✿【11】✿

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Despierta

JiSung se removió incómodo entre las frazadas, arropándose mejor que antes, importándole poco o nada lo que oyó

Park JiSung, despierta. El desayuno está listo.

Abrió los ojos con sorpresa, mirando alrededor y comprobando que a su lado no se hallaba el joven Zhong con su terrible cara de enojo a la cual se había acostumbrado

Se levantó perezosamente, caminando a la cocina donde el aroma lo guió. Ya veía... ChenLe lo llamó por medio del lazo

— Buen día, dormilón.

— Buen día, fastidioso— Refunfuñó— Merezco dormir

— Sí, es verdad— Le entregó un plato con comida— Pero desayunar es importante. Traga.

El alto se concentró en la imagen frente a él. ChenLe vestía una de sus camisetas, la cual le quedaba jodidamente larga y grande, haciéndolo ver el triple de adorable... ¿Cómo es que no podría sentir su corazón acelerarse? Era muy bonito

— Ya sé que soy bonito— Interrumpió sus pensamientos

— Esta herramienta será molesta.

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— No tienes que sostener mi mano— ChenLe parpadeó, ignorando el hecho de que JiSung tocó el timbre de aquella inmensa mansión— ¿Tus padres viven aquí?

— Lo hacen, sí— Gruñó timbrando de nuevo— Crecí en este inmenso lugar.

Se bañaron y vistieron en contra de su voluntad. JiSung le explicó que irían a visitar a sus padres y que no podría ir solo, ya que el lazo era fuerte y despegarse de modo agresivo los perjudicaría

— ¡Mis niños! — TaeYong corrió hacia ellos en cuanto las puertas se abrieron— ¡Pasen, pasen!

ChenLe se maravilló en la vista... Un jardín lleno de rosas y árboles gigantescos cubrían la mansión de los Park y pese a que fue difícil, logró ver a JaeHyun tomando té tranquilamente a las afueras, en una mesita pulcramente decorada con pastelillos y un mantel exquisito. ¿Eso era envejecer hermosamente? ¿Con paz?

Él no podría imaginarse algo así con JiSung, siendo caóticos y malhumorados, lo que obtenían del otro a duras penas eran acciones tiernas de vez en cuando... Y estaban enlazados, ¿Por qué no lo pensaron mejor?

— Me negué a mudarme a un lugar pequeño cuando JiSung se fue a la universidad— Contó TaeYong— Es como si esta casa guardara nuestras memorias, ah... Deberías verte, ChenLe... Luces genial.

— ¿Qué tengo que ver yo?

— Me encantaría que mis nietos tuvieran tus mejillas regordetas— Rió apenado— Es que, desde que te conocí, no puedo imaginarme algo mejor

— La vejez te está pegando duro— Contraatacó JiSung

— No seas grosero y lleva a ChenLe con tu padre, yo prepararé algo delicioso

Pese a tener mucho dinero, TaeYong odiaba la idea de contratar a un cocinero para ellos, prefería hacerlo solo y disfrutar de la sensación de llenar el estómago de sus seres queridos con su talento

— ¡Querido Zhong! — JaeHyun se puso de pie, recibiéndolo— Por lo que noto, han estado unidos... ¿Planean casarse?

— Es demasiado pronto— JiSung se robó un pastelillo— ChenLe quiere que le des un paseo por la mansión

— ¡Yo no! — Infló las mejillas y se calló por JaeHyun— ¡No puedo esperar!

JaeHyun caminaba pacientemente, enseñándole parte por parte con una sonrisa en el rostro lo que componía aquella bonita estructura y suspiró parándose frente a una puertecilla con varias pegatinas en ella

𝐘𝐎𝐔𝐓𝐇 ✿【JiChen/ChenSung】✿Donde viven las historias. Descúbrelo ahora