Capítulo 3

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Evie.

Me encuentro con Kiara caminando hacia el club de golf para recoger a JJ a la salida del trabajo. Queda algo mas de media hora así que además pasaremos el rato tomando unos batidos en el lugar.

Cuando entramos la gente nos mira, y eso hace que me incomode un poco. Pero Kiara levanta la cabeza y camina hacia una de las mesas. En realidad ella es una kook, y yo vivo con una familia kook, no sé porque se extrañan tanto en vernos aquí, además, si podemos pagarnos lo que tomemos no entiendo porque esta fijación. Pero en fin, en general la mayoría de los kooks son unos clasistas.

—Ey chicas, decirme que queréis tomar.

La voz de JJ hace que salga de mis pensamientos y sin pensarlo le pido un batido de fresa y mango, y Kiara por su parte uno de chocolate. El nos deja pero en muy poco tiempo vuelve con los batidos listos.

—Mmm, tiene muy buena pinta. —Dice Kie.

—Muchísimas gracias. —Le digo sonriendo. —Espero que tengas el bañador aquí porque hemos pensado ir luego a la playa.

—Ouch, se me olvidó. —Dice riendo y Kiara le da un leve golpe en el brazo.

—¡Tio! Te lo dije ayer.

—Lo siento, tengo la cabeza en mil lados. —Le responde el rubio. —Igualmente mi casa pilla de paso.

—Te has librado entonces. —Le digo y los tres reímos pero una voz nos interrumpe.

—¡Eh, pogue! ¡Ven aquí!

—Oh, mierda, ya están aquí. —Nos dice JJ en bajo antes de irse a atender a esos clientes.

Giro mi cabeza para mirar a las personas y esas personas tan maleducadas son la familia Cameron. El padre trabaja en el ayuntamiento con Amelia y es una persona influyente en la isla, el se sienta junto a su mujer. También están dos de sus hijos, Sarah que es una chica de mi edad, y al parecer Kiara la odia por lo que me ha contado y Rafe, el chico desagradable de ayer.

—Odio a los kooks. —Dice Kiara. —Sólo miran por encima del hombro a quien no tienen tanto dinero como ellos.

—Y que lo digas. —Los miro de nuevo. —Pobre JJ trabajando aquí. —Río.

—Estará deseando que acabe su turno.

Reímos y seguimos charlando mientras nos tomamos los batidos. Cuando JJ termina el turno pasados unos minutos viene hacia nuestra mesa para que vayamos a la playa todos juntos.

—Estoy listo. —Dice el rubio y Kiara y yo nos levantamos de la mesa.

Cuando vamos a salir del local, al pasar por la mesa de los Cameron una voz nos detiene:

—Eh pogue, queremos más bebida. —La voz es de Rafe y lo dice en un tono bastante borde.

—Lo siento mucho, mi turno ha acabado. —Le responde JJ con bastante amabilidad en comparación con el tono que utilizó el.

—Te he pedido muy poco, vuelve y nos lo traes.

Escuchar a Rafe siendo todo lo arrogante que se puede ser en este mundo nos hace enfadar a los tres, pero en un impulso doy un paso hacia delante y le miro desafiante.

—Te ha dicho que ha terminado su trabajo. Si quieres algo ve al mostrador a pedir o espera a otro camarero.

—¿Y tu eres...?

—¿Que te importa? —Le digo en el mismo tono. —Ve a pedir, no te morirás por usar las piernas.

—Ya basta. —Dice su padre interrumpiendo esta tonta discusión. —Rafe, ve al mostrador.

El pone sus ojos en blanco y se marcha bastante enfadado. Nosotros mostramos una falsa sonrisa a los Cameron y salimos en cuánto podemos del club de golf. Al estar a unos cuantos metros del local nos miramos y estallamos en carcajadas.

—Eso ha sido tan... surrealista. —Dice Kiara entre risas.

—Y que lo digas. "Dame bebida, dame bebida". —Repite JJ en un tono burlón intentando imitar a Rafe. —Como ha dicho Evie, que use las piernas.

—Es que los ricos... se acomodan demasiado a no hacer nada. —Digo riendo.

—Espero que a Rose no la hable asi. —Dice JJ refiriéndose a la mujer de Ward Cameron.

—Debe de ser horrible aguantar a ese chico. —Rio.

Después de comentar lo sucedido caminamos hacia la playa, pasando antes por casa de JJ para coger su bañador y de paso un par de tablas. Al llegar dejamos las cosas en la arena y sin pensarlo vamos al mar para surfear. Siempre me ha encantado surfear, desde que era muy pequeña, pero hacerlo con amigos es algo muy distinto, es más divertido. Para mi, es una de las mejores formas de pasar el rato.

Tras surfear durante casi una hora Kiara sale del agua y nos quedamos JJ y yo, cada uno sobre su tabla tumbados tomando el sol en medio del mar, pero a una distancia prudente.

—Ev. —Su voz hace que salga de mi trance.

—¿Si, JJ?

—Quería hablar contigo sobre... lo que ocurrió antes de verano.

Inevitablemente me tenso levemente y decido incorporarme y sentarme sobre la tabla con una pierna a cada lado, ya que es como el esta sentado.

—Claro, yo también lo había pensado.

—Antes de lo de tus padres íbamos a comenzar algo... una relación ¿no? —Me mira y simplemente asiento. —Y cuando te marchaste... pues no pudo ser. Pero ¿que nos impide retomarlo?

—JJ... yo...

—No tiene por que ser ahora, Evie. —Dice sonriendo levemente. —Pero quiero que sepas que yo si que lo retomaría.

—Necesitamos tiempo. —Le miro. —Mi vida a ha cambiado mucho en poco tiempo y no sé si estoy lista para una relación.

Ambos suspiramos levemente y aguantamos en silencio durante unos segundos.

—Ademas, comenzaré el curso en la academia Kook en unos días.

—Está bien, me ha quedado claro.

Tras decirme eso comienza a remar hacia la orilla y yo simplemente me quedo mirando como se marcha hacia la orilla.

JJ fue mi primer mejor amigo, pero con el tiempo nuestra relación cambió y unos días antes de la muerte de mis padres mi primer beso. Habíamos estrechado tanto nuestra relación que en una noche de fiesta decidimos dar el paso. Todo iba genial, hasta que pasó lo de mis padres. Y ahora mismo se que no puedo comenzar una relación por mucho que me guste una persona. No ahora que voy a comenzar una vida en Figure Eight y cada vez estaré mas lejos del arrabal, y de mis amigos.

Let me go || Rafe CameronDonde viven las historias. Descúbrelo ahora