Amargos Delirios ✔️© [Editando]

14. Noche de pizzas.

Me tenso en el acto apretando la mandíbula hasta que los dientes me duelan.

—Ya pronto se acercan sus vacaciones—Nos da una sonrisa en general.

—Y las de la facultad—Secunda Hunter tratando de suavizar la tensión con una sonrisa nerviosa—¿No es asi?—Nadie responde—Bien. Me callo.

—Yo...—Musita Noah en shock—No me lo esperaba...

—Ahora, a practicar—Ferguson posa la mano en el hombro de este—Tendremos mucho de que hablar... ¡A trabajar entonces!

Gabriel sale de lo más tranquilo del salón, Gisel le sigue después de Hunter quien está ahora metido en su celular, Oliver sale hablando con su padre y yo voy detrás de él.

—Aila...

No voltees, no voltees, no...

Volteo.

—¿Qué?

—¿Me permites unos minutos contigo?

Me detengo apoyando mi espalda en la pared, quedando solos en la pequeña oficina, Noah se acerca a cerrar la puerta y yo me preparo para terminar con esto de una vez por todas.

Se para frente a mí metiendo las manos en los bolsillos traseros de su vaquero, lame sus labios lentamente haciendo que los venere disimuladamente.

—¿Qué quieres?—Le suelto de una vez.

—Sobre... Las visitas, en mi casa. Creo que no se podrá hacer.

—Ajá.

Me volteo sobre mis talones buscando la puerta.

—Otra cosa más.

Aprovecho que no lo tengo al frente para tomar aire, vuelvo a encararlo enarcando una ceja.

—¿Qué?

—Podremos irnos juntos?

—No, no puedo—Digo rascando mi nuca.

—¿No puedes o no quieres?

—No quiero, y no puedo—Le respondo lo más seca posible—Si me disculpas, me tengo que ir...

Esta vez, me detiene agarrando mi brazo cuando me volteo, le lanzo dagas con los ojos cuando lo miro. Él me suelta enseguida aclarando su garganta.

—La rubia con la que estaba en el baño, ella y yo no tenemos nada.

—¿A caso te pedí explicación?—Refuto

—No... Pero, quiero que lo sepas.

—Ajá.

—Bien.

—Ok.

—Como digas.

Y lo dejo parado en medio de la oficina azotando la puerta con fuerza.

En todo el trabajo, Noah estuvo fuera del almacén.

¿Para qué?

Para tener los ojos puestos en mí.

Estamos por cerrar, así que voy guardando apagando las luces mientras que Oliver cierra todo. Hunter y lo demas estan afuera incluyendo a Ferguson.

Entonces, al salir... Me encuentro con Iván apoyado en su famosa Tundra. Esa camioneta la tiene desde que nos conocimos.

—¡Iván!

Le sonrío Feliz, tantos días sin verlo después de lo que pasó me hacen extrañarlo, pensé que se alejaría luego de que tuviéramos aquella conversación. Y para ser sincera, en estos momentos necesito su compañía, porque Iván es Iván, en cualquier momento logra sacarme una sonrisa, justo como lo está haciendo ahora sin ni siquiera moverse. Con tan solo su presencia hace que me dé un vuelco en el estómago.