capítulo 12.

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Tuvimos que volver a bajar al living con Enzo porque ya habíamos estado mucho rato provocándonos en la oscuridad del pasillo.

Los pibes obviamente estaban tan mamados que no encaraban un queso y nos gritaban desde abajo que volviéramos, nos prendieron fuego.

Y bueno con Enzo no pasó nada más que provocarnos, una bronca.

La juntada tranqui en mi casa terminó siendo alta jodita descontrolada entre nosotros, muy divertido todo pero ya era tardísimo.

-Buenooo- dije bajando un poco la música- ¿se dieron cuenta la hora que es no?

-Ahh que mala onda- se quejó un Julián enfiestado cuando bajé la música.

-Es temprano todavía- dice Leandro.

-Si dale boludo, ¿ustedes no tienen que estar durmiendo para ir a entrenar o algo de eso?- les pregunto.

-No mañana no tenemos treino- me contesta Lauta.

-Bueno joya mañana seguimos la joda si quieren, yo digo que ahora podríamos hacer taza taza cada uno a su casa- dije.

-Vos a la mía- dice Enzo en frente de todos y sin disimulo.

Los pibes sorprendidos empezaron a gritar boludeces y a aplaudir, yo solo atiné a reírme de los nervios y mirarlo con ganas de matarlo pero a la vez de comérmelo a besos.

Se le escapó, quise pensar.

-Bueno ahora si nos vamos yendo- dice riéndose Nicolás y empezaron todos a agarrar sus cosas.

Vi como Julieta fingió demencia con lo que me dijo Enzo y ella lo siguió atrás.

-Che Enzo- le dice ella.

Me quedé quietita y no pude evitar parar oreja.

-Si Juli decime- le dice Enzo girándose a mirarla.

-Con Fran capaz seguimos la joda a algún boliche, ¿queres venir?- le pregunta.

-Eh..- quedó pensativo Enzo- creo que me voy a dormir a casa mejor, estoy cansado ya.

-Ah dale dale- dice ella simulando amabilidad- tranqui entiendo no pasa nada.

-Dale chau Juli- le dice y lo veo de reojo saludarla con un beso en el cachete.

Enzo agarró su campera y se fue a mi cocina.

Me giré a mirar a la puerta, mis amigas se habían ido sin saludarme, buenísimo otra vez arroz.

-Che Ari- se me acerca el Juli- creo que tendrías que hablar con Julieta después- me dijo.

Suspiré del agotamiento que esto me genera.

-Si si- le dije- mañana hablamos, ¿te parece? También quería hablar con vos y pedirte algunos consejos.

-Si obvio mi negra- me dice el Juli- mañana escribime y vengo, ¿si?

-Dale- le dije y lo abracé- te amo putito.

-Yo te amo más putita- me responde- bueno me voy que el Cache me está esperando.

-Sisi dale- le dije y me acerqué hasta la puerta.

Ya no quedaba nadie, solo Enzo en mi cocina.

Tentación. (enzo fernández)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora