Los colores del mar. (CAMREN)

Capítulo 12.

El sonido característico de aquella interminable lluvia de verano se volvió a mezclar con los cansados y abatidos sollozos de Camila.

- ¿Por qué has dicho que Emilio fue quien le contó a mi padre? – Susurró.

- Porque él fue...

- ¿Por qué lo hizo? – Se limpió un par de lágrimas.

- No puedo decírtelo...

- Por favor Lauren, estoy cansada de tantas mentiras.

- Lo sé... Pero, no puedo. – Negó con la cabeza. – No esta vez.

Sus ojos color esmeralda se encontraron por un par de segundos con los destrozados ojos de Camila quien se cruzó de brazos contra su cuerpo intentando demostrar una tranquilidad que no podía encontrar dentro de sí misma.

- Nunca ha sido mi intención dañarte... Lo sabes. – Lauren alzó su rostro. – No puedo darte las razones, pero tienes que saber que fue así...

- Es que no me lo creo. Que es mi hermano... ¡Mi mellizo! No sé si pueda entenderlo... O aceptarlo.

Una suave brisa hizo que el flequillo de la morena se removiera. A Lauren le parecía volver a ver la juvenil imagen de Camila durante las noches de veranos que habían compartido tantos años atrás.

- Fue sólo unos días después de mi graduación. – Recordó. – Tu padre fue a buscarme a mi casa, obviamente mis padres terminaron de enterándose de todo... Aunque muchos años después mi madre me comentó que ella ya lo sabía.

Camila le miró con curiosidad para luego acercarse y tomar asiento a su lado en aquella larga mecedora donde adoraba pasar horas acunando a Lukas.

- ¿Lo sabía?

- Sí. – En su rostro se dibujó una pequeña sonrisa. – Supongo que tampoco podíamos ocultarlo muy bien...

- Ya... - La más baja alzó los hombros. – He extrañado mucho a tus padres... Tú sabes que les quería... Y mucho.

- Lo sé. - Murmuró.

Respirando profundamente Lauren volvió a sumergirse en todos aquellos recuerdos de todo lo que conllevó aquella inoportuna visita de Alejandro Cabello. Podía sentir cómo por su sangre volvía a recordarle un pesado y desesperado sentimiento contra el padre de la chica que tanto había amado.

- ¿Por qué no me lo contaste aquella vez?

- Porque yo me iría... Y Emilio era en quien más podías confiar... No podía irme sabiendo que había quebrado la relación con tu hermano.

No hubo respuesta por parte de Camila quien ahora enfocaba todas sus atenciones en varios de los girasoles que se alzaban contra la suave lluvia persistente.

- Algún día lo sabrás, pero debe ser él quien te lo diga. – Dijo con un tono apagado.

- Supongo que ya no puedo confiar en nadie. – Sonó dolida.

- Me encantaría decirte que no es así... Pero... No lo sé... Supongo que nos hemos expuesto mucho con todo lo que pasó.

- No me arrepiento de nada Lauren.

Lauren negó con la cabeza para detallar la afligida expresión en el rostro de la morena.

- No me arrepiento, nunca lo haría. – Se le quebró la voz. – Pero a la vez me siento tan traicionada... Tan perdida... Ni en mi propia familia puedo confiar... Sólo me queda Lukas.