G.M [FINALIZADO]

Capítulo 14

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He Cong estaba furioso.

"¡¿Qué estás mirando?! ¡Échalo de aquí!"

El sirviente estaba perdido.

"Mi señor, usted... ¡será mejor que vaya y eche un vistazo! El Señor Qi es diferente de lo habitual, es tan feroz, ¡como si fuera a comenzar una batalla! ¡Todos están asustados!"

He Cong no pudo contener su ira.

"¡Ridículo! Los miembros de mi familia He han sido funcionarios durante generaciones, ¡cómo se atreve a montar una escena!"

Sacó la espada de la pared y corrió hacia las puertas de la mansión furioso, maldiciendo incluso antes de poder ver la situación con claridad:

"¡Qi Yan! ¡¿Por qué te has vuelto loco?! "

No era la primera vez que Qi Yan le molestaba.

Más que eso, no era la primera vez que Qi Yan había venido a recoger a Xia Xun delante de él.

Hace mucho tiempo, He Cong sabía que Xia Xun tenía a alguien que le gustaba, pero no sabía que ese hombre era Qi Yan.

Nunca había oído hablar del nombre Qi Yan y no fue hasta la caída de la familia Xia que escuchó algunas palabras sobre Qi Yan de su padre.

Después de la muerte de Xia Hongxi, Qi Yan fue rápidamente nombrado de nuevo y se le dio una alta posición a una edad temprana.

Xia Xun fue sincero con él, pero fue utilizado por él y enviado a la cárcel.

He Cong se indignó por lo ocurrido a Xia Xun y quiso intentar salvarlo, pero su padre le amenazó con su propia vida y no le permitió dar un paso al frente.

Por la seguridad de la familia He, He Cong se contuvo.

Unos meses después, la noticia de la muerte de Xia Xun llegó a la capital. He Cong no se arrepintió, tuvo una gran discusión con sus padres y se marchó a Lingnan.

Después de regresar a la capital desde Douzhou, su estado de ánimo se estabilizó gradualmente. Guardó el secreto de Xia Xun y vivió su vida como antes.

Sin embargo, cada vez que veía a Qi Yan, la ira en su corazón no podía ser suprimida.

Lo que le enfurecía aún más era la actitud de Qi Yan.

Pensó que Qi Yan se conmovería al enterarse de la muerte de Xia Xun, o mostraría un rastro de culpa al menos.

Quién diría que Qi Yan no cambiaría en absoluto. Iba a trabajar normalmente todos los días y cumplía con sus deberes oficiales con la debida diligencia. Su estado de ánimo era estable, sin ningún signo de luto y pesar por Xia Xun.

Olvidó a Xia Xun por completo, como si nunca hubiera existido.

Lo único que había cambiado era su actitud hacia la familia He.

Cuando Xia Xun fue enviada a Lingnan, el padre de He Cong cometió un pequeño error y cayó en manos de Qi Yan. Qi Yan trató el asunto perfunctoriamente y lo dejó pasar.

Tras la muerte de Xia Xun, se volvió más enérgico y eficaz en sus acciones, sin mostrar ningún rastro de piedad, especialmente con He Cong.

Cuando He Cong regresó a la capital, le dieron un cargo oficial.

Acababa de tomar posesión de su cargo y aún era inexperto, y accidentalmente cometió un error muy pequeño.

Aunque el emperador preguntara personalmente, probablemente no castigaría a He Cong.