Sombra de Lágrimas (Nueva Versión) ©

Capítulo 7

| El partido |
- Mónica -

Lo que quedó de la tarde de ayer, me la pasé acomodando materias y adelantando deberes. No pude dormir en toda la noche, la cabeza me dolía demasiado, mejor ni hablemos de la enorme irritación que tenía. Al despertar lo primero que hice fue maldecir a los pájaros, después me metí a bañar, dejé que el agua caliente recorriera todo mi cuerpo y así poder tener un poco de relajación, para mi mala suerte el agua caliente se terminó y me tuve que bañar con agua fría.

Saliendo de la ducha me vestí muy rápido, ya se me estaba haciendo demasiado tarde para ir a la universidad, mis hermanas ya se habían ido con James y Landon, a mí me tocaba irme en el auto sola.

Al llegar al instituto Félix, Sofía y Liz me dijeron que las primeras dos clases las cancelarían porque hoy jugarían los jugadores del equipo americano, contra otra universidad, según tenía entendido, eran equipos enemigos. De primero no quería, pero el profesor de física general dijo que si no íbamos, nos bajaría un punto en su materia y obviamente yo no quería una baja de calificación.

—Iré a apartar los lugares—. Félix se fue corriendo a las gradas.

—Vamos por un poco de comida.

Seguí a Sofía y a Liz a los puestos donde vendían todo tipo de comida, ellas se compraron un burrito, yo 2 banderillas y a Félix le compramos una hamburguesa, y obviamente junto con nuestras respectivas bebidas.

A ellas dos ya les había dado sus órdenes. A mí aún no me las terminaban de preparar, les tuve que decir a las chicas que se adelantarán, ya las alcanzaba yo en un rato.

—Hola, hermosa —volteo, veo a un chico de cabello blanco con la camisa del equipo rival.

—¿Se te ofrece algo?

—Te me hiciste demasiado bonita y quería saber si me podrías pasar tu número —sonríe, muy egocéntrico.

—No —lo ignoro.

—¿Por qué no?

—Porque no te conozco, porque no quiero y porque tengo novio.

—Tú solo pásamelo —insiste.

—Ya te dije que no. Vete y no sigas insistiendo.

Cruza sus brazos.

—No me iré hasta que me lo pases.

Por pura casualidad, Donovan llegó.

—¿Qué parte de, lárgate, no entendiste?

—Bennett, siempre apareciendo en los momentos menos importunos.

—Ya lárgate, Levi.

—No me iré hasta que esta hermosura —me señala— me pase su número.

—Ella ya te dijo que no te lo pasara —sujeta mi cintura.

—¿Me lo pasarás sí o no?

—Ya te dije que no, que necio eres.

—Te haces la difícil, de seguro eres igual de zorra y ofrecida que las demás.

¿Qué tiene que ver eso?

—Mira hijo de puta...

Me le iba a ir encima, si no fuera porque Donovan me jalo.

—Vámonos.

—Suéltame —Intento zafarme de su agarre.

Donovan me lleva jalando. Lo único que está provocando es que mi enojo aumente más.