𝐃𝐎𝐍'𝐓 𝐁𝐋𝐀𝐌𝐄 𝐌𝐄; 𝐒𝐢𝐫𝐢𝐮𝐬 𝐁𝐥𝐚𝐜𝐤 ✓

𝐏𝐑𝐎𝐋𝐎𝐆𝐎

ENERO 1970

Dos pelirrojas y una rubia se encontraban jugando cerca de un pequeño lago que se encuentra cerca de la casa de vacaciones que su padre tenia en Gales.

La mayor de las hermanas era Petunia Evans, era mayor por dos años.

Luego seguían las mellizas, Hasley y Lily Evans. Ellas eran las pelirrojas de la familia aparte de su madre.

Hasley que estaba por derribar a su hermana mayor, Petunia, pero se detiene al ver cómo Lily hacia florecer una flor que estaba marchitada.

—¿Qué haces Lis? — pregunta su hermana melliza al llegar a su lado — ¿Cómo hiciste eso?

—No lo sé, Has —Dice su hermana viéndola — ¿Es magia?

Petunia venía amargada porque ninguna de sus hermanas le habían seguido hasta que noto como Lily hacia levitar la flor.

—¡Eres un monstruo! — Dice Petunia gritando hacia su hermana.

—¡Cállate Pesuña! —dice Hasley, vio como Petunia salio corriendo. Suspiro porque sabia que la mayor se iría a quejar con su madre, rodo los ojos para luego ir detrás de ella —Yo lo siento —dice yendo tras ella y dejando a su melliza dejando caer su flor, algo decaída.

La pelirroja trataba de alcanzar a su hermana mayor, pero luego noto como una serpiente se acercaba hacia la mayor de las Evans.

No era muy raro ver una serpiente pero si era muy común.

En un movimiento rápido, Hasley agarra la navaja que su padre le había dado en casos especiales, y lo tira a la serpiente que está en el aire por morder a Petunia.

Petunia grita al ver la serpiente desangrándose, y mira a su hermana al ver cómo tenía buena puntería.

—¿La mataste? —dice temblando.

—¿Quería que te matará la serpiente? — dice Hasley sarcástica. —Ni me hubiera arrepentido de dejar que te muerda.

Era el cumpleaños número 11 de las mellizas Evans. Lily había invitado a las amigas de su colegio, mientas que Hasley miraba todo con una cara de querer escapar.

No tenía ni idea como Lily había hecho amigas como ellas, eran presumidas, arrogantes y siempre fingía. Utilizaban a Lily solo para las tareas.

Hasley no tenia amigos. Ella decia que ninguno podria aguantarla, su carácter. Y casi nadie se le acercaba por temor a la que la pequeña Evans les amenazara.

La pequeña reunión había acabado, Hasley estaba por bajar de su sitio. Hasta que ve por la ventana a Dos lechuzas, una blanca y otra negra.

Las dos lechuzas se paran en la barra de la ventana.

Eran cartas lo que traía en sus picos.

Hasley pensaba que el perfume de las amigas de Lily ya le estaban haciendo alucinar.

—¿Esas son lechuzas? — preguntas Lily llegando a su lado.

—¡Pensé que estaba loca! —dice Hasley agarrando una de las cartas. Era de la lechuza negra.

Al abrirlo le sorprendió lo que leyó.

Señorita Hasley Evans:

Le invitamos cordialmente a El Instituto Durmstrang, un colegio de magia, aquí le podemos enseñar magia oscura, a defenderse con las armas, a ser una guerrera.

Normalmente entran los de sangre pura, pero con usted haremos una excepción, queremos probar que será una buena guerrera.

Envié una carta antes del primero de junio.

Hasley estaba por hablar cuando Lily le gana.

—¿Te llegó la misma carta de Hogwarts? —pregunta Lily emocionada.

— ¿Hogwarts?

Las mellizas intercambian las cartas para leerlas a cada una.

Hasley entiendo que por primera vez iba a estar separada de su melliza.

Lily no quería separarse de Hasley porque ella era su mejor amiga.