Niños de Guerra | KTH+JJK

(๑0 1๑)

-Historia con contenido homosexual.

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Si esta es la segunda o tercera vez que lees el fic no hagas spoilers o tremendo sape que te voy a dar. 😊

02 de Noviembre de 1941.

Jungkook.

El pequeño niño con saco largo; café y una estrella amarilla de lado derecho de su pecho iba camino hacia su escuela, daba saltos de felicidad; el día de hoy entregaría un cuento que le costó una semana terminar; que por cierto; para su edad había quedado perfecto.
Saludaba a cada persona que veía pasar, el señor Howard (el panadero), la señorita Hazel (La bibliotecaria) etc.
Al llegar a la escuela limpió sus zapatos café para evitar ensuciar el suelo blanco, subió las escaleras hasta llegar a su aula y fue directo a su lugar.

Hola Jungkook ¿Trajiste tu cuento?- Dijo una niña pelirroja llamada Samantha.

―Por supuesto, fue un arduo trabajo, pero por fin logré terminarlo ¿Y tú? ― Mencionó Kook con una sonrisa.

―No, lo olvidé ¿Puedes creerlo? Lo dejé en mi escritorio, también trabajé duro en él; y justo hoy se me olvida. ― Dijo Samantha poniendo sus manos en cada lado de sus rosadas mejillas.

―No puede ser, la profesora Margareth te castigará. ―

—Gracias por tus ánimos Jeon, me siento menos preocupada.— Dijo la pelirroja sonando lo más sarcástica que pudo.

—Lo siento, pero es la verdad...

Antes de que uno de las dos pudiera mencionar una palabra; entró una mujer de baja estatura, cabello castaño, maquillaje demasiado cargado con un intensos labial rosa, de unos 50 años. Si, la profesora Margareth había entrado al salón.

—Buenos días niños.—

—Buenos días.—Dijeron todos los niños levantándose se sus bancas.

—Adelante, pueden sentarse.

Todos hicieron caso y tomaron asiento.

—Bien, ¿trajeron la historia que les pedí?

Algunos niños respondieron con un "si" o "claro" pero otros; simplemente veían a sus demás compañeros.

—De acuerdo, pueden pasarme sus trabajos.— avisó la mujer.

La mayoría de lo niños se levantaron de sus lugares a entregar su trabajo.

—De acuerdo, muchas gracias a los que cumplieron, de acuerdo; vamos a comenzar con nuestra clase. La clase de hoy habla...

La mujer comenzó a dar su clase.
El pelinegro tuvo más clases hasta que llegó la hora de receso.

-Kook ¿Quieres jugar?- Dijo Samantha.

—Si ¿Qué jugaremos?— preguntó el pequeño curioso.

—Qué te parece si vamos a la resbaladilla y jugamos que es un gran tren, yo manejo y tú eres un pasajero e invitamos a cualquiera que pase.

—Vaya, si, es una gran idea, vamos.— El pequeño niño corrió hasta la resbaladilla.

Ambos subieron al juego.
Samantha subió primero y fingió que manejaba el tren.

—Hola que tal buen hombre ¿Desea que lo lleve a algún lugar?— Preguntó Samantha con una voz un poco más gruesa, tratando de imitar a un hombre.

—Por supuesto, me gustaría que me lleve a el Palacio de Buckingham.