Akatsuki ❁ OneShots Lemon❁

☀︎︎ s ᴀ s ᴏ ʀ ɪ ☀︎︎

Au época moderna.
Capitulo cortito como la de tu ex. (Bromi.)
Mismas advertencias.
Espero les guste, llevaba empolvado en borradores, indecisa sobre si publicarlo.

GLOSS Y CEREZAS

A SASORI LE GUSTAN LAS COSAS BONITAS desde que tiene noción de si mismo, desde lo más sencillo como el gloss con brillitos y olor a cerezas que su hermana utilizaba hasta lo superficial como una cara bonita, específicamente las que solía llevar a la cama, él solía salir con alguien sin importar su género si este cumplía con sus estándares de belleza por unos días que conocía a alguien más atractivo/a qué lo deslumbrara. 

Cómo luciérnaga a la luz, y viceversa no siendo diferente para quién accedía a unirse a él.

No era más que una vana fascinación para alimentar el pequeño monstruo hambriento por autsatisfacción propia.

Sería cruel, pero no era tan diferente al motivo por el cual se acercaban a él, (t/n) solo vió en el hermoso chico un accesorio bonito, no diferente a un bolso costoso de diseñador en tendencia, le pareció tan atractivo como las veces en las que  follaban en su cama, todo era glorioso hasta que abría la boca y salía a relucir su personalidad de mierda, definitivamente no estaba con él por quien era, todo lo que valía en él era como se veía y viceversa.

Al igual que ella, era tan bonita como para encender las bajas pasiones de alguien superficial y apático como él, en definitiva era lo mínimo que merecía. No quería más, no lo necesitaba, sería estipido desear que le susurra al oído carameladas ni elogios, para alabarla estaban sus amistades y sus padres.

Ser el jodido centro de atención y recibir regalos bonitos de día y por la noche  de vez en cuando tener reservada una cita en su cama, follar hasta tocar el cielo, recibir y dar un oral estaba jodidamente bien.

Que la tomara del pelo y la ahogara con su polla arremetiendo una y otra vez,  que gimiera con aquella retorcida sonrisa en el rostro le erecta los pezones,  los besos de mariposa sobre ellos provocaría que apriete las piernas en busca de fricción contra la almohada entre sus largas piernas, las caderas hostiles y su vaivén errático en su garganta le deja sin oxigeno pronto, succiona el glande junto al agridulce fluido que se libera, unas cuantas  arcadas no bastan para detener su auto placer y el plop que suena quedito es parte del show de calentamiento. 

Tose errática, con saliva y dios ni su madre no quieren saber que está escurriendo en su barbilla, sigue su papel y sonríe coqueta con ojos llorosos, agradecía que  el hijo de perra solo la hacía llorar de ese modo, cuando piensa que en verdad en su lápida dirá "se atragantó comiendo chorizo" e imagina el Jesús en la boca de su tía la religiosa, entonces en verdad larga una carcajada volviendo a engullir su falo chupando un par de veces y de ves en cuando golpeando este contra la carne interior de su tibia mejilla.

Las finas manos del pelirrojo delinean con delicadeza su cuello, descendiendo por su dorsal, acaricia con la dureza de una pluma el par de holluelos en el final de su espalda, tiembla y se queja cuando el fuerte impacto de su palma llega a su trasero, aprieta, acaricia y deja en ellas la huella de su mano dominante, mientras que la derecha tira con delicadeza de la cola de gato, saca de a poco el plug anal y no evita jadear sin dejar de lado su tarea, el consolador en su cavidad vaginal sigue vibrando al compás de la lista del repertorio.

En ocasiones las oleadas son calma, en otras sacuden su interior casi sintiendo el climax siendo interrumpido por el cambio en el ritmo.

El juego previo era tan bueno como necesario, pero en verdad quería ser dominada con más severidad, en la cama podía ser su jodida perra y fuera de debía tratarla como una deidad, el la complacía en ambas. Solia secar y cepillar su cabello después de bañarse tras una larga sesión de sexo, seguido de masajear sus caderas y espalda.