Classroom of the elite | Diario de un estudiante

Capitulo 11: Reunión

Mi libertad ha sido amenazada por mi propia maestra que por su egoísmo me obliga a realizar acciones que no desearía hacer.

Me amenaza con mi expulsión y que si cumplo con lo que me pide me protejera de el.

Es que acaso esto realmente afecta mi libertad ¿Realmente he sido libre? En algún momento de mi vida he hecho algo que podría llamar libertad.

Pero libertad no es hacer lo que quiero sin límites, ya que eso implicaría invadir la de otra persona ademas que libertad tiene uno que nace con cierta personalidad y cierta predisposición a hacer las cosas cierta manera.

No será la libertad como esa piedra que cae de una montaña, que lo único seguro es el viaje mas no el camino, o tal vez la libertad sea que aunque caiga yo pueda elegir las partes del acantilado donde caiga primero o tal vez sea la forma del objeto que cae pues no es lo mismo caerse siendo un piedra con forma de cuadrilátero que siendo un cilindro o una esfera.

Sí, la libertad me es extraña.

Viendo el mar las ideas invadían mi cabeza.

Me preguntaba si yo observa el mar o el mar me observaba a mi.

Mi celular empezó a recibir varios mensajes, eran de parte de Karuizawa que me invitaba a una reunión con algunos chicos y chicas del salón.

Nos encontrábamos dentro de un crucero, íbamos a tener un examen especial aunque no teníamos idea en que consistía.

No tenia nada que hacer además pensar en todas las posibilidades sobre que tipo de examen se iba a realizar era una perdida de tiempo asi que acepte.

Karuizawa me indico por donde estaban asi que me dirigi sin apresurarme.

En el camino pude ver a otros chicos de diferentes clases, parecían disfrutar de los lujos que la cantidad de puntos que tenían podían ofrecerle.

Pude ver de lejos a Ichinose con un grupo de chicas.

Quise pasar desapercibido pues era un grupo con el que no había tenido interaccion alguna.

Sin embargo creo que siempre al desear que algo no suceda termina sucediendo pues la pespicaz Ichinose pudo verme entre tantas personas y empezó a decir mi apellido con uno tono de voz algo elevado.

No podía fingir indiferencia o el hacerme el sordo.

Pues su voz hipnotizaba y relajaba al ser oida.

La mire y podía ver como al dirigirle mi atención me sonreía como si fuera la mirada de una persona la cual no has visto en mucho tiempo.

Las chicas a su alrededor se veian confundidas pues parecía que Ichinose nunca daba esto tipo de atenciones muchas personas.

Ella se dirigió a mi y me saludó.

-Ayanokouji, ¿Cómo estas?- dijo con su felicidad característica.

-Estoy bien, aunque algo ocupado con un asunto-dije mostrando un poco de agitacion

-¿Tienes alguna cita con Kushida?- sonando con mucha duda.

-No, tengo una reunión con unos amigos.

-¿Amigos? Mmmm me olvide decirte al inicio de la conversación pero siento pena por la situación de tu compañero Sudou- me dijo tratando de ver si me afectaba emocionalmente.

-No tienes que preocuparte por eso, son problemas que afrontan nuestra clase pero agradezco el interés en tu delicadeza.

-Eso es algo muy propio de ti, me agrada tu soltura al hablar y tampoco olvidare tus palabras que me ayudaron-expresando su gratitud.