Realidad

Cap 55

POV Catra

-¿Que pasa Catra?

-Estoy un poco nerviosa, papá puso en mí una responsabilidad importante ¿Y si estropeo sus planes?

-¿Trabajarás en el campo? woow eso es maravilloso, te lo advierto, no me importa ser amo de casa, pero tengo gustos muy caros que tendrás que costear

-Torpe

-¿Cuando empiezas?

Mire mi reloj - En 20 minutos

-¿QUE? - Tomó su café de un trago - VÁMONOS ... LA CUENTA

-No te preocupes, traigo todo en mi maleta, estamos en una cita, hace tiempo que no tenemos una 

-Prometo invitarte al cine en cuanto termines, vámonos ya, por que  si te atrasas tu papá me echará la culpa y me hará barrer la playa 

-Eres tan buen elemento que tengo por seguro que de alguna forma lo harás

-Chistosita, vámonos

-No, ya estoy en ello - Realmente había escogido esta cafetería por el simple hecho de que el asistente personal del alcalde estaba ahí, mantenía una charla con algunas personas que, según mi investigación, no pertenecían a su círculo laboral ni amistoso, además se le veía nervioso 

Un "vendedor" de rosas entró al establecimiento dirigiéndose directamente al asistente, sin pedírselo, le dio un ramo de 4 rosas, pero a mi ver, el grosor era mucho como para 4 flores solamente, tomé una serie de fotografías con una cámara oculta

Papá me dijo que siguiera al alcalde, pero él  ya me había visto y sabría que lo seguía, por lo que decidí seguir a su asistente, sin embargo, creí que sería mejor seguir a aquellas personas sospechosas, comenzando por ese "vendedor"

Lo seguimos a una sana distancia, pues no quería que se diera cuenta, caminamos tras él por 4 calles hasta un lugar donde había una camioneta Ford Raptor último modelo sin placas y subió - Pues para ser un vendedor de flores tiene gran poder adquisitivo ¿No?

-Así es, Sig, tienes que seguirlo

-Ooh Con que esta es tu misión 

-Si y necesito tu ayuda 

-Cuenta conmigo 

Me dio un beso y se retiró, en cuanto a mi, regresé a la cafetería, el asistente ya estaba pagando la cuenta, los demás ya se habían ido, MALDICIÓN ¿Ahora que hago?  

-Hola 

Volteé, era el asistente - Hola

-Eres muy bonita como para estar enojada 

¿Que te importa imbécil? - ¿Crees que soy bonita? - Hipócritamente sonreí 

-Así esta mejor ¿Te puedo invitar a comer?

-Por supuesto

Puso su mano en mi cintura - Vamos por mi auto  - Me llevó a uno de los restaurantes más lujosos de Las Salinas, el hostess nos llevó a una mesa que daba a una vista espectacular del mar, tomé el menú y eché una leída a los platillos que ahí ofrecían a precios exorbitantes - Pide lo que quieras bonita 

-No puedo, todo es muy caro

-¿Crees que no puedo costearlo ? - Preguntó arrogante 

-No no por favor, no es mi intención ofenderte, es solo que no quiero verme abusiva 

-Por Dios, creo que he encontrado oro  - Puso su mano encima de la mía - Por favor, me encantaría conocerte mejor

-Claro ¿En que trabajas?