Paraíso Destiel

Capítulo 12 : ¡Mayor! Dean/¡Ángel más joven! Castiel

Un descanso para ir al baño. Era solo un descanso para ir al baño que Dean necesitaba y de alguna manera Castiel estaba siendo acorralado en una esquina. Creía que los depredadores estaban esperando que Dean lo dejara en paz antes de avanzar hacia él. Indefenso, frágil y asustado. Castiel era mucho más pequeño que los dos y no podía hacer nada más que esconderse.

“Las cosas que puedo hacerte, ángel.”

Castiel se estremeció ante el nombre cariñoso y mantuvo los ojos hacia abajo para mirar sus pies. Dean siempre lo llamaba así, tan dulce y cariñoso, pero escucharlo de los demás hizo que Castiel se sintiera asqueado. Escondió sus alas de la vista mientras se empujaba contra la pared.

“No escondas esas lindas alitas. Estoy seguro de que a tu dueño no le importará compartirlo."

Ay, qué equivocados están. A Dean le importa mucho y eso es lo que le teme a Castiel; provocando el temperamento de Dean. El hombre puede ser bastante posesivo cuando se trata del ángel. Nunca le molestó a Castiel porque no quería a nadie más y amaba toda la atención que Dean le daba. El único problema era que Dean odiaba cuando alguien coqueteaba con él. Los celos siempre fueron el mayor rasgo negativo de Dean.

"¡Oye! Dale un poco de espacio."

Los dos se volvieron hacia Dean, quien los miró con tanto odio en sus ojos. Cuando su mirada se posó en Castiel, su expresión se suavizó con preocupación. El ángel asintió para confirmar que estaba bien. Dean empujó a los dos hombres para agarrar a Castiel por los hombros. Lo miró para asegurarse por sí mismo.

"Estoy bien, Dean".

La sonrisa de Castiel era pequeña cuando Dean lo miró. Finalmente se relajó y se volvió hacia los dos hombres que todavía estaban demasiado cerca de ellos.

“¿Están ciegos? ¿No vieron el collar? Él es mio."

Dean empujó a Castiel detrás de él y se cruzó de brazos.

“Solo buscábamos un poco de diversión. Un pedazo de culo caliente como ese w-”

El hombre no pudo terminar su oración cuando el puño de Dean chocó contra su mandíbula. Dio un paso atrás de la fuerza y ​​miró a Dean con sorpresa. Dean parecía que estaba a punto de hacer más daño cuando Castiel lo detuvo.

"Dean. Solo vamonos. Quiero ir a casa."

Castiel dijo en voz baja mientras miraba a todos lados menos a las personas que ahora los miraban. Dean recobró el sentido y asintió. Envolvió un brazo protector alrededor de Castiel y lo condujo fuera del restaurante. El viaje en auto fue silencioso con una atmósfera tensa. Dean todavía estaba enojado por lo que pasó en el restaurante. A Castiel no le gustaba cuando estaba enojado y sentía que era su culpa por cometer el incidente. Apoyó la cabeza en la ventana y observó cómo los edificios pasaban como un borrón. Cuando finalmente llegaron a su casa, Dean estacionó el impala en el camino de entrada antes de entrar con Castiel detrás de él. El ángel se quedó junto a la puerta y miró la alfombra mientras Dean se movía por la sala.