Cap 48

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Las Salinas estaba funcionando sin su alcalde, por lo que los trámites para designar al segundo lugar en las elecciones habían comenzando, un híbrido de León llamado Amador, aunque aún no era legal, él ya estaba fungiendo como tal 

Catra se estaba encargando de establecer sus puntos de venta, a mi me había dejado la tarea de limpiar la zona

Hice uso de 4 camionetas, en las que rodeamos una colonia donde sabíamos, estaba la casa de uno de los líderes de un grupo jóvenes que se quería adueñar de la plaza ahora que los del pacífico habían caído. Mi esposa se encargó de limpiar la ciudad para La Horda, no para cualquier pendejo que decidiera simplemente tomar un lugar que no le corresponde 

Los disparos comenzaron, el grupo contrario nos había descubierto y comenzaron a rafaguearnos, inmediatamente los cristales se tornaron blancos por los impactos de los altos calibres, afortunadamente, nuestras camionetas son blindadas - NEUTRALÍCENLOS  - Ordené por los radios

En otro punto, otra balacera había comenzado, nosotros no podíamos salir por los disparos y pronto el blindaje se debilitaría y terminaríamos aniquilados 

En mi equipo, llevaba a un enorme escorpio de caparazón negro llamado Haid, se estaba poniendo un chaleco antibalas y un casco, según su expediente, es un militar de infantería dado de baja con honores - A ver cabrones, voy a salir y les voy a aventar una granada, en cuanto paren los disparos, salen y se los chingan ¿Entendieron? cubran a la patrona -Dijo con su ronca ronca voz

Haid salió, su exoesqueleto es tan duro, que ni una fisura apareció en él, incluso se tomó el tiempo para manipular el anillo de la granada, la lanzó hacia la azotea de una de las casas "¡¡ GRANADA !! " Alertó uno, los disparos cesaron, dándonos oportunidad de salir

Corrí hacia la casa y de una patada abrí la puerta, dejando entrar a mis hombres, a penas entramos todos, nos dispararon de una de las habitaciones

Respondí el ataque, al entrar, pude percatarme del deceso de dos Omegas con un cachorro. Dejé ese asunto y subí las escaleras poco a poco, desde fuera, uno los distraía tirando balazos 

Al querer subir, una puerta detuvo nuestro avance, estaba atrancada, por lo que Haid salió al quite nuevamente, dejó ir su cuerpo en contra de la puerta, las cruzó disparando, lo seguimos disparando a todo lo que se movía

11 cuerpos yacen en el piso y ríos de sangre brotando de ellos

-Patrona, hay dos vivos

Me acerqué a los heridos

-No me maten, déjenme ser uno de ustedes, por favor - Rogó un Beta

Pateé las costillas del idiota -¿Donde está el dinero y las drogas cabrón?

Después de un quejido de dolor se desmayó, el otro también pidió lo mismo que su compañero, sin embargo, nuestro tiempo se acababa, así que llamé a mi esposa, haciendo de su conocimiento la petición de los hombres

-No me interesan los trabajadores en lo cuales no puedo confiar, no quiero traidores que cambiarían su bando cuando las cosas se ponen difíciles, necesitamos lealtad, quiébralos

Terminé la llamada y saqué mi arma corta - Ni hablar, habló la jefa - Disparé directo en el entrecejo - VÁMONOS 

Las balaceras en los otros puntos también habían terminado, nos dirigimos hacia una de las bodegas, guiados por un prisionero

De igual manera, fuimos recibidos con balas, sin embargo, fue muy fácil, ya que solo había tres guardias custodiándolas

En el lugar había autos de lujo, dinero, armas y diferentes tipos de drogas de muy mala calidad. En la parte de atrás, tenían una cocina donde descuartizaban y deshacían a sus víctimas con ácido y otros químicos

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