¥Capitulo 64¥

2.2K 113 166
                                    



Capítulo 64: Ella a mi y yo a ella.

3 de Enero del 2018, Maratea-Italia.

Karol S.

Vamos a morir.

Apenas es inicio de año y la vida ya anda poniéndonos pruebas de supervivencia.

Mi madre, Dario, Sofía, Isa, Ale, Alan, Rafa, Melisa, Amalia y Alvaro hemos recibido el año en el sur de Italia, en una provincia con una localidad cerca de la costa del Tirreno. Un lugar precioso que desconocía su existencia hasta que tuve que venir al festival de Año Nuevo en el cual me presente días atrás, ha sido una grandiosa experiencia y dudo que se nos olvide este pequeño viaje porque estamos viviendo la primera crisis del año en el.

Con esa descripción ya se pueden imaginar que estamos en un pequeño y bien escondido pueblo algo lejano de la civilización, estamos en proceso de abandonarlo en plena noche para llegar finalmente a Barcelona aunque no contamos con el hecho de que todo estaría lleno de neblina y que se convierta tan riesgoso salir aquí en un bus porque estamos en una jodida montaña en medio de la nada.

Repito: vamos a morir.

Para rematar el aeropuerto esta a unas tres horas y media de donde estamos, y tenemos que estar a más tardar en la tarde en Barcelona.

—Eh preguntita ¿nos quedaremos aquí varados? ¿Regresaremos al hotel? ¿Nos iremos con la ayuda de Dios o qué? —pregunta curiosamente Melisa asomándose desde su asiento.

—Ya relájense chicos —pide Amalia con pesadez—. Ya hablamos con el chofer, todo esta bien. Nos iremos despacio.

—Ah bueno, sólo espero que no terminemos yéndonos por un barranco —suelta Alan.

—Dios, cállate —gruño intentando ignorar la situación, lo ultimo que me falta es entrar en pánico.

—Dame tú mano —pide Sofía a mi lado, se la extiendo y ella la deja sobre su vientre de seis meses, sonrío al sentir las pataditas del bebé—. Lorenzo está inquieto.

—Hola bebé —le hablo y nos reímos al sentir más movimientos. Acaricio su vientre—. Te diría que te quedes ahí dentro por siempre porque es muy estresante el mundo aquí afuera, pero también quiero conocerte.

—No por favor, que no se quede dentro —ruega Sofía—. Extraño dormir boca abajo.

—Me imagino —asiento. Veo a mamá que mece a Isa quien duerme plácidamente en sus brazos—. ¿Cuando dices qué nace nuestro bebé?

—Mediados de abril.

—¿Sí? Por suerte la gira se habrá terminado, espero poder estar allá cuando nazca.

—Seguro que sí, debes de darle la bienvenida a tú sobrino —me codea.

Siento emoción de sólo pensarlo, ya sabemos que Dario y Sofía esperan a un niño y se llamará Lorenzo -ignoremos el hecho de que Dario eligió ese nombre por nuestro equipo de fútbol-. Esta siendo un bebé muy esperado y amado, yo de por si me ando derritiendo cada vez que veo que el vientre de Sofía a crecido más o me enseñan las cosas que han ido comprado. Ese bebé e Isa serán la causa de mi muerte por ternura.

En cuanto a mi inicio de año... ha sido distinto. Distinto a todos los anteriores y es que nunca pensé que pasaría una fecha así de importante tan lejos de mi familia y amigos, en un país desconocido, rodeado de extraños y una cultura totalmente distinta a la que estoy acostumbrada, pero fue una experiencia nueva y buena. Pude recibir el año haciendo lo que amo y eso me basto.

Además no fue tan malo. Sofía, Dario e Isa vinieron con nosotras y nos acompañaron, al igual que Ale, Alan, Rafa y Melisa, la pasábamos bastante bien entre nosotros y pues formamos nuestra propia y pequeña familia juntos para no sentirnos tan solos. Aunque a mamá y a mi nos sigue costando, no fue un nuevo año en argentina y mucho menos en Mexico, lloramos bastante en noche viaja, tanto por tristeza como por felicidad porque ya éramos totalmente conscientes de la abrutada forma en la que nuestras vidas han cambiado.

Las Consecuencias De Amarte.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora