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Thomas siempre pensó que su amigo era un hombre sencillo, que no le importaban mucho las cosas. No se tomaba muy enserio que comer, o donde dormir, con quien estar, pocas veces se quejaba, le era fácil aliviar el ambiente, y era muy tierno e inocente a sus ojos. Siempre se adaptaba a todo y hacia ese momento el mejor para todos, por eso siempre se sentía cálido estar cerca suyo y molaba trabajar con el. Entonces ¿Por que tenía que empeñarse tanto en lo que estaban haciendo?

Thomas: ¿Dónde se supone que has aprendido esto?- Pregunto confuso entre jadeos mientras luchaba contra el mismo para no ver lo que tenía encima, fallando de forma humillante-

Brick: Sabes que siempre me gusta probar nuevas experiencias, pero se debe investigar un poco antes- También jadeaba levemente, tomando más aire del normal para seguir su trabajo-

Thomas: ¿Entonces tenias esto planeado?- Este se quedo en un pequeño shock antes de seguir atando cabos- ¿Pediste que nos metieran aquí?- Brick esta vez no respondió nada, solo empezó a ir más rápido para intentar decir que si sin palabras-

Thomas empezó a gemir en vez de jadear, no es que fuese virgen, pero el sexo casual o las parejas estables nunca fueron lo suyo. Nunca se había sentido muy enganchado al sexo, y ahora sentía que si su "amigo" se despegaba de su pene podría romper toda la habitación a puño limpio.

Ni si quiera podía describir bien como había empezado eso, todo paso tan rápido y con tantas sensaciones que ni si quiera estaba del todo consciente. Ni si quiera le dejó hablar luego de insinuarse, le beso de forma demandante tirándole de nuevo a la cama. El rubio no tardo mucho en bajar los pantalones de los dos. La pregunta aún resonaba en la cabeza del de cicatriz "Entonces ¿Quieres que me meta uno de estos no?". Se puso encima suyo, y el mismo le pidió que le metiese el vibrador dentro. Obedeció como perro, y no se arrepiente.

Y así estaban ahora, si miraba arriba, podía ver sus caderas moverse de lado a lado, poniendo sus manso en los glúteos y masajeándolos como masa. En cambio, si bajaba su mirada, podía ver gran parte del torso del contrario, uno plano, pálido y delgado. Veía en primer plano como su miembro era devorado, despareciendo en la boca contrario.

Su lengua se pasaba por todo el falo, abecés parando en el glande para hacer movimientos circulares. En un momento paro sus actos con la boca dentro, apretando más su boca sin llegar a rozar los dientes. Thomas pudo sentir como su cuerpo temblaba más que antes y un liquido se tiraba a su camiseta y parte de los muslos. Gracias a eso, el también pudo terminar, llenando la boca de su compañero.

Brick paró su vibrador y se lo quito, tirándolo sin pena de la cama. Sacó el miembro de su boca, aunque muy lentamente, y tragó el liquido blanquecino. Después de varios segundos, Thomas termino medio sentado en la cama de nuevo, en cambio, Brick terminó tirado al lado de su amigo, abrazando su pantorrilla y mirando a los ojos a su amigo.

Thomas: No tienes puta vergüenza- No sonaba nada enfadado, solo vacilante y cansado-

Brick: Y te encanta- Sonrió vacilante, en definitiva, no se arrepentía-

...

Un alfa llenaba unas tacitas de porcelana con un te seguramente carísimo, mientras el pequeño omega esperaba ansioso su primer juego de tacitas como hacían algunos de sus compañeros omegas. Al principio, obviamente, temía completamente de quien consideraba su alfa. Pero luego de un tiempo, apreció todo lo que hacia por el. Lo lleno de esos mimos que nunca tuvo de nadie más, hizo que hiciese las paces con su hermano, le cocinaba cada día aun que al principio no supiese y hasta lo llevó a una nueva escuela donde solo habían omegas. Ahí, sin alfas ni betas, todo el mundo era respetuoso con los géneros, y, luego de enseñarle lo que era la verdadera amistad, había hecho muchos nuevos amiguitos con los que jugar en el patio.

Hace poco que fue su cumpleaños, pudo llevar una tarta de fresa a su clase y celebrar su cumple con su clase antes del patio. Y tal vez su hermano no estaba ahí para celebrarlo, pero le envió una carta y un regalo, se acordó. Cuando Dusty le dio el paquete diciendo de quien era, lo primero que hizo fue cogerlo como pudo y correr a su habitación. Su hermano le felicitó, le dijo que estaba bien, que el no estaba en peligro, que había conocido a un beta que le gustaría que conociese, que volvería a verlo lo más pronto posible...Y que lo quería mucho.

Dust llegó preocupado al escuchar llantos, y luego de saber que todo iba bien y que se calmase, le sonrió diciendo que el también lo quería mucho. Media hora tardó en calmarlo de nuevo, aunque el alfa nunca admitiría que lloró un poco al estar conmovido. Tal vez, también por que lo entendía. Su familia se fue, y hacia tanto que nadie lo llegaba a querer tanto, hasta que el pequeño y dulce omega entró a su vida.

Luego de una hora desde la llegada del paquete, por fin abrió el regalo. Desde pequeño siempre quiso un juego de tacitas, de esos que tenían sus compañeras para jugar con sus juguetes. Fingían meter te a las tazas y hacían dulces con plastilina. El no tenía ni peluches ni plastilina, así que ellos mismo cocinaron unos dulces de verdad, y en vez de peluches que no se movían tenía a Dusty para jugar con el.

Dust: No sabía que a los adolescentes de 13 les gustaban estas cosas- Sabía que Dust ya no tenía una mentalidad de niño, no del todo-

Blueberry: Es un deseo de la infancia- Este sonrió sentándose en la mesa, tomando su taza de porcelana para tomar un trago- Siempre han dicho que es un juego entretenido.

Dust: Si el juego va de comer, me gusta bastante- Ya tenía dos dulces a la boca, una magdalena y una galleta. No sabía cocinar muy bien aún la repostería, pero el peliazul era experto y lo ayudó en casi todo-

Blueberry: Dust ¿Te gusta estar conmigo?- El preadolescente, sorprendiendo al contrario, tomó un tono más serio-

Dust: ¿Hmm?- Tragó la masa masticada, viendo la tensión del momento. No sabía bien por que la pregunta, pero al segundo vio que era importante- Claro que me gusta, me encanta. Sabes que te aprecio mucho ¿Verdad Berry?- Dijo sonriendo, viendo como el rostro de del contrario se aliviaba-

Blueberry: Yo también te aprecio mucho Dusty- Sus pómulos se sonrojaron mientras bajaba la mirada. Dust al ver la reacción alzó la ceja confuso, sin saber que pasaba por la mente del chico-

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De primeras, Dust es caballero, pendejo y sin saber sobre enanos hormonados, asesino psicópata con problemas mentales chutados que más o menos a superado, ex drogadicto, pero un caballero😡

Aún así, pregunta ¿Creen que Dust y Blueberry llegarán a algo en un futuro donde sea legal?


Un simple omegaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora