Capítulo 4.

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–¡ELI, ARRIBA! –Grita Stiles desde la cocina.

Eli pone su almohada sobre su cabeza en el mejor intento que puede para evitar escuchar que lo llama, pero, aunque pudiera evitar la voz de Stiles también tendría que perder la música y el hermoso olor a crepas que entra a su habitación.

Primer día de nuevo, como si los pasados no fueran lo suficientemente malos ahora se ve obligado a ir de nuevo a una escuela repleta de personas estiradas, extrañas y quejumbrosas y si, los está juzgando solo por donde estudian, pero realmente no le importa, se va permitir a si mismo ser un imbécil.

Ve el extraño uniforme en su escritorio y quisiera quejarse, tiene la edad suficiente como para decidir qué es lo que quiere ponerse sin que una escuela se lleve por completo su individualidad poniendo reglas de vestimenta estúpidas.

–¿Eli? ¿Ya despertaste? –Pregunta Stiles tocando la puerta.

Mira hacia la puerta con resentimiento, no es como si pudiera simplemente dormir con tanto ruido, a decir verdad, pero después de haber hablado con su papá el día anterior se siente mal por ser grosero hasta en su mente.

Stiles ni siquiera llego a hablar con él y no parecía molesto por ello simplemente lo acepto y se fue a dormir como si nada hubiera pasado. Eso no era lo que esperaba de la imagen que se había hecho sobre el novio de su padre.

Siempre pensó que sería gruñón, refinado e incómodamente inteligente y aunque esa última pueda ser cierta las demás no lo son y no le ha dado una razón para estar enojado, por ello es tan confuso aun sentirse así.

–Si.

–¿Puedo pasar?

Eli le quita el seguro a la puerta antes de abrirla dejando a Stiles pasar. Se sienta en la cama mirando hacia el escritorio con las cejas alzadas y los ojos todavía llenos de lagañas.

–No es tan feo –Dice Stiles, Eli se ríe sarcásticamente antes de poner los ojos en blanco.

–Parece que regrese al jardín de niños.

–Si...

Ambos ladean un poco la cabeza hacia la derecha intentando buscar alguna forma de que ese uniforme no se vea tan mal.

–Mira, sé que este trato puede tener sus desventajas, era obvio en cualquier trato que tuviéramos, pero te ensañaran cosas geniales, yo estaré ahí y no puedo enseñarte yo manteniéndote aquí encerrado, eres un adolescente y a pensar de nuestra situación mereces la oportunidad de relacionarte como todos.

Eli asiente respirando hondo. Realmente está poniendo todo en sí mismo para comportarse de forma más adecuada para Stiles y así llevarse medianamente mejor pero el uniforme y la escuela no ponen de su parte.

–Cuando salgamos te llevaré a comprar lo que hace falta ¿Si? Tu mochila, tal vez algunos pines, lo que sea que le quieras poner a tu casillero y algunas cosas para la habitación, podríamos pintarla del color que quieras o...

–Voy a cambiarme –Dice Eli levantándose de golpe para evitar lo que sea que siga de la diarrea verbal de Stiles.

–Oh sí, te dejo solo. –Avergonzadamente sale de la habitación, aunque se queda detrás de la puerta. –No tienes que estar nervioso hoy.

Eli golpea su rostro contra su almohada con fuerza y deja salir un pequeño gruñido.

–No será la gran cosa, siempre llegaras antes que todos así que eso podría darte algo de... uhm... -Stiles mira un pequeño hueco en la pared que probablemente no debería de estar ahí, tal vez debería de llamar al casero o arreglarlo él mismo si no quiere molestarlo ya que mantener el perfil bajo en ellos puede ser lo mejor.

Agente padrastro (Sterek)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora