Día Nevado

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Callie y Tom se encuentran terminando de pintar la pared, unos chicos mayores les pagaron por hacer su trabajo y después tenían que hacer tarea.

-Quita esa cara Tommy, ya tenemos un buen dinero guardado. -Callie pico su mejilla.

Tom la miró y negó con una sonrisa.

-Eso ya lo sé Callie, pero esos idiotas ya nos dan trabajo pesado, casi te caes de la escalera. -murmuro enojado.

Callie acaricio su rostro y dejo un beso rápido en sus labios.

-Se que tú me hubieras atrapado. -dijo un toque juguetón en su nariz.

El asintió y comenzaron a recoger todo, no podían dejar que las monjas los vieran a ellos.

-¿Quieres ir a lavar los trastes o hacemos la tarea de Langdon? -Callie le sonrió.

Antes de que Tom pudiera decir algo, un copo de nieve cayó justo en su nariz, sonrió al saber lo que seguía.

-¡Tommy va a nevar! -lo tomo del brazo y dio uno cuantos brincos.

Tom beso su cabeza.

-Vamos a terminar los pendientes, así cae mas nieve y salimos. -tomo su mano y la metió a su bolsillo.

Callie dio un grito de felicidad y beso la mejilla de Tom.

...

Callie y Tom apenas pudieron salir de la cocina sin ser vistos, pero después de lavar los trastes Callie quiso unas galletas, pero ambos se llevaron la gran sorpresa de ver un gran bote de veneno para ratas.

-Sabia que si nos querían muertos. -murmuro entre dientes.

Callie solo tomo su mano con fuerza, no podía creer lo que veía.

-Solo vamonos Tommy. -dio dos pasos hacia atrás.

El asintió y juntos salieron de ahí.

Cuando llegaron a su habitación, Tom daba vueltas por todo el cuarto, estaba furioso, quería venganza con tras todos en ese lugar, ¡Por culpa de esa maldita gente, casi perdió a su querida Callie en mas de tres ocasiones!

-¿Que vamos a hacer Tommy? -preguntó sacándolo de sus asesinos pensamientos.

Se detuvo y la observo, fue hacia su lado y la tomo del rostro.

-Hagas lo que hagas no comas nada, yo encontrare la manera de Alimentarte. -su voz detonaba miedo, uno que solo sentía por ella.

-Lo juro Tommy, no vamos a comer nada, ni tu ni yo. -junto su frente con la de el.

Tom suspiró y asintió.

Ahora mas que nunca debían de salir de ese lugar, no solo la lastimaron física y mentalmente, ahora de verdad los querían muertos.

-Tommy, mis pastillas. -se llevo la mano a la garganta.

El se levanto con rapidez y fue hacia su armario, tomo una pequeña caja que tenia el medicamento de Callie.

-Toma. -le puso la pastilla frente a ella.

Callie solo abrió la boca, Tom la metió y se sentó junto a ella.

Cada vez son mas pastillas, ni siquiera nos dijeron para que las necesita. -Tom pensaba mientras la miraba frustrado, por primera vez no sabia como ayudar a su amada Callie.

-Estoy bien Tommy. -sonrío de lado y acaricio su rostro.

-Solo quiero saber como ayudarte Callie. -mordió su labio.

El nunca dejaba ver nada, ni un solo sentimiento, pero con ella era diferente, con ella no había necesidad de levantar sus muros y poner su mascara.

-Lo haces, estas conmigo Tommy. -beso sus labios.

-Nunca me iré Callie, aun que tu quieras lo contrario, siempre estare a tu lado. -beso su nariz.

Ella tomo sus mejillas y lo miro con amor.

-Nunca querré que te alejes de mi, eres mi otra mitad ¿recuerdas? -acaricio su nariz con la suya.

El sonrió.

Tom sabia algo con toda seguridad y eso es que el haría arder al mundo solo por ella; nadie se iba a meter con ella y salir vivo después.

Goodbye Agony (Tom&Callie)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora