Realidad

Cap 64

POV Catra

Una camioneta con camuflaje desértico, llegó a donde Sigfrid se había estacionado, un enorme reptiliano con uniforme y altamente condecorado bajó de ella, el general Sunan había ido personalmente por mí, no sé si sentirme emocionada o temer 

Se quedó viéndome por la ventana - ¿Que? ¿Soy o me parezco?

-Increíble... Buen trabajo coronel, escóltenla a mi camioneta

Las esposa volvieron a mis muñecas, sin oponerme, cambié de vehículo, miré como el general le daba unos fajos de dinero al coronel, la teniente Glimmer miraba con incredulidad lo que veía, por último, el general hizo una seña con la cabeza, Sig miró de reojo a Glimmer, su expresión se puso seria, es obvio lo que le indicó, nada de cabos sueltos - ¡¡ GLIMMER !! ¡¡ CORRE !!

-¿Que?

-¡¡¡ QUE CORRAS PENDEJA !!!

Miró a Sigfrid intentando sacar su arma de la funda y se echó a correr selva a dentro

- ¡¡ DISPÁRALE !! - Gritó Sunan

-Se atoró la pistola 

Glimmer se perdió entre la espesa selva, solo espero que esté al día con sus clases de supervivencia, al menos se llevó su rifle

El general envió a dos soldados detrás de ella, subió a la camioneta y arrancó, no hubo palabras durante el trayecto hacia algún lugar al Sur, graciosos, por que el cuartel militar está al Noreste 

-Señor, no hay señal - Dijo un soldado viendo su celular - No puede salir ningún mensaje

Comenzaron a escucharse varias detonaciones provenientes de la ciudad hicieron volar a las aves lejos de allí - ¿Que demonios está sucediendo? - Sunan hizo una llamada - Carajo, tampoco tengo señal... No importa, terminemos con esto 

Continuamos el camino, tomamos una desviación hacia la carretera en dirección a la ciudad, justo en una curva, dos camionetas se hallaban estacionados, una de cada lado, pasamos y enseguida comenzaron a seguirnos, un escalofrío recorrió mi espina al escuchar unas explosiones dentro de la ciudad

-Nos están siguiendo general

-Puta madre... ¿Que son?

-Civiles 

-Estaciónate

El conductor obedeció, las camionetas nos pasaron y se fueron, volvimos nuevamente al camino, un kilómetro adelante, las camionetas bloqueaban el camino, además, una camioneta de redilas, con un arma pesada, nos esperaba

Las llantas de la camioneta derraparon, haciéndome ir hasta adelante, un soldado me regresó a mi asiento

Las llantas de la camioneta fueron reventadas a disparos, la bala de la arma pesada tronó de un balazo el motor 

-A VER BÁJENCE HIJOS DE SU PUTA MADRE

Seis sicarios nos flanquearon con rifles en mano, apuntaban a todos los que estábamos ahí, pero por los logos, sabía que eran mis hombres

Sunan armó uno de los rifles de asalto, el soldado a mi lado deslizó una cada de debajo del asiento, había una gran cantidad de granadas, el otro sacó barios cargadores con balas útiles, si se enfrentan, esto terminará muy mal para mis hombres, a pesar de tener instrucción militar, no es la suficiente como  para enfrentar a militares con años de experiencia  

En cuanto el general dio la orden de salir y tirar a matar, me lancé en contra del soldado que traía las granadas, pasé mis manos por su cuellos y con la cadena de las esposas, comencé a ahorcarlo, sus compañeros ni cuenta se dieron de lo que pasaba dentro de la camioneta, ya que los estruendos de la balacera no les permitía escuchar ni sentir el alboroto dentro de la camioneta