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Cassandra:

Físicamente estaba en el aeropuerto de España, mentalmente estaba en México pensando en el que "¿Que hubiera pasado si..?" Mi vida acaba de cambiar drásticamente y aún lo seguía procesando.

A mi hermano menor le había llegado una invitación del club Barça en el equipo infantil A. Es muy importante para su carrera, no lo podía rechazar. Por eso decidimos, corrección, mis padres decidieron que todos nos mudaríamos a España hace ¡dos semanas! Todo esto me tomo por sorpresa.

Toda mi vida la había dejado detrás, mis amigos, mi... ¿novio? si es que aún lo podía llamar así.

Camino a nuestra nueva casa veía por la ventana del auto cada lugar que mi mamá me señalaba, ella realmente estaba entusiasmada por este cambio. Mi papá estaba alegre igual, no por el hecho de vivir en España, estaba feliz por mi hermano y yo igual, solo que es más difícil acoplarse a un nuevo lugar cuando eres adolescente, supongo.

...

La casa es grande, muy diferente a mi casa de México. Estoy segura que me acostumbre rápido, pero la melancolía aún me invade.

Quería quedarme a descansar un poco, pero mi hermano tiene entrenamiento en 30 minutos y mis papás no pueden acompañarlo, así que me toca a mi.

Me pongo unos vaqueros rectos que estaban ajustados solo en la parte de mis muslos y me hacen una buena figura, mis confiables conversé y un top blanco sencillo. Me retoco la máscara de pestañas, también me pongo brillo en los labios. Me doy un último vistazo en el espejo y antes de salir de mi cuarto tomo mi pequeño bolso con lo necesario dentro.

—¡Adiós!— aviso lo suficientemente alto para que mi hermano se apurara.

Detesto esperar, soy una persona que desconoce la paciencia. No tarda ni un minuto y baja las escaleras corriendo con su mochila en el hombro desesperado, porque pensó que me iría sin el.

Niño listo, si supiera que por mi me quedaría a dormir toda la tarde. El jet lag es odioso.

Tardamos 15 minutos en llegar al lugar donde entrenaría, cruzamos miradas al ver lo grande que estaba el lugar, el se nota mucho más nervioso que yo y eso me inquieta.

—Tengo que hablar con Marlene, serán sólo unos minutos.— Marlene, mi mejor amiga, me dijo que le avisara cuando llegará —Te veo dentro en cinco y no olvides que eres un campeón.— antes de que baje del auto hacemos nuestro saludo "secreto" que creamos de pequeños.

Su coach lo espera alegre en la puerta del estadio para guiarlo hacia su entrenamiento. Yo me quedo algunos minutos hablando con Marlene del viaje, nada interesante, pues no tengo ni un día aquí.

Terminando bajo del auto adentrándome en el estadio, no tengo ni idea en qué dirección ir, ni siquiera hay ninguna persona a la cual preguntarle. Seguí mi instinto, camino desorientada esperando encontrar la cancha o alguna persona o cartel que me pueda ayudar.

Reviso mi celular, un mensaje de mi mamá me había llegado. Pero ninguno de Diego (mi situación). Puedo decir que nuestra relación iba bien, a punto de formalizar pero tuvimos una plática muy tensa cuando slow dije que me iría al otro lado del océano. Acordamos que lo intentaríamos, pero ni siquiera se molesto en desearme un buen viaje, mucho menos acompañarme al aeropuerto.

Estaba tan concentrada viendo mi celular que no vi que alguien igual de distraído que yo se acercaba a mi dirección. El impacto fue tan fuerte que nuestros celulares caen al piso. Me agacho tomando rápidamente mi celular, acción que el imito y provoco que choquen nuestras frentes. Me llevo la mano a la cabeza con una mueca de dolor, mis mejillas se tiñen de rojo por lo avergonzada que me encontraba con la situación.

Levanto mi vista encontrándome con un chico que parecía tener mi edad, su cabello esta cubierto por el gorro de su hoddie, ojos castaños, alto y parecía verdaderamente molesto.

—¿Siempre eres tan distraída?— pregunta molesto y antes que pudiera responder vuelve a abrir su boca —Aquí no se permiten fans.

Que engreído, este chico.

—No soy una fan.— digo indignada por su actitud.

Suelta una carcajada metiendo las manos en sus bolsillos, trata de decir algo más pero es interrumpido por alguien detrás de él.

—¡Bienvenida!— esa voz la conozco muy bien, es...

—¡Pedri!—Me lanzo a él abrazándolo. —te extrañe.— digo aún en el abrazo.

Al separarnos puedo ver al castaño al confundido por la situación, Pedri le da una leve palmada por la espalda haciendo que este vuelva a la realidad.

—Ella es Cassie, mi mejor amiga.

—Tu dime Cassandra.— le extiendo mi mano con una sonrisa falsa.

—Soy Gavi, Pablo Gavi— me responde el saludo de inmediato.

—¿Se puede saber qué haces aquí?— Pedri ladea su cabeza curioso —¿Por qué no me dijiste que estás de vacaciones en Barcelona?

—Bueno...— hago una pequeña pausa para pensar como darle la noticia a mi mejor amigo, bajo mi mirada poniendo un mechón de cabello detrás de mi oreja y continúo. —Voy a vivir aquí— digo finalmente.

Abrió sus ojos sorprendido, esa fue la misma reacción que yo tuve, pero a deferencia de mi, el si esta emocionado.

Después de eso Pedri me acompaña junto con su amigo fastidioso a ver el entrenamiento de mi hermano. Pasa una hora y finalmente había terminado su entrenamiento. Ahora me encontraba sola con el insoportable Gavi, ya que, Pedri fue a saludar a Félix, mi hermano, lo quería como si fuera su propio hermano.

—Te caigo mal.— afirmó Gavi rompiendo el silencio incómodo que habíamos guardado por un par de minutos.

—No te conozco, no puedes caerme mal.— evado.

—Nuestra primera impresión no fue lo mejor.— su mirada va de la cancha hacia mi repetidas veces. —Perdón por eso, fui muy gilipollas.

Asiento levemente con la cabeza, mi mirada seguía pegada a mi hermano que hablaba divertido con Pedri.

—Empecemos de nuevo— continúo —Soy Pablo Gavi, un gusto— me extendió su mano esbozando una sonrisa.

Gire mi cabeza encontrándome con la mirada de Gavi, si no hubiera tenido esa primera impresión de él, en estos momentos babearía por el.

—Soy Cassandra— le devolví el saludo, con una genuina sonrisa, esta vez.

—Te dire Cassie— sonrió victorioso.

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Así es como comienza esta historia de amor.

Perdón por tardar horrores en actualizar, prometo que el segundo capítulo será más rápido y largo.

No se olviden de dejar su apoyo.

XOXO

Hilo Rojo | Pablo GaviWhere stories live. Discover now