𝑬𝒍 𝒅𝒆𝒔𝒆𝒐 𝒅𝒆 𝒂𝒎𝒂𝒓 [Minsung]

capítulo 14

Felix le habia comentado esa noche al omega, que Minho no los había acompañado al evento, por razones de salud.

Minho habia caido en una enorme depresión luego de que hace dos años le dieran la noticia de que en el avión donde Jisung iba, explotara en el aire por fallas en los motores.

Y la noticia cayó mucho más fuerte para él luego que por las noticias confirmaran aquel hecho.

El avión donde el omega iba hacia América explotara.

Pero jamás fue así, si. El avión si exploto matando a cientos de pasajeros, pero gracias a que el vuelo del menor se hubiese ido antes de que el llegara al aeropuerto, fue capaz y con mucha suerte de sobrevivir.

¿Porqué llego tarde?

La tristeza que inundaba su cuerpo y alma ese día, le impedían levantarse de su cama.

Quería seguir oliendo, por mucho tiempo. El aroma de Minho en sus sabanas.

(...)

Dos años atrás.

-Minho, debes salir a comer...-

-Vete Hyunjin-

El alfa suspiro cansado, su amigo se estaba muriendo por el amor de su omega.

-Si Jisung viera que no estas comiendo te...-

-¡Él no esta aqui, Hyunjin! ¡Vete!- sus voz se escuchó quebrada y su amigo lo supo.

El alfa de Minho y él mismo, estaban sufriendo la pérdida de su omega y su humano.

Minho escuchó los pasos alejarse de su habitación.

Cubrió su cabeza con ambas manos, tirando de su cabello, frustrado, enojado y más que todo triste.

Se puso de pie con furia latente, tiro todo lo que habia en la habitación.

-¡¿Por qué mierda no fui capaz de decirle quien era?!- gritaba enojado botando todo a su paso.-¡¿Por qué mierda no fui tras él?!- se seguía culpando por a ver perdido a la única persona que lo hizo entender el significado del amor.

Cayó al suelo gritando el nombre del menor.

-Porfavor vuelve...vuelve..-murmuraba viendo sus manos llenas de sangre por a ver golpeado un espejo y astillarse con estos.

Habian pasado ya dos meses desde que Minho cayo en la depresión que lo estaba matando lentamente.

-Quiero ir tras ti ahora...-las lágrimas salian- pero ya es tarde...-

Escucho pasos rápidos viniendo hasta su habitación.

Era Changbin por su aroma.

Este toco múltiples veces la puerta pero no hubo respuesta.

-¡Lee, habré!. ¡Es urgente!-

Sonaba desesperado y el alfa a como su debil cuerpo dio, se puso de pie y abrio la puerta, dejando la perilla llena de sangre. Inportandole poco.

-¿Qué quieres?-

Changbin sintio su estómago removerse.

Su amigo tenía enormes ojeras por no dormir, sus ojos hinchados por llorar todos las noches en silencio, y su rostro se estaba poniendo de un color bastante pálido.