Los colores del mar. (CAMREN)

Capítulo 14.

Camila se mantuvo más de veinte minutos frente a la puerta de su propia casa. Sus pensamientos aún no podían encontrar ni un poco de orden ni paz. El corazón parecía latirte de forma arrítmica y desbocada. Como si todas su emociones fueran como un río atormentado que fuera a estrellarse directo a una gran roca.

Cuando el frío invadió del todo sus pies descalzos contra el césped húmedo. La morena fue capaz de buscar las llaves en su bolso para entrar en silencio al lugar, sólo iluminado tenuemente por la pantalla de la televisión de alguna película que no logró identificar.

Sus oscuros ojos fueron a parar rápidamente a la imagen de una tranquila Lauren durmiendo en el sofá. Llevaba un chándal negro y una camiseta de mangas largas. A su lado se encontraba la prótesis de su pierna.

- Lauren... - Le susurró cuando se acercó. – Despierta, por favor...

La más alta frunció el ceño para luego articular palabras sin sentidos.

- Venga, hace frío...

- Ya voy.

Cuando finalmente Lauren abrió de par en par aquellos ojos color esmeralda que tanto amaba Camila no pudo contener el llanto y angustia de su pecho. Se aferró al pecho de Lauren como si la vida se le fuera en ello.

- Ey, ey... ¿Qué pasó? – Sonó Lauren asustada. - ¿Qué pasa?

- Ya no puedo más con tantas mentiras, y todo esto... - Dijo agobiada.

Los brazos de la ojiverde le envolvieron intentando calmarme, pero por pocos segundos lo lograron, ya que nuevamente una gran cantidad de lágrimas empapó su rostro.

- Estoy tan cansada... Mi padre, mi madre... Emilio... Oh por Dios... ¿Cómo ha podido mentirme así?

- ¿A qué te refieres?

- Tú lo sabías. – Sonó con rencor. – Tú sabías que Emilio es gay, y no me dijiste nada al respecto.

Lauren pareció quedar descolocada frente a la acusación de Camila.

- Espera... ¿Esto me lo dices porque has hablado con Emilio? ¿Cierto?

- Él me lo ha dicho... Me ha dicho... Que tú sabías que él era gay, y que antes de que se lo comentaras a mi padre él tuvo que decirle lo de nosotras.

El silencio se hizo palpable entre ambas. Lauren se pasó una mano por el rostro antes de mirarle fijamente.

- Sí, yo sabía que Emilio era gay... O bisexual... O qué se yo, porque sólo le vi besándose con Charles Welch...

- ¿Charles Welch... el hermano de Harper?

- Sí... No fue con mala intención... Yo sólo estaba buscando un libro en la biblioteca del instituto y los vi...

- ¿Por qué no me lo contaste?

- Porque no quería exponer a Emilio... Si él no te había comentado nada sobre aquello, supongo que para él aún sería algo complicado... Todos somos distintos... Tú y yo afrontamos bastante bien nuestra sexualidad desde un principio, en gran parte porque nos apoyábamos... Pero Charles Welch iba en mi curso y era un capullo que sólo jugaba con los sentimientos de todas las chicas... - Hizo una mueca. – Intenté comentárselo a Emilio, pero él fue muy tajante en no querer conversar el tema, le aterraba.

Sus pensamientos parecieron enfocarse en la última frase de Lauren. Estaba tan cegada por la traición y todas las consecuencias del secreto de Emilio que aún tenía muchas preguntas para su hermano mellizo.