5.

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Phil Foden

Estaba jodidamente perdido en la sonrisa que se le formaba en los labios cada vez que hablaba con Grealish. Lo único que me consolaba era pensar que al día siguiente todo se me olvidaría gracias a la mierda que me acababa de meter y a las tía que me había tirado después. Me daba igual terminar la noche follándome a cuatro o a ocho. Salí de mis pensamientos cuando escuche una voz aguda hablar.

—¿Queréis jugar a algo?

Miré a Carla gritando a todos los que estábamos en el reservado y que por lo que veía también bastante animados.
¿Querían jugar? Pues íbamos a jugar.
Nos pusimos todos en los sofás que había y la española volvió a hablar.

—Vale pues jugamos verdad o atrevimiento, supongo que todos sabréis cómo va.

Nadie puso ninguna abstención por lo que la chica sonrió y señaló a su amiga Olivia.

—Empiezas, venga a quien quieras.

La chica miró a Laporte encogiéndose de hombros.
Vaya aburrida.
Después de varias aburridas rondas Carla me miró y sabía perfectamente por donde iban las intenciones. Ella era la única chica con la que hablaba sin dirigirme a ella de manera sexual y sabía que me conocía a la perfección.

—Phiiiiil mi amor.— La miré mal y continuó hablando como si nada- ¿Atrevimiento o verdad?

—Atrevimiento.
La miré retándola, no iba a quedar como un gallina.

—Bebe lo que sea y pásaselo a la persona que tengas al lado y que ella adivine que es.

Mierda.
¿Tenía que ser precisamente la mejor amiga de mi mejor amigo a la cual detestaba y encima le había invitado a coca?
Puse los ojos en blanco y cogí un vaso con ginebra, introducí el líquido en mi boca y agarré de la nuca a Olivia pasándole todo el líquido. El simple roce con sus labios me había conseguido erizar la piel y no me gustaba nada tener esa sensación.
Tras eso la chica lo tragó y me miró.

—¿Ginebra?

Asentí y supuse que era mi turno con lo cual la mire y levanté las cejas. Era totalmente consciente de que estaba mucho más suelta gracias a la droga de hacía ya un par de horas y el alcohol.

—Olivia, ¿Verdad o atrevimiento?

Ella me miró entrecerrando los ojos y miré de reojo como Aymeric miraba mal la escena. Trataba a esa chica como si fuera una niña pequeña.

—Atrevimiento.

—Bailame.

—¿Perdona?

Su cara era un verdadero cuadro. Tenía una de sus cejas elevadas y parecía asustada por mi respuesta.

—Es muy fácil bonita, te sientas encima mía y me bailas ¿Tu cerebro puede captar eso o no te llega? O igual no lo haces por qué eres una cagada de mierda.

La ojiverde se levantó y se sentó encima mía mientras empezaba a moverse lentamente.
Se sentía mucho mejor de lo que imaginaba.
En cuanto le agarré de la cadera vi como Laporte se levantaba y se acercaba a la barra, sinceramente me importaba una mierda que se pícara. Es que estaba tan jodidamente cegado por el calentón que tenía de verla bailando encima mía que me daba totalmente igual lo que opinará él. Y miré muchísimo mientras se movía. Se le marcaban muchísimo las curvas en ese vestido y su culo era perfecto.
Paró de golpe y menos mal por que no aguantaba ni un minuto más en llevarmela y follarla hasta dejarla sin voz.
Aclaré mi mente y bebí del vaso que tenía enfrente viendo de reojo como la morena reía ahora mientras seguían el juego. Lo cierto es que me había dicho que no la dejara hacer ninguna tontería pero ¿Lo que acababa de hacer contaba cómo una?
Pasé de rallarme y me levanté para hablar con alguna chica que habían invitado. Estaba cerca de ella y escuche como Laporte le decía algo.

—¿Qué estabas haciendo?

—Un puto reto Aymeric no eres mi padre joder.

