Capítulo 1

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Odisea al armario

La noche anterior no pudo dormir casi nada. Estuvo horas dando vueltas en su cama, removiéndose ansiosa de un lado a otro. Por lo que al salir los primeros rayos del sol, la niña ya se encontraba vestida con su uniforme. ¡Ay su uniforme!, no lo iba a extrañar para nada, pensó. Siempre había creído que usar seda todos los días era incómodo, era elegante, sí, pero se sentía asfixiada. Le gustaba el color, azul como el cielo cuando está despejado, pero solo eso.

Salió del cuarto lo más callada que pudo, no quería despertar a sus compañeras antes de que sonaran las campanas matutinas. Sonaban todos los días a las 5 am en punto y también odiaba eso. La Academia Mágica Beauxbatons se enorgullecía de su disciplina y orden y qué mejor forma de obtenerla que siendo rigurosos en todo lo que hacían. Ya había escuchado en más de una ocasión a Madame Maxime hablar de la importancia de la puntualidad y de lo crucial que es tener una rutina.

Anduvo de puntillas hasta llegar al corredor, aún estaba un poco oscuro pero así estaba bien pues podría pasar desapercibida para algún profesor que ya estuviera dando vueltas por el castillo. Justo ahora debía dirigirse al armario del último piso, ahí tenía las pociones listas para llevar a cabo su plan. Caminó por algunos pasillos sin problema hasta que vio al Señor Dubois, ahí estaba el infame profesor. Cuando lo vio su primer instinto fue esconderse detrás de la primera columna con la que se topó. Grave error. Arriba de esa columna casi tocando el techo, se encontraban unas pequeñas bolas de luz que estaban encendiendo las lámparas del castillo. Resultaron ser un pequeño grupo de hadas que al ver a la niña tan quieta debajo de ellas se acercaron a inspeccionar su cabello. Esto por supuesto alertó al profesor Dubois que se acercó de inmediato a observar qué ocurría.

一Así que es usted señorita Bonnet —dijo el hombre con su voz chillona—, ¿Se puede saber qué hace despierta tan temprano? Nada bueno desde luego.

—Me levanté más temprano para estudiar profesor, así no me distraigo tan fácil —dijo la joven mientras manoteaba a las hadas a su alrededor—. Ahora, si no le importa debo irme ya, esa asamblea medieval no se va a aprender sola.

Al terminar de decir esto, hizo el ademán de irse pero el señor Dubois se paró frente a ella deteniéndola.

—No crea que no me doy cuenta que desde hace semanas trama algo —susurró el hombre de forma amenazante—. Voy a averiguar qué es y entonces créame, va a estar en problemas.

La joven no supo cómo reaccionar a dicha afirmación, es decir, aquel hombre regordete que estaba frente a ella no estaba equivocado para nada. Desde hace semanas iba a uno de los armarios en el salón de música del último piso a preparar distintas pociones para llevar a cabo su plan; estaba dispuesta a ser expulsada de la Academia. Por lo que solo atinó a sonreír de forma incómoda antes de ir hacía las escaleras que conducían al piso superior.

Antes de empezar a subir escuchó nuevamente la voz del profesor.

—La biblioteca no está en esa dirección señorita —dijo sin gritar pero con la misma voz altanera de cada clase.

A la chica no le quedó de otra que reír mientras decía "que despistada soy" a la vez que caminaba en dirección opuesta a las escaleras. Se detuvo frente a una pared muy distinta a las demás; mientras que la mayoría de las paredes en la escuela parecían ser de mármol blanco o azul, esta pared en específico parecía estar hecha de un agua cristalina en la que danzaban pequeños peces. Aquella niña aún recordaba la primera vez que se encontró con aquel espectáculo; fue en su primer año en la escuela, ella al igual que otro grupo de jovencitas se había quedado embobada viendo a los peces de distintos colores nadando tan plácidamente, incluso se asustó de tener que pasar por ahí pues no solo no quería interrumpirlos, sino que tampoco quería ir por la escuela chorreando agua. Cuál fue su sorpresa al observar a Madame Maxime pasar por esa cortina de agua como si nada. Está ocasión no fue diferente.

Cuidado Con Los Sueños // Theo NottOpowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz