Lovestruck || Bradley Simpson.

1.5

Narra Alison

27 marzo.

Estaba llorando sentada en la bañera vacía con una prueba de embarazo en el lavabo y con el miedo mas grande que tuve en mi vida.
Llamé a Summer.

-¿Ally?

-Sé que estás ocupada pero necesito que vengas.

-¿Qué sucede Ally?

-¡Solo ven! -colgué.

Veinte minutos después escuché la puerta de entrada pero dudé sobre quién era ya que la gira había terminado y Brad vivía aquí.

-¿Ally?-la voz de mi amiga.

-En el baño-grité.

Entró y me miró preocupada.

-¿Qué sucede?

-Tengo un atraso de dos meses.-me miró atónita.

-¿Cómo de dos meses?

-Sabes que soy muy irregular. Por eso no le di importancia.

-Oh Dios mio-dijo abrazandome.

-Me he hecho la prueba.-me miró- está sobre el lavabo. No puedo verlo, tengo mucho miedo Sum. ¿Qué le diré a Brad?

-Calma. Brad te ama Al, va a apoyarte sea cual sea el resultado de eso-señaló la prueba.

-¿Puedes verlo tú?

-Claro que si.-se levantó y fue hacía el lavabo, tomó la prueba y el papel con las indicaciones. Las leyó, miró el aparato. Su cara cambió y me miró.

-Es positivo Ally.- entré en pánico y comencé a llorar como nunca, Sum me abrazó y la puerta de entrada se escuchó.

-Oh no, ¿Qué voy a hacer Summer?

-Díselo Ally, el va a ser padre, debe saberlo.-dudé.

-¿Puedes llamarlo?-ella me sonrió levemente y salió en su busca.
Un Bradley preocupado entró al baño.

-¿Qué sucede amor?-volví a llorar.-Hey, tranquila nena.-me abrazó y yo le correspondí.

-Tengo que decirte algo Brad-dije entre sollozos.

-Dime bebé-dijo calmado.

-Estoy..-dudé- estoy embarazada Brad.-me soltó rápidamente y se alejó.

-¿Qué? No hagas bromas con eso-dijo alterandose.

-No es una broma, vamos a tener un niño o una niña.-volví a llorar.

-Pero.. ¿Cómo? Nosotros nos cuidamos siempre.-me levanté de la bañera y salí.

-¿Insinúas que no es tu hijo?

-Eso mismo, tu te has quedado sola con Summer estos dos meses, no lo hicimos. Es imposible. ¡Imagina lo que dirán!

-Oh claro, me acosté con un idiota el maldito veinticuatro de diciembre, lo había olvidado-le grité enfurecida.-Eres un imbécil. No volverás a tocarme, así no te preocuparas. Es mas, no volverás a verme, voy a cuidar a mi hijo sola. ¡No te preocupes por tu maldita imagen! ¡Se acabó!-salí de la habitación hecha nervios, tomé mi abrigo y salí de allí ignorando los gritos de Summer.
Bajé por las escaleras y una vez abajo salí corriendo hacía quién sabe dónde. Paré en un parque casi desierto. Me senté en el pasto, lloré y lloré.

-¿¡Dónde quedó todo el maldito amor!?-grité a la nada.

-Aquí-sentí una mano en mi vientre. Dejé de llorar, podría reconocer esa voz entre miles.

-Ya vete Bradley, por favor, no quiero verte.-pedí cansada.

-Lo siento nena, no pensé lo que dije. No fue mi intención decir eso.

-No me importa lo que tengas que decir Bradley, rompiste mi corazón. Me dejaste cuando mas te necesitaba. Ahora vete, tu y yo ya no tenemos nada.-dije fríamente.

-No se acabó nada. Tu y yo nos amamos y vamos a tener a ese niño. Va a ser un desafío pero quiero hacerlo nena. Perdóname. Te amo.-me tomó de las mejillas y me miró a los ojos.

-¿Cómo puedo creerte Brad? Yo te amo a tí, jamás podría serte infiel.-rompí en llanto.

-Lo sé amor, lo siento mucho, sé que no lo harías, lo siento. Te amo, a tí y al niño.-el espacio que nos separaba era muy poco, nuestros labios rozaban.-Te amo, te amo, te amo-susurró.

-Ya bésame idiota-sus labios chocaron con los mios rápidamente. Cada movimiento, cada roce me estremecía. Estaba muy enamorada de este imbécil.
[...]

-¿Que tu qué?-gritó mi hermano.
-Eso, vas a ser tio.-aguante la risa por la cara que puso, Brad no lo hizo y soltó una carcajada.

-Pienso matarte si no corres Bradley.-murmuró Connor.

-Ya, calmate, no es tan malo.-salí del agarre de Brad y abracé a mi hermano. El miró mi estómago y lo tocó. Suspiró.

-Espero que seas un buen padre porque voy a golpearte, y ésta vez no es juego.

-Claro que si hermano.

-Ven aquí idiota-dijo Con y nos abrazó a los dos cuando Brad llegó. -Les deseo lo mejor.

-Gracias Con-besé su frente y pellizqué sus mejillas.

-¡Qué no hagas eso!-gritó y comencé a reir.

Ahora que lo pensaba no me desagradaba la idea de ser madre.