Prohibido / Daddy (Gay) +18

2. Fantasías

Cole pov.

Meses atrás.

Mi desayuno se enfría, supongo que me perdí en mis pensamientos y no se me hace extraño, acabo de descubrir que Melanie me es infiel, no siento rabia y eso me hace ruido, debería estar enojado, querer respuestas, es lo normal, sin embargo no estoy molesto. Nos hemos distanciado, no tenemos intimidad y en gran parte de mí culpa, ya no me siento interesado en ella, esto empezó hace meses, algo me falta, es Adam, el le daba una felicidad a mis días y desde que se fue a la universidad se nota su ausencia, su risa, sus labios.

No, ¿qué me pasa?

Término sin ganas el café, no tengo que trabajar hoy y Melanie salió, limpió la cocina, después subo las escaleras y paso por la habitación de Adam, recuerdo cuando caminaba y él estaba ahí, ahora ya casi no queda nada de él,  su cama y sus muebles contienen cosas que no necesitaba.
Ingreso, notando que está algo sucio y decido ordenar un poco. Abro la ventana para que se ventile, mientras corro el mueble para limpiar a fondo veo un cuaderno tirado contra el borde.
No parece importante, es azul y está algo percudido por humedad, al ver la primera página noto que son escritos y con leer solo un párrafo me doy cuenta de algo que cambia mucho las cosas.
Lo que está escrito son fantasías que Adam tenía conmigo y decidió plasmarlas aquí. Dejé lo que estaba haciendo y me encerré en el baño, aunque estoy solo, deseo privacidad. No puedo parar de leer y mí cuerpo reacciona a medida que continúo con las páginas. Las imágenes acuden a mi, siento mi pene ponerse duro.

Basta.

Me obligo a dejar de leer, guardo el cuaderno e intento seguir el día con normalidad, pero no lo consigo, pienso constantemente en Adam, ya no lo veo de la misma forma.

Cuando Melanie regresa me cuenta que Adam vendrá unas semanas durante las vacaciones.

Presente.

Miro el techo, la frustración que tengo no me deja dormir, Melanie se levantó hace un rato, pero ni me moleste en preguntar qué le pasa. Las cosas están mal, no tenemos comunicación.

Adam está cambiado y no puedo creer que me sienta atraído hacía él, pero sé reconocer mis sentimientos y lo quiero. Desde que lo conozco le tengo aprecio, sin embargo ahora gracias a ese cuaderno eso ha escalado.
No sé qué haré, tengo que mantenerme alejado. Presiento que será imposible, es mí hijastro, ya he perdido la cabeza. Su dulce sonrisa y esa forma tan cálida que tiene de ser son la razón de mí perdición.

La puerta se abre, cierro los ojos y Melanie entra, se acuesta y no digo nada, prefiero que crea que duermo y que para nada estoy pensando en su hijo.

Adam pov

Un sonido molesto interrumpe mí sueño, reniego para levantarme unos minutos hasta que a regañadientes lo hago. Apago esa alarma ruidosa. Tengo resaca y los recuerdos de la noche anterior son algo borrosos, hasta que rememoro. Escuché a mamá hablando con un tal Patrick, con quién engaña a Cole. No es la mejor forma de despertarse, pero aún así salgo de la cama. Voy al baño, hago mis necesidades. Mientras me cepillo los dientes alguien toca con insistencia la puerta.

—Ocupado —aviso.

—Adam, necesito usar el baño por favor.

Es mí tío Andy.

Suena bastante apurado, pero me gusta molestarlo.
—Puedes usar el de abajo.
—¡De ahí vengo! —grita.

Enjuago mí boca y salgo dejándole vía libre para que pase.

—Gracias.

En el comedor, me sorprende ver a mamá despierta considerando que era tarde cuando ella hablaba por teléfono. Ella me sonríe.
—¿Quieres café?