Extra: ¡Se agranda la familia! P.2

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Zhan cuidaba a Yibo de manera asfixiante, él y Mei Ling eran super protectores con él pero  felizmente se dejaba cuidar por sus dos amores.

Para Zhan todo era una nueva experiencia y lo que no pudo pasar con Mei Ling por lo que estaba muy emocionado y nervioso, por cada mínimo dolor o mal estar corría con Yibo a la clínica donde los doctores literalmente ya rodaban los ojos al verlos llegar.

Pero es que lo cuidaba cómo si de un muñeco de porcelana se tratase porque asi debía ser y porqué le ponía muy mal ver al castaño con náuseas y fiebre.

Mientras Yibo descansaba con un paño fresco en la frente, Zhan bajó a la cocina para prepararle algo liviano de comer ya qué debido al mal estar el castaño no estaba comiendo mucho.

-¿Cómo esta A-Yi?.-Le preguntó Jiyang.

-Descansando, las náuseas y vomitos lo agotan.

-Lo sé, ¿Y tu cómo estás?

-Bien creó.-Jiyang arqueo una ceja.-En realidad muy nervioso y emocionado, quiero cuidar bien de él.

-Y lo estás haciendo bien amigo, recuerdo cuándo iba a llegar Mei Ling él no nos dejaba estarle de encima todo el tiempo.-Recordó el castaño.-Y ahora mira, a tí te deja que le des de comer en la boca y qué lo cargues de aquí a allá.

-Es una masita a comparación de la primera vez.-Comentó Zhuocheng.-Siempre nos echaba y queria estar solo, pero no lo culpó, realmente estaba asustado.

-Mientras yo era un desastre, el estaba aquí pasándola tan mal.-Zhan suspiró.

-Ya no es tiempo de vivir en el pasado, ahora ve y llévale un tazón de sopa nutritiva.-Le respondió Zhuocheng.

-Yo iré a comprarle su sabor de helado favorito y luego voy a buscar a MeiMei a la escuela.-Dijo Jiyang.

-Gracias chicos.

Al subir a su habitación se encontró con el castaño hecho un ovillo en la cama, el paño húmedo ya había cambiado de temperatura absorbiendo su fiebre.

-Yi amor, te preparé un poco de sopa.-Le dijo.

-No quiero vomitar más...-Le respondió Yibo.

-Pero debes comer algo.-Le dijo y ayudó a sentarse en la cama.

-Esta bien lo intentaré.-El castaño aceptó las cucharaditas qué su esposo le daba.

A mitad del tazón sintió su boca con el exceso de saliva previó a devolver todo pero logró contenerse.

-Iré a mojar los paños...

-Espera...-Le tomó del brazo.

-¿Te sientes bien?

-Sí, sí sólo quería decirte gracias por cuidarme éstos días qué estoy siendo un desastre.-Le respondió Yibo.

-No es problema mi amor, para eso estoy aquí.

-También lo siento por preocuparte y hacerte ocupar tanto tiempo en nosotros.-Le respondió.-He hecho que te preocupes más que emocionarte por esto.

-No te das una idea de lo feliz y emocionado que estoy.-Le respondió Zhan.-Pero sí me preocupan y quiero poder cuidarlos bien.

-Y lo estás haciendo amor.-Yibo sonrió y de pronto abrió sus ojos con sorpresa.-¡Dame tu mano!¡Aquí!.-La apoyó sobre el bulto de su vientre.-¿Sientes?

-Creó qué...¡Ah!¡Sí lo sentí!¡Se movió!.-Exclamó Zhan con una sonrisa gigante.-¡Hazlo de nuevo bebé!

-¡Lo volvió a hacer!.-Exclamó Yibo dejando caer unas lágrimas de emoción.

🌻𝕃𝕠𝕠𝕜 𝕒𝕥 𝕞𝕖, 𝕞𝕪 𝕤𝕦𝕟𝕗𝕝𝕠𝕨𝕖𝕣🌻•ᴢʜᴀɴʏɪ•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora