Kijong Dong *TERMINADA*

THE GAME (III)

[Corto]

Minho:

—¡NO! ¡FELIX, NO!— los chicos gritaban, Felix no había perdido ningún juego, había aguantado hasta aquí sólo por Chris, había arriesgado toda su vida sólo por Chris, y simplemente se la arrebataron.

Minho no podía creer lo que estaba viendo, su corazón se contrajo cuando por su mente pasó el nombre de Jisung, ¿y si a él también le han arrebatado la vida? Pensaba el mayor. En cuanto a Yeji, la muchacha había aguantado algunos de los juegos, pero en el del pilla-pilla, se perdió y le dispararon cruelmente. Ahora sólo quedaban Changbin, Jeongin y él.

—¡Mierda!— gritó Minho entrando en pánico, ¿cómo se sentiría Chan al no ver a Felix al final? Igual de mal como si él no encontrase a Jisung al final. ¿Cómo se sentirá Hyunjin al ver que ha perdido a su hermana? Igual que Jeongin si no encontrara a Jisung…

—Chicos, tenemos que seguir, nos vengaremos de sus muertes al final y nos desharemos de toda esta mierda de juego, pero para ello hay que llegar al final ¿okey?

—Siguiente jugo: Paint Ball.— Habló una vez más aquella voz de los altavoces, esa voz que les erizaba la piel del terror que sentían. —Uno de vosotros morirá, sí o sí.

—¡¿Qué?!— gritaron todos. 

—¡No! ¡No!— el menor del grupo se echó a llorar, sentía mucho miedo al saber que seguramente no llegaría al final de todo este estúpido juego.

**********

Jisung:

—¡IMPOSIBLE! ¡NO PODÉIS HACER ESTO! ¡SÓLO QUEDAMOS DOS, MALDITA SEA!— gritó Chris al escuchar la presentación del juego.

—No tenéis elección.— Rió la voz en el altavoz.— Frente a vosotros tenéis una mesa con varias armas, tenéis tres minutos para escoger todas las armas que queráis, debéis matar a vuestro compañero, si no lo hacéis ambos moriréis, ¿entendido? El tiempo comienza… ¡ya!

—No…— susurró Jisung en su sitio.

El silencio inundó el lugar, los chicos no estaban dispuestos a matarse entre ellos, eso jamás sucedería. Por la mente de Jisung pasaron muchas cosas, pero ninguna de ellas fue la idea de matar a Chris, eso era algo impensable. 

Jeongin le necesitaba, pero quizás Chan sería mejor hermano mayor. Minho… Minho era como su hermano menor, seguro que la muerte del pelinegro la superaría, pero no la de Chris, eso jamás.

Todos esos pensamientos se esfumaron cuando Han observó como el mayor se acercaba a la mesa y muy seguro agarró dos armas, una pistola normal y una arma blanca del montón. 

—¿C-Chan?— el pelinegro se asustó al ver aquello.

—Se acaba el tiempo Sung, no voy a matarte, pero no pienso quedarme aquí esperando a que nos maten a los dos. Quizás esto es egoísta, ya lo sé… Pero, ¿qué me queda a mí? No tengo padres, no tengo hermanos, no tengo pareja, no tengo a nadie Jisung, si comparamos nuestras vidas, la tuya es mucho más importante que la mía.— Sentenció el mayor extendiéndole una de las armas al menor.— Deberías…

—¡NO!— gritó Jisung entre lágrimas. —¡¿Acaso te estás oyendo?! ¡Eres la persona más importante para Minho! ¡Y para mí también! ¡Lo egoísta sería matarte después de todo lo que has hecho por nosotros! ¡No lo haré Chris!— lloró observando como el mayor asentía con lágrimas en los ojos y se alejaba lentamente.