No me gusta estar sin mi Tommy, me siento sola y se que separados nos ven mas débiles; siempre nos defendemos entre ambos, los adultos dicen que somos la mitad del otro, yo creo que tienen razón, Tom es mi otra mitad y siempre lo será.
-Callie. -escuche detrás de mi.
Suspire e ignore a la tonta chica mayor, hace unos días me corto el cabello sin que me diera cuanta y ahora lo llevo hasta los hombros, por eso lo peino en una cola de caballo.
-Ya termine mi castigo Callie. -Tom llego a mi lado y le lanzo su peor mirada a Lee Anne.
-Que bueno Tommy, aun creo que es injusto que nos castigaran. -hice una mueca y el beso mi nariz.
Me sorprendió porque a el no le gusta demostrar su amor por mi frente a nadie, pero no me queje, solo bese su mejilla y el me sonrió.
Se escucho un bufido de otras de nosotros, pero yo lo ignore, ya quiero que seamos lo suficientemente mayores para poder trabajar y poder irnos de aqui; cada vez nos tratan peor y se que no vamos a aguantar mucho mas.
-Dejame ayudar con eso. -me quito el lápiz y siguió con mis matemáticas.
Sabe que las aborrezco.
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-¿Se te perdió algo Peter? -lo miro mal.
Levante la mirada, el chico mayor nos miraba de una extraña manera.
-No, lo siento Tom. -volvió a su tarea.
Extraño.
Tommy tomo mi mano y la guardo en su bolsillo como siempre, nunca entendí porque hace eso, pero me agrada, se que así se asegura de tenerme junto a el y de cuidarme.
(...)
-¿Crees que si lo guardo aquí, se lo roben? -le pregunte mostrando su caja de "tesoros"
-No, nadie toca ya nuestras cosas. -me sonrió.
Hace poco los mayores me empezaron a ofrecer dinero a cambio de que yo haga sus tareas, ya sea de escuela o de limpieza, solo acepte porque estoy juntando ya el dinero y se que Tommy lo que roba, lo guarda también.
-Una moneda menos. -sonreí.
-Cuando nos vayamos juntos, ¿tendremos una gran casa o una pequeña? -me miro con curiosidad.
-Pequeña, pero con un gran jardín, yo tendré mi huerto personal y tu vas a ayudarme. -aplaudí emocionada.
Tommy sonrió y negocio mirándome.
-Te pondré una pastelería, se que te encantan los postres. -tomo mi mano y la beso.
Mis ojos brillaron de la emoción y lo abrace con fuerza.
-Se que nuestras vidas van a cambiar, todo mejorara Tommy y siempre estaremos juntos. -le un pequeño beso en los labios.
El sonrió y asintió.
-Siempre Callie. -beso mi mano.
Ahora que no nos dejan salir de la habitación mas que para ir a estudiar, para cumplir con las tareas, los castigos y para estudiar; Tom y yo entrenamos a nuestras mascotas, les un par de cosas y Tom, bueno el les enseño que robar y a quien. En unos unos meses cumpliremos once, los niños mayores van a querer que por esa razón nosotros hagamos mas de sus tareas y mientras nos paguen, yo lo hago con gusto. Tom no lo va a aceptar, lo haré yo n su lugar, también me gustaría investigar quienes son nuestros padres y porque no nos quisieron.
-Callie mañana nos van a llevar a hacer las compras, ¿podrías cocer ese bolso escondido dentro de mi pantalón? -me lo entrego.
Asentí y tome las cosas que iba a ocupar, desde hace unas semanas comenzamos a robar comida, la que nos sirven sabe cada ves mas extraña y Tommy dice que es mejor no confiarnos; quizá si nos quieran matar.
