿no es cierto?—Inquirió con sufrimiento. Lauren asintió en silencio—También he encontrado un diario. ¿Tienes idea de quién le dio las fotografías y el mechón de cabello?—Necesitaba saber, necesitaba realmente.

—Tengo una intuición.

—¿Y me la vas a decir?—Casi rogó ante su pregunta.

—Debes averiguarlo por ti misma.

—Mi madre me estuvo observando durante todos esos años sin que yo lo supiera—Comentó Camila después de una larga pausa, mirando al vacío.

—Así es. No te equivocabas al sentir que alguien te miraba desde la casa—Camila miraba el espacio tiempo sin decir nada.

—Es increíble—Susurró varios segundos después—Esta misma mañana me he dado cuenta de que nunca he visto una fotografía de mi madre.

—No me extraña—Se encogió de hombros—Eres idéntica a ella cuando era joven. Supongo que tus padres no querían que sospecharas. Roy Holden pensó que no era más que una coincidencia, pero al final se dio cuenta de quién eras. Aun así, no pudo hacer nada—Habló con cierto pesimismo en su voz—Estaba casado y tenía un hijo—Explicó antes de soltar un suspiro—Después del escándalo, se dio cuenta de que revelar la verdad sólo contribuiría a empeorar las cosas.

Camila se miró las manos y recordó el escándalo que había marcado su vida. ¡Y su profesor favorito, que no había hecho nada más que escuchar a una joven necesitada de atención, era en realidad su padre!, cuando otro profesor del colegio los encontró una tarde, corrió a contarle al director que Camila Cabello estaba en brazos de Roy Holden. La realidad era muy distinta: Camila estaba en el despacho de Roy para comentar una redacción y de pronto se había echado al llorar al recordar una discusión que había tenido aquella mañana con sus padres. Él se haabía limitado a escucharla atentamente y a apretarle la mano afectuosamente.

Boda por escándalo Where stories live. Discover now