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Aviso: A partir de este capítulo algunos diálogos estarán en alemán, quiero aclarar que yo no sé nada de este idioma, ocupé un traductor; por lo que si alguien habla este idioma le pido que no me funen jaja, sólo es para darle más realismo a la escena, sin más que decir, disfruta la lectura.

¿? de ¿Enero? de 1942.

¿¿:?? p.m/a.m

El sollozo de las personas, el brusco movimiento del tren haciendo que choquen los unos con los otros. La mayoría traía maletas y una que otra cosa de valor, sentados en el frío y sucio suelo llevados como animales en una caja, porque literalmente los habían metido a un tren de carga de ganado, uno que otro tosía y el aire poco a poco disminuía por la gran cantidad de personas acumuladas. Si hubiera una sola palabra para describir ese sentimiento es; asfixiante.

-¿A dónde vamos?- Preguntó Jungkook que se encontraba acostado en las piernas de Tae, haciendo su cabeza un poco para arriba y poder mirarlo.

-Escuché a una mujer decir que íbamos a ir a trabajar, pero sólo será temporal.- Dijo casi ahogándose, el aire que entraba a los pulmones de todos era casi mínimo.

-¿Trabajar? ¿Nos pondrán a trabajar a nosotros?- Volvió a cuestionar.

-Supongo que sí, pero estaremos bien.- Taehyung deseaba que hubiera habido un poco de seguridad en esas palabras, todos decían que sólo irían a trabajar pero él no estaba del todo seguro a pesar de decidir creer un poco porque los que hablaban eran adultos, quizás tenían razón, pero un hueco en su estómago le decía todo lo contrario.

"Ah, hablas del niñito que rogaba que no le disparemos."

Esa escena se repetía una y otra vez en su cabeza, si de verdad iban a trabajar nada más ¿Por qué los trataron así para salir de la casa? ¿Por qué fue que le dispararon a su compañero? algo estaba mal, pero era demasiado tarde.

El golpe en el suelo desorientó a los niños, Jungkook se levantó del regazo de Taehyung y ambos levantaron un poco la cabeza para enterarse de lo que fue ese ruido.

-¡Está muerto!- Gritó una mujer, haciendo que todos entraran en pánico y comenzaran a gritar, robando mucho más oxígeno.

Jungkook miró a Taehyung asustado, el otro estaba igual de espantado pero para dejar de escuchar los lamentos de todos se abrazaron y el castaño tapó las orejas de Jeon siendo sólo él el que escuchara las pláticas de todos.

No sabrían si era por la falta de aire, el olor putrefacto de las personas muertas comenzando a descomponerse o que no sabían la hora porque todo era oscuro, pero Jungkook y Taehyung tenían sus ojos cerrados, completamente quietos en la esquina de aquel vagón al igual que todos, nadie se atrevía a moverse más. El vagón se detuvo después de quién sabe cuántas horas, quizá hasta días. Un hombre con una gorra baker abrió la puerta, otros diez con el mismo traje estaban alrededor de la puerta con armas.

-¡Bajen!- Gritó con fuerza en un idioma desconocido para muchas de las personas adentro, ¿alemán?

Taehyung y Jungkook despertaron de repente y la voz volvió a gritar. Todos estaban desconcertados hasta que alguien decidió hablar.

-Está diciendo que bajen...- Dijo Taehyung bajito, pero lo suficiente para que los demás escucharan.

Todos hicieron caso a lo que el niño dijo y comenzaron a bajar de a poco.

-¡Herzlich willkommen!- Sonrió viendo a todos.

-Nos dió la bienvenida.- Ahora dijo Jungkook mirando al soldado. Este último bajó la cabeza para ver al niño.

Niños de Guerra | KTH+JJKWhere stories live. Discover now