2.

516 19 0
                                    

Phil Foden

Sabía de sobra lo complicado que era ser futbolista teniendo tan solo 21 años. Siempre ganandote problemas, muchísimas miradas, críticas y comentarios. Literalmente todo el mundo sabe lo que te pasa en cada momento, lo que haces, saben hasta con quien te acuestas.

Y esa era la única parte buena de todo esto, el con quién te acuestas. ¿Me jodía que la gente supiera con quién lo hago?

En absoluto.

¿Les jodía a ellas?

No es mi problema.

Las cosas son así, vale que yo era bastante cabrón en esos temas, pero que más da tenía tiempo y fama suficiente como hasta para meterme entre las piernas de alguna de la realeza.

Aunque todo aquello jodía mi reputación y mi imagen pública, y siendo sincero en ese momento lo único que quería era poder tener intimidad y tranquilidad. Por un momento en mi vida.

(...)

Y allí estábamos, Laporte y yo buscando un piso en Manchester.

La zona era perfecta, en el centro ya que allí entrenabamos pero a la vez muy tranquilo.

—¿Está bien no?

—Si tranquilo— Le sonreí a Aymeric mientras me tiraba en el sofá beige que habíamos comprado hacia ya unas semanas.

Vi que tenía un par de llamadas perdidas de un par de chicas, a las cuales probablemente nunca devolví la llamada.

Vale que mi actitud era bastante insoportable, pero siendo sincero la única preocupación que tenía era meter el balón en la portería y poco más.

(...)

Estaba cocinando mientras hablaba tranquilo con el mayor.

—¿Te acuerdas de mi hermana?

—Si, me suena.— Levante la cabeza para mirarle.

—Ha venido con mi mejor amiga Olivia. Me preocupa bastante la idea.

—¿Por? Quiero decir son chavalas de 20 años tampoco pueden tener muchos problemas.

—Creeme que si, que tú único problema sea saber si te metes en las bragas de una rubia o una morena no significa que los demás sean igual.

—Ese no es mi unico problema.—
Me quedo claro que la conversación había terminado cuando le vi salir de la cocina. Era consciente de que muchas veces le sacaba de sus casillas al igual que era consciente de que estaba mintiendo. Estaba muy claro que aquella si que era mi unica preocupación.

Aymeric era muy diferente a mi. Se preocupaba por practicamente todo y tenía la cabeza sentada, y sobretodo las ideas claras.
Siempre hablaba de que le gustaría tener un par de niños con una chica que le quisiera de verdad. Era una persona muy buena, para nada de mi estilo de vida pero muy bueno.

(...)

Su mejor amiga. Esas tres palabras retumbaban en mi cabeza. Ni si quiera la había visto y ya la tenía en la cabeza.
También tenia algo de curiosidad por saber que era aquello que le preocupaba a Laporte, que coño le tenía que preocupar a una niña de 20 años.

—Mañana voy a acercarme donde mi hermana ¿vas a venir? Te vendría bien ver a una tía fuera de la cama—

Asentí.
Tenía tantas ganas de conocer a esa chica.

Mía Where stories live. Discover now