Capitulo 1

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¿Alguna vez has sentido que eres la persona más feliz del mundo?

Que nada podría terminar con esa emoción.

Te aferras tanto a este sentimiento que el simple pensamiento de que lo que te provoca esta emoción se fuera, te aterra más haya de lo creíble.

Pero llega la cruda realidad de que solo fue temporal.

Y

Se termina dejando un sin fin de emociones nada buenas, sientes que nada tiene sentido.

El vivir ya no es como era antes.

Te sientes vacío.

Piensas en el suicidio por demasiado tiempo.

Tu cabeza siempre duele, tu cuerpo se siente frío como si hubieras muerto dejando nada mas que un cadáver andante de lo que antes era tu persona.

Este mar de emociones era expulsada por un rubio que tenía sus orbes cerúleos sin brillo alguno.

Naruto se sentía muerto por dentro. Hace algunos meses había dejado embarazada a Liz, él no sabía como era posible esto por causas obvias o eso fue hasta que se enteró de que en realidad si tenía la capacidad para reproducirse como los humanos.

Tiempo después, Liz dio a luz a un bebé castaño de ojos azules con sus características orejas de zorro y 2 colas llamativas de color marrón-rojizo. Naruto era la persona más feliz, aunque no entendiera mucho de las emociones sabía que estaba lleno de felicidad por el nacimiento de su hijo.

Luego pensó que necesitaba aprender todo acerca de los humanos, yendo a la biblioteca pública de la aldea en la que tenía muchos libros de casi todo. Estudio como nunca y en menos de 1 semana termino de leer más de 250 libros.

Y ahora ese estudio lo utilizó para cuidar de su hijo. Pero este no era el motivo de la depresión de Naruto.

Lo que tenía muerto por dentro al rubio, era que nada más meses después de que nació su hijo. La madre de este empacó sus cosas y se marcho de Uzushiogakure.

Liz había dicho que no estaba lista para tal responsabilidad y que él como padre de dicho niño debía de hacerse cargo, el rubio se sintió devastado. Y lo que más le dolió fue ver como cuando se iba a despedir de ella, en realidad se estaba escapando con un noble estúpido.

La sensación de ser usado le llegó, solo fue eso para ella. Alguien que podría usar para su satisfacción personal y desechar cuando su utilidad terminará.

Sintió unas enormes ganas de abrirle el estómago a ese tonto y obligar a Liz a tragarse las tripas de este. Pero se controló e intento cuidar de su bebé, pero cuando paso el tiempo sintió un vacío que no podría ser llenado. Quería suicidarse y terminar con este dolor, pero se obligo a soportarlo por su hijo. Nunca lo supo pero se había enamorado de Liz, sus sentimientos por ella fueron los de una persona que daría todo por su amor, llegando al extremo poner su vida en peligro e incluso a tal punto en el que no le importaba asesinar o destruir el mundo solo por ella.

Y la castaña nunca lo sabría, pero desperdició el amor genuino de alguien que estaba caminando entre la Luz y Oscuridad. Este fue un empujón para que sus pensamientos oscuros que siempre se guardaba para el, salieran a la superficie.

Es por eso que en este momento tenía pensamientos en los cuales involucraban mucha sangre.

El sollozo de su hijo saco a Naruto de sus pensamientos, levantándose del sofá se acerco a la cuna de madera en la que el pequeño castaño se movía inquieto.

Con una pequeña sonrisa lo cargo haciendo que su hijo deje de llorar—. Al parecer alguien no puede estar alejado tanto tiempo de su padre —comentó viendo la sonrisa chimuela del pequeño castaño que provoco una pequeña risa en Naruto.

JūbiWhere stories live. Discover now