Di ¡No! al cliché

Antes de la boda. parte 1.

Decir que Alice ya supero a Shawn está más que claro desde hace dos noches donde la ví como lo dejaba y continuaba bailando en la fiesta.

Han pasado dos días y ella se ha visto más contenta que antes, su humor debe de ser del mejor para poder soportar la idea de ayudarme a organizar la boda de mi hermano.

— ¿este? -pregunta Brith mientras sale de los vestidores con una vestido de novia blanco con corte de sirena y un escote que le llega a medio dorso.

 Aunque ella tiene un buen cuerpo se puede notar lo apretado que le queda y estoy segura que ella lo que busca en un vestido es comodidad no parecer un tamal.

— Muy escotado, ¿no crees? -dice su madre quien toma café. 

Cierto, su madre también estaba aquí, porque ¿quién más que una mamá para ayudarle a su hija a escojer el vestido de su boda?, lo cual hace más complicada la búsqueda.

— Se te nota que no te sientes cómoda con el -añado seguida de Alice.

— Además la boda será en un jardín al aire libre y ese corte no te va a ayudar mucho para tener más agilidad al caminar o bailar -añade Alice mientras se mete el último pedazo de barra energética de manzana con canela a la boca.La madre de Brith asiente y ella bufa.

— Solo a mí se me ocurre hacerle caso al maniquí de afuera -se queja y vuelve adentro del vestíbulo. 

Hemos pasado todo el día tratando de buscar el vestido perfecto para brith, pero por más que vamos a todas las tiendas de vestidos de novia aún no encontramos el indicado para ella, o bueno es es lo que ella dice.

— Esto va a tardar mucho -dice la madre de mi futura cuñada— Iré por algo de comer, ya hace hambre -añade levantándose del lugar donde está sentada.

— ¿quién que la acompañe? -pregunto por educación. La mujer solo me sonríe y niega con la cabeza tomando su bolso.

— No, cariño. ustedes quédense aquí a ayudarle a escoger el vestido que para mí ya fueron muchos blancos.-ironiza logrando que Alice y yo soltemos una baja carcajada por lo que dijo. Finalmente sale del lugar y solo nos quedamos nosotras solas.

Mierda, ¿porqué me siento incómoda?

Quiero preguntarle el como se siente, el como está tomando su ruptura con Shawn, pero no lo consigo. Es como si me quedara en blanco y mi ardilla del cerebro se ha dejado de andar.

— Ya dilo -dice entre todo el silencio que se comenzaba a crear ente nosotras dos. — Se que quieres saber el como la estoy pasando -añade tomando una de las revistas de moda de bodas que hay en una mesa de centro que está delante de nosotras.

— ¿sabes? aveces tú y tu hermano me dan miedo cuando saben en lo que pienso -añado dándole un sorbo a mi refresco de cola. Ella solo sonríe y niega con la cabeza lanzándome una mirada por sobre sus pestañas.

— O será que eres muy transparente -añade volviendo su atención a la revista.Me quedo en silencio por un momento, quiero decirle que no es cierto lo que está diciendo pero seamos sinceros, se me nota a kilómetros cuando algo me preocupa.