Capítulo 25

2K 117 5
                                    

Evie.

Inevitablemente me pongo más nerviosa que nunca, como si mi cuerpo de un flan se tratase. La silueta de Rafe aparece detrás de mi primo; con un bañador de color azul que incluso combina con sus ojos claros y sin camiseta, dejándo ver su abdomen marcado. No es la primera vez que lo he visto en bañador, pero creo que sí es la primera vez que admiro desde la distancia su marcada figura.

—No, dijimos que sería un día para nosotros. —Se queja Asher. —Iros.

—Venga, sólo son dos. —Dice Topper.

—Claro y una de ellas es tu novia. —Le contesta.

Topper le mira mal y Rafe da unos pasos hacia adelante: —¿Qué mas da? Ya han estado aquí algún que otro día más.

Asher sigue negando con la cabeza.

—Si tanto molestamos nos vamos. —Les contesto. Ambas nos levantamos del borde de la piscina y caminamos hacia nuestras toallas.

—Oh Ash, enróllate. —Insiste Topper.

—Que no. —Digo molesta.

Bajo la atenta mirada de todos Sarah y yo tomamos nuestras toallas y nos secamos con rapidez. Los chicos miran a Asher que sigue algo enfadado y comienza a resoplar debido a cómo le están mirando.

—Está bien, podéis quedaros.

Sarah y yo nos miramos y comenzamos a reír. Ambas sabíamos que mi primo iba a ceder tarde o temprano y así lo ha hecho. Aunque hay que reconocer que la culpa completamente ha sido de sus amigos que le han suplicado con sus miradas.

—Genial. —Decimos a la vez.

—Os odio a todos. —Dice Ash.

Todos nos reímos debido a su enfado, los chicos rápidamente corren hacia la piscina y se lanzan. Nosotras por nuestra parte volvemos a donde estábamos antes; en el borde de la piscina solamente con los pies metidos.

Asher había sacado unos cócteles que habian preparado, la verdad algo subidos de alcohol, pero bastante ricos igualmente.

—Oye chicas, ¿por qué no os meteis? —Pregunta Topper.

Sarah me mira y sonríe, creo que el alcohol ya la hizo algo de efecto y después de una leve carcajada se mete y va hacia los brazos de su novio. Contemplo la situación y niego levemente con mi cabeza, creo que lo más sensato es tener algo de distancia con respecto a Rafe.

—Oh, venga, ven aqui. —Exclama Sarah.

—Déjenme tomar el sol. —Digo riendo.

—¡No! —Rie de nuevo. —Métete.

Niego de nuevo con mi cabeza y Sarah rueda los ojos y se gira hacia su novio, se agarra de su cuello y comienzan a darse besos por lo que la atención ya no está en mi.

Mientras consulto mi teléfono para saber si tengo algún mensaje, una figura se acerca desde el otro lado de la piscina hasta donde estoy yo. Su cabello rubio oscuro debido al agua de la piscina delata quien es. Y cuando levanto mi mirada del teléfono me asusto un poco al verlo a mi lado.

—¿Por qué no te unes a nosotros? —Me pregunta Rafe.

—Yo... no quiero mojarme el pelo.

El suelta una carcajada totalmente falsa. Sabe que es una excusa, y apoya su cuerpo en el borde de la piscina para no mirarme a mi, quedando en paralelo a mi.

—Yo sé que no quieres enfrentarte a...

—¿A qué? —Digo interrumpiéndole.

—A mi. —Me mira un segundo y después vuelve a su posición.

Muerdo levemente mi labio sin que pueda percibirlo. Lo miro negando, el se gira para enfrentarme y arquea su ceja.

—¿Qué?

—Que no eres tan especial como te crees. —Me rio.

Rafe me mira desafiante: —Yo no me creo especial.

—Pues entonces no pienses que eres el centro de mi universo.

—No lo pienso. Pero algo de especial seré si soy el primer kook al que besas.

En ese momento me sorprenden sus palabras y casi me atraganto con mi propia saliva. Está claro que está manejando la situación a su antojo y suelta una leve carcajada.

—Eres un creído.

Le miro y le saco el dedo mientras él no para de reir. Me levanto del borde de la piscina y camino hacia dentro de la casa, voy a la cocina ya que es ahí donde está el alcohol que habían preparado los chicos.

Cuando me estoy sirviendo la bebida en el vaso escucho como se abre la puerta.

—Venga, espero que no te hayas enfadado por lo que te he dicho. —Dice la voz de Rafe a mi espalda.

—No, solamente no me gusta tu egocentrismo. —Digo mientras me giro y veo como camina hacia donde estoy.

—¿Egocéntrico yo? —Ríe.

—¿Enserio piensas que no? —Digo en un tono divertido. Fuera de bromas, es el chico más egocéntrico de todo Figure Eight.

—No lo soy. —Dice tajante. —Solo he asumido ciertas cosas que son... verdad.

Dice mientras cada vez se acerca más a mi. Yo doy un paso hacia atrás y choco contra la encimera, impidiendo que pueda huir.

—No lo son.

—Ajá... —Dice jugando con su vaso. —Y supongo que además de no querer enfrentarme, tampoco quieres repetir lo de ayer.

Me quedo unos segundos pensando, y a la vez mirando inevitablemente sus labios. Me gustaría decirle que si, pero darle la razón a un kook en esto va contra mis principios de pogue.

Afortunadamente el timbre suena, y hace que no tenga que contestar a la pregunta.

—Voy a abrir. —Le digo algo nerviosa.

El no dice nada, simplemente me mira con una gran sonrisa en los labios, como si hubiera alcanzado su mejor victoria ahora mismo.

Cuando voy a abrir la puerta, la figura de JJ es quien está al otro lado. Sus gafas y gorra no me permiten ver su cara, pero puedo percibir algo de frialdad tras ellas. No olvidemos que aún estamos enfadados.

—¿Que necesitas JJ?

—Traigo este pedido que hizo Asher. —Dice señalando sus bolsas.

—Oh, está bien.

Estoy por girarme para ir a avisarle para que sea quien pague la cuenta, pero antes de que de un paso JJ me interrumpe.

—¿Que hace Rafe ahi? —Murmura.

—Estamos en la piscina. Osea, todos. —Digo nerviosa. —También esta Sarah y algunos kooks.

—¿Todo bien?

Rafe camina hacia donde estamos y se coloca a escasos metros de mi. No sé por qué pero me siento bastante intimidada y no quiero que la situación me supere.

—Si, ve a buscar a mi primo y dile que venga. —Le ordeno.

Rafe se va, y a los minutos vuelve Asher. Mientras, tanto JJ como yo permanecemos en un silencio completamente incómodo. El mira su teléfono y yo simplemente espero ya que olvidé el mio en la cocina.

—Toma. —Le da el dinero Asher y toma las bolsas. Seguidamente se va.

—Bueno Ev... Espero que disfrutes mucho de tu fiesta de kooks... y de tu nueva vida supongo. —Dice mientras se aleja. —Se te ve bien.

Lo miro y no digo nada. No merece la pena y sé que lo dice porque está herido, pero a la vez causa un daño que no merezco.

Cada día me duele más y reconozco menos al que era mi mejor amigo...

***
Espero que os guste!!

Siento haber tardado pero entré en vacaciones y tengo el menor tiempo del mundo posible :(
Pero como parece que os está gustando bastante voy a intentar actualizar lo mas seguido posible.

Muchos besitos <3

Let me go || Rafe CameronDonde viven las historias. Descúbrelo ahora