𝐘𝐎𝐔𝐓𝐇 ✿【JiChen/ChenSung】✿

✿【6】✿

— Déjame salir, padre— Rogó llorando— Por favor, necesito verlo...

JunHui se frotó la frente y miró a RenJun asintiendo simplemente, escuchando a través de la puerta cómo su hijo se desesperaba por el alfa, quien venía a buscarlo sabiendo que algo andaba mal. Era terrible verlos, cada uno peor que el otro.

JiSung tenía ojeras, el cabello sucio y un notorio deterioro, mientras que el omega vomitaba lo que comía, lloraba y aruñaba la madera ansiando escapar para encontrarse con el alfa

El celo estaba matándolos, era un hecho.

— Cuando vayas por él— MingHao lo señaló con un abanico— Dile que no se comporte como un bastardo, eres su amigo Junie, debes espabilarlo.

— Dudo que me escuche, a este paso debe estar planeando cómo robarse a ChenLe— Rechistó— Si así serán los celos de ahora en adelante, me mudaré

— ¡Ve ya! — JunHui se estresó notoriamente

— ¿Padre? — ChenLe dejó de gritar— ¿Estás ahí?

— Intenta dormir hijo mío, llevas toda la mañana llorando, enfermarás... Prometo que mejorarás, hazme caso.

— Entraré, tú ve y dile a la empleada que prepare algo de comer, JiSung podría estar con hambre al llegar— MingHao interfirió— Roguemos al cielo porque no sepan TaeYong y JaeHyun.

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ChenLe temblaba y lloraba en silencio, dejándose peinar por MingHao, quien intentaba hacerlo sentir mejor después de un baño donde su calor, claramente, no disminuía.

Se vistió con un pijama simple, arropándose con las cobijas sin ánimo

— ¡Está aquí! — Oyó en cuanto RenJun abrió la puerta— Te dije que no podría hacerlo entrar en razón, quiere sacarme un ojo.

Enseguida el olor a ámbar inundó sus fosas nasales y se giró encontrando a JiSung de pie frente a él, con horribles ojeras y el enojo a flor de piel

— En unos minutos la servidumbre les traerá el desayuno— MingHao se marchó con temor en el sistema, llevándose a RenJun.

— ¿JiSung? — Murmuró sin poder creerlo— Gracias por venir, yo...

— ¿Por qué huiste así? — Lo interrumpió de golpe, apretando la mandíbula— Llevo días fuera de esta casa intentando entrar y lo único que me dicen es que no estás bien, ¿Cómo demonios voy a estar tranquilo con esa maldita respuesta?

— Te vi con otro omega— Su labio tembló— ¿E-es tu novio?

— Es mi amigo desde la universidad, no tuviste que reaccionar de ese modo. Estás en celo y te largas por la ciudad como si nada— Gruñó— No he podido pegar un ojo de imaginar que algo malo estaba pasando, esto es una mierda y...

— Acuéstate a mi lado— Pidió quedito— Me siento mal, creí que iba a perder la razón

JiSung lo detalló cayendo en el peso de la realidad... ChenLe no necesitaba un sermón, necesitaba a su alfa protector que lo calmara y le permitiera volver a estar sano. Eran como la medicina del otro.

Al acomodarse y cubrirse con las mantas el calor lo abrigó, olisqueando el cuello de ChenLe con parsimonia, deseando morderlo. El aroma a caramelo lo incitaba a tomarlo, pero era consciente de que no estaban preparados

El control de un alfa era difícil, prácticamente nulo. No obstante, existía. JiSung podía sentir cómo el animal en su interior rogaba por marcar a ChenLe y se resistía dejándose llevar por la tranquilidad que le transmitía estar junto a él.