—No soy tu padre pero sabes perfectamente que estas aqui gracias a mi y estas bajo mi cuidado, asi que empieza a tener cuidadito con lo que haces.
Lo último que vi de la escena fue como mi amigo la llevaba a la salida y se despedía de su hermana.
La chica con la que estaba hablando empezo a acariciarme la pierna y la miré.

—¿Quieres venir a mi casa?
Ella asintió rápido y me levanté cogiendo mi chaqueta y mientras la rubia su bolso. Antes de salir del local me despedí de algunos de los chicos y vi un bolso encima de la mesa. Tenía clarisimo de quien era y no iba a ser tan cabrón asi que me acerqué, lo cigí y salí con la chica de allí.

—¿Y eso?

—Nada, de una amiga que estaba despistada.
Ja, amiga dice. Agarré de la mano a la chica, juraría que era latina y se llamaba Alejandra pero realmetnte no es que me importara.
Cuando entramos en casa vi luz en la habitación de mi amigo asi que pasé y fuimos directamente a mi habitación. Acabé la noche como sabía perfectamente que iba a acabar.

(...)
Cuando me desperté por suerte la chica ya no estaba asi que mejor, un peso menos. Vi la hora en el móvil y eran las 12. Bajé de la cama a paso lento y fui hasta la cocina encontrándome con dos personas que realmente no quería ver.

—Buenos días.
Bostecé saludando y Laporte dejó un cafe enfrente mía.

—Tomatelo, te va a hacer falta.— Rió y lo tomé mirando a la pelinegra. —Me voy a duchar.
Salió de la cocina dejandonos solos. la miré, tenía muy mala cara, seguramente había dormido poco por que la otra noche bebió demasiado.

—¿Dura resaca?

-—Dejame en paz, por favor. No se que hice ayer y me jode muchísimo no saber por que Laporte esta tan enfadado asi que callate la puta boca ya que es todo tu culpa.

—¿Mi culpa? A ti nadie te obligó ha hacer nada.
Hiciste lo que te salió de los cojones. Pero mira, para tú información. Te metiste conmigo dos rayas de coca y después saliste, hablaste de lo más animada con Jack Grealish y después jugando atrevimiento o verdad me meneaste el puto culo encima.

—¿Que te hice a ti que?
Me miró dando un sorbo a su café y parecía que me lo quería escupir encima.

—Pues eso, que me bailaste de una manera increible por cierto.

-—Te dije que no me dejaras hacer ninguna tontería tío.

—Es que no estaba seguro de si contar eso como una tontería.—
Se levantó y caminó hasta la habitación del español. No pude evitar mirarle el culo por que solo llevaba una camiseta del antes mencionado con su ropa interior. Se escuchó un portazo en toda la casa y continué tomando mi café.
En ese momento tenía dos objetivos:
Follarmela y saber por que Laporte se había enfadado.

Me tiré en el sofá y vi a mi compañero de piso entrar con un pantalón puesto y con el pelo mojado.

—¿Podrías tener un poquito más de respeto no?

—¿Por?

—Joder tío que se escuchaban los gritos hasta en el apartamento de enfrente. No vives solo.

—Vale siento que te joda que yo cojo cacho y tú no por que tienes que estar cuidando de una niñata.

—Mira, primero te baila encima ayer y ahora hablas asi de ella, ten mucho cuidado con lo que haces Phil.

—Joder, dejala vivir en paz.

—Ni puedo ni lo voy ha hacer y me importa una puta mierda lo que opines, ha venido aqui y su padre le ha dejado a mi cargo asi que tengo que cumplir, siento que no entiendas la palabra compromiso.—

Salió disparado hacia su habitación y a la media hora salió de casa junto a su amiga.
Su puta amiga. Su amiga con la cual solo pensaba en hacerla completamente mía.
Esa chica iba a ser mía.

Aclaro que estan en Reino Unido y Foden es inglés con lo cual las conversaciones son en inglés pero obviamente está escrito todo en español//

Mía Donde viven las historias. Descúbrelo ahora