Sensaciones Peligrosas [Jenlisa] [En Edición Y Reconstrucción]

CAPÍTULO 5 Esto puede ser peligroso...

-Lisa no te duermas.

Me enderecé en el asiento del coche y asentí ante las palabras de Jisoo.

Eran aproximadamente las 23:56 hrs, estábamos enfrente del banco principal que podía ser el objetivo de felina en esta ocasión. Karina estaba cubriendo a un guardia de seguridad, ella sería nuestros ojos dentro del establecimiento, por otro lado, Tae y Jeongyeon se encontraban en la parte trasera del banco por si habían movimientos sospechosos.

(¿Karina? ¿Cómo va todo allá dentro?)

Escuché a Jisoo usar el radio.

((Sin ningún movimiento por ahora))

Suspiré, estaba cansada y por lo que notamos, sería una larga noche e incluso madrugada por si esa mujer se aparecía.

Me gire hacia Jisoo al escuchar algo crujir. Levanté una ceja.

-¿Otra vez, Chu?

Se encogió de hombros y siguió comiendo como si su vida fuera acabar en pocos minutos. Era una maldita tragona y tenía un cuerpo de infarto, gire mis ojos y me enfoque en banco. Las rejas estaban cubriendo gran altura del banco, las puertas cerradas y ventanas camufladas, sería difícil para esa mujer entrar, pero no nos podíamos confiar, bostezando me acerque un poco más a la ventanilla y mire le cielo. La luna estaba hermosa y unas cuantas estrellas iluminaban el cielo, sonreí...

Vaya, no sabía que mantenimiento revisaba el techo del banco a esta hora.

Me acomodé en el asiento y cerré mis ojos unos segundos. ¿Mantenimiento? ¿Casi a media noche? ¿Techo...? ¡Mierda!

Me sobresalte y escuche la tos estruendosa de Jisoo a mi lado.

-¡Carajo Lalisa! Casi muero por tu culpa ¿Ahora que mierda te pasa?

Ignoré sus palabras y encendí el radio.

-¡Jeongyeon, Taehyung, Karina! ¡Hay alguien en el techo del banco! ¡Ahora!

-Pero ¿Qué?

-Muévete Kim

Ella rápidamente se recompuso, tome mi arma, me quite la chaqueta y salí del auto.

El viento era como una fibra delgada de hielo corriendo por mi cuerpo, pero la adrenalina hacía que mi sangre bombeara el calor en mis articulaciones. Me adentre por un pequeño espacio que habíamos dejado entre las rejas negras para poder adentrarnos sin llamar tanto la atención.

Sentía los pasos a mis espaldas, así que verifique que Jisoo estuviera a mi lado. Caminamos o mejor dicho trotamos por el lateral derecho del banco, hicimos los posible porque nuestros pasos no fueran alguna señal de alerta, al llegar a una esquina le hice señas a Jisoo sobre una pequeña ventana que dejamos abierta, me ayudó a subir gracias a sus manos para impulsar mi pie. Al estar casi arriba estiré mi mano y con fuerza tire de ella hacia mí, debo decir que mis brazos me estaban matando, pero no podía estar sola, Karina no había respondido y me preocupaba que estuviera en peligro.

La entrada no fue tan difícil, gracias a mis indicaciones, Karina había habitado un pequeño banco para nuestro aterrizaje, así que lo siguiente sería buscarla.

Jisoo me miró y señaló hacia la entrada principal.

-Cubriré el norte

Asentí y caminé por el pasillo hacia la caja fuerte.

El silencio era absoluto y algo inquietante en todo el lugar. Habían luces muy tenues en los pasillos, pero mis sentidos se alertaron cuando note el movimiento de una luz blanca que se movía en varias direcciones.