XVIII.

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Las sensaciones eran raras e inexplicables al sentir que el día acababa y con ello, horas antes de terminarla, sucedería cualquier cosa. Me sentía imperativa. Sebastián ya había llamado un día antes para verificar que no me echará para atrás ante la cita. Según él temía a que yo cambiará de parecer, y buscara una excusa insignificante o poco creíble. Lo comprendía, estaba en todo su derecho en pensar así.

Los días en casa, habían sido relativamente buenos, hasta aquél segundo día, sintiéndome mucho más vigilada que normalmente me sentía con Will; acechándo me en cuanto había posibilada para él, porque según lo que el pelinegro pensaba era que lo dejara en ridículo ante tantas rabietas que él había tenido ante mí.

Carl tenía un ojo en mi cada vez que sonaba el teléfono preguntando por mí. Una noche durante la conversación con Irina, había escuchado tras la linea una respiración agitada.

- ¿Oyes eso?- había preguntado ella a través de la linea.

- Sí. Pensé que eras tú - le confesé, sin estar segura porque ella estaría agitada de todos modos. - Espera un momento,- le dije, mientras tapaba el teléfono de casa.

- Mamá, ¿hay otro teléfono conectado con éste en otro lugar?- le pregunté, cuando la vi acercarse con una sesta de ropa recién lavada.

Ella levantó curiosa la mirada de lo que tenia entre las manos, y sopló el flequillo que tenía en la frente- Oh, si amor. ¿Porque la pregunta?

- ¿Dónde exactamente?- le inquirí.

- Hay uno en mi habitación, y otra en la recamara de tu hermano. ¿Pasa algo?

Negué, - No, nada. Ahora te alcanzo para guardar eso- le señale con la mano que tenia libre lo que llevaba consigo.

Asintió, y se fue hacia su cuarto. Me volví, y cogí el teléfono, llevándome lo a la oreja.

- ¿Nina, sigues ahí?

- Sí, sí. ¿Que pasó?

- Parece que alguien esta escuchando nuestra conversación. ¿Puedes, Carl, colgar el teléfono?

- ¿Cómo dices? - preguntó ella, tras soltar mi pregunta.

- Carl esta escuchando todo. Carl, baja y ven aquí ahora mismo o le diré a papá bien llegue a casa.

Un resoplido se escuchó en la linea, y sabia que no había sido Nina la que había hecho aquello. - Bien, ahora bajo. No es como si sus conversaciones fueran tan agradables, después de todo.

Irina se aguantó un grito, lo intuía.

- No sabia que realmente tu hermano estaba escuchando todo.- confesó, - Felizmente que no te dije que después de que me...

- Calla, calla - le dije-. Carl, joder, ¿puedes colgar el teléfono y venir aquí ahora mismo?

Escuché el teléfono hacer contacto con algo, y luego la puerta siendo abierta y seguidamente cerrada de la primera planta.

- ¿Como decías?

Y eso no había bastado para que él me dijera que no lo sentía realmente. Ese chico que se hacia llamar mi hermano, me asustaba, y mucho.

Luego de haber encendido la radio, dejé que esta misma llenará el poco espacio que se consideraba mi habitación. Comencé a poner las fotos que habíamos tomado durante los días dentro de la universidad. Pegué algunas sobre la pared recordando buenos momentos después de todo.

Aún absorta en mis pensamientos, mis oídos percataron un cambio. La radio ya no estaba en lo que solía ser "Hey mama de David Guetta" si no que, la voz de Harry se filtraba ahora.

radio; au. ▶harry stylesWhere stories live. Discover now