Capítulo 21

2.9K 139 4
                                    

Evie.

Por la mañana nos despertamos temprano para ir a la academia. Por suerte Sarah y yo tenemos la misma talla de ropa y me puede dejar una camisa ya que llevaba sin pasar por mi casa desde la mañana anterior.

Cuando bajamos a la cocina para desayunar nos cruzamos con Weezie que se une a nosotras tras saludarnos. Y una vez entramos alli, Rafe está sentado tomando un café. Es como si el ambiente se tensase porque nadie dice nada, solamente cruzamos miradas con el rubio tanto Sarah como yo.

—Hola. —Dice finalmente él.

—Hola. —Murmuramos las dos a la vez en el mismo tono algo seco.

—¿Dormiste bien, Rafe? —Dice Sarah en un tono algo irónico.

—Ajá. —Le responde moviendo su taza de café.

—¿Que esta pasando aqui? —Interviene Weezie. —Estáis demasiado raros, más de lo normal y eso ya es decir.

Rio levemente ante el comentario y comienzo a hacerme un colacao mientras ellos "discuten". Sarah ha entrado en pose de discusión: cruzando sus brazos y poniendo cara de superioridad.

—Que tienes un hermano idiota. —Dice Sarah. —Aunque es algo que ya sabíamos.

Rafe la mira mal: —¿Podrías dejar de ser una incordiosa? No te hice nada, así que cambia esa cara de perro que traes.

Sarah se sorprende levemente y se acerca a el poniendo sus brazos sobre la mesa. Antes de que haga nada me adelanto y coloco tres tazas sobre la mesa interrumpiendo el panorama para evitar algo mas gordo.

—El desayuno esta listo. —Digo cortando todo tipo de discusión. —Sarah tu ponte a este lado. —La mando lejos de Rafe. —Y Weezie, tu al lado de tu hermano ¿si? Que haya dos personas entre medias de estos dos.

—Menos mal que alguien es coherente aqui. —Dice Weezie. —Y que pena que no sea ninguno de mis hermanos. —Murmura bebiendo de su taza.

—Es que Sarah me saca de quicio. —Dice Rafe enfadado.

—¿Y tu a mi que? —Le responde ella.

Miro a Weezie, se ve agotada la pobre. Seguro que estas discusiones son más habituales de lo que parece. Figure Eight al final no es tan idílico como lo pintan.

Desayunamos en completo silencio, por suerte. A veces Weezie me comenta algo pero todo vuelve al silencio de nuevo. Rafe nos abandona un poco antes de que nosotras acabemos de desayunar.

—Nos tienes que llevar al insti en tu camioneta. —Grita Sarah.

—Ajá... —Se oye desde lejos.

—¿Nos llevará? —Pregunto a las hermanas.

—Seguro que si, ya verás. —Me dice Weezie.

—Claro que lo hará. Y si no se lo diré a papá. —Dice Sarah.

—Sois como niños pequeños, ya teneis una edad. —Le digo a Sarah.

Ella se encoge de hombros: —Hay cosas que nunca cambian.

Terminamos de desayunar. Al poco rato estamos completamente vestidas de uniforme, con la mochila y listas esperando a Rafe en la puerta de la casa. Aunque el no le contesta. Sarah le ha llamado por dos veces y cuando va a ser la tercera justo aparece.

—Llegaremos tarde.

—¿Y? Nunca toman asistencia. —Dice Rafe con tranquilidad.

—Venga Sarah, tiene razon. —La digo. —No pasa nada por llegar diez minutos tarde.

Sarah se calla y entra en el coche, en la parte trasera dando un portazo. Por lo que nos deja a ambos en la parte de alante.

Una vez en el coche Rafe comienza a conducir cada vez más rapido y es algo que no me hace gracia del todo. Lo último que querría es que mis amigos pogues encontrasen mi cadavér junto a los Cameron, seguro que de esa manera no irían a mi funeral.

—Rafe, te estas pasando. —Dice Sarah.

—¿No te quejabas de que ibais a llegar tarde? —Le contesta Rafe.

—Deberías haber salido antes, no ir casi al doble de velocidad.

—Es cierto, Rafe vas muy rápido. —Digo apoyando a Sarah.

Rafe rueda los ojos y pone su pie sobre el freno, llegando a ser algo brusco. Ninguna de nosotras se atreve a decir nada, y hasta que llegamos a la academia los tres estamos en completo silencio.

Nada mas llegar Sarah se baja y sale del coche dando un portazo. Me quedo un segundo y miro a Rafe.

—Gracias, supongo. —Digo agarrando mi mochila.

Cuando estoy por salir Rafe toma mi muñeca haciendo que me detenga. —Evie, siento... haber sido un capullo.

—¿Que? —Digo sorprendida ante su cambio de actitud.

—Por lo de anoche.

—¿Y lo del desayuno y lo de ahora?

—También... —Acepta en un suspiro.

—Se te da bien ser un capullo, ¿sabias? —Le contesto en tono burlón.

Sarah me llama desde la distancia y termino bajándome del coche por completo.

—Te lo compensaré. —Dice antes de que me vaya y eso hace que me sorprenda. —Te demostraré que no soy así.

—No tienes porque demostrarme nada.

—Quiero hacerlo. —Dice tajante.

—Está bien. Piensa en algo para el fin de semana, ¿si?

Rafe asiente, y seguidamente cierro la puerta del coche. Voy hacia la academia en busca de Sarah que se ha quedado en la puerta esperándome algo molesta.

—¿De qué hablabais? —Pregunta la rubia. —Ya es suficientemente tarde como para que te entretenga.

—Se disculpó.

—¿Por qué?

—Por haber sido un capullo durante la mañana de hoy... —Digo mientras me encojo de hombros.

—¿Solo eso? —Pregunta no muy convencida.

Asiento. La verdad es que no quiero mentir a Sarah, pero ahora mismo no sé si la llegaría a molestar si la confieso que Rafe quiso quedar conmigo. Cómo su relación de hermanos muchas veces se tambalea, quizás lo mejor es no contarle nada de momento.

Y en ese preciso momento la profesora nos interrumpe.

—Cameron y Sanders, ¿sabéis que el timbre ha sonado hace más de veinte minutos?

—Si, lo sentimos mucho. —Digo mirando hacia el suelo.

—Se averió el coche de mi hermano y por eso hemos llegado tarde. —Dice Sarah mintiendo.

—¿El que acabo de ver marcharse por la ventana?

Nos miramos la una a la otra y la situación se vuelve a completamente incómoda. No solo hemos llegado bastante tarde, sino que la profesora nos ha pillado mintiendo.

—Al despacho del director. —Nos ordena.

La profesora vuelve hacia dentro de la clase cerrando de un portazo. Nosotras comenzamos a reírnos en cuanto nos alejamos por el pasillo. Hacía mucho tiempo que no me pasaba algo así en el instituto, aunque antes con JJ era muy habitual que estuviéramos metidos en un lío.

Y a pesar de que no fuera lo mismo que con los pogues, cada vez me estaba sintiendo más acogida entre personas como Sarah, y eso que meses atrás era algo que para mí era impensable.

Let me go || Rafe CameronWhere stories live. Discover now