A escondidas (Jenlisa)

Capítulo 52

NARRADOR OMNISCIENTE

Jennie salía de su departamento un poco triste. Temía que Lisa pensará que no la quería por no decirle a Mino que ellas estaban juntas.

Jennie tenía miedo que al decirlo a Mino, el no la dejará conservar su trabajo, aunque ellos no eran nada. Ella sabia concretamente que ella no había sido del todo sincera con el el ya que el nunca se enteró que ellas hace rato se veían a escondidas.

Lo que Jennie no se esperaba es que al llegar a su trabajo en su oficina hubiera un gran ramo de rosas sobre su escritorio con una nota que decía.

“Gracias por volver a mi lado, aunque seamos amigos se que aún me quieres.”

Mino.

 

Jennie suspiro mientras movía su cabeza en negación. Esto era lo que ella no quería que pasará. Que su ex novio malinterpretara las cosas.   

Tomo las flores y las dejo en uno de los jarrones que estaban allí después de llenarlo de agua.

En lo que iba de la mañana no había visto a Mino y realmente no quería verlo porque no sabría que diría si Mino la empezará a cuestionar.

Pero como si el destino no estuviera de su lado. Escuchó dos golpes en la puerta y vio como entraba con una sonrisa en sus labios Mino.

—Buenos días princesa— saludo Mino y ella sintió un poco de pena, al parecer el tenía algún tipo de esperanza con ella, lo sabía por la forma en que la miraba.

—Buenos días Mino, creo q….— pero no pudo terminar de hablar cuando Mino se acercó a su silla y le dio vuelta quedando cara a cara.

Pero Mino puso unos de sus dedos sobre los labios de la morena.

—No digas nada— hablo Mino —¿te gustaron las rosas?— pregunto.

—Si Mino pe….— y el estaba empecinado en no dejarla hablar. Jennie frunció sus cejas.

—Quiero que vayamos a almorzar por favor— dijo Mino mostrándole un pequeño puchero, que a Jennie le pareció algo ridículo, antes esos gestos por parte de el, le hacían parecer demasiado tierno, pero ahora no y era porque ya no sentía nada hacia el.

—Yo creo que no es una buena idea— respondió Jennie y vio el rostro confundido de Mino.

—¿Porque, es que ya estás con alguien?— pregunto con la voz apagada.

Jennie pensaba en si decirlo o no.

—Yo…yo..— suspiro —si estoy con alguien perdón— hablo por fin.

Pero porque le pedía perdón, si el también había fallado en la relación no sólo ella.

—Oh lo siento yo no sabia— dijo Mino —¿tan rápido encontraste otra hombre para tu vida?— le decía en un tono un poco molesto.

—No Mino— Jennie no sabía que hacer —estoy intentado algo con alguien que me gusta mucho y siento muchas cosas por esa persona.

—¿Quien es?— pregunto ahora golpeando la mesa con sus manos.

—Eso no te importa— hablo Jennie levantándose de su silla y alejándose de él —sólo te puedo decir que estoy muy enamorada.

—¿Enamorada?— pronuncio fastidioso Mino —¿tan rápido?

—Lo siento— dijo Jennie y trato de salir de su oficina cuando Mino la detuvo tomándola del brazo —perdón no quería reaccionar así, es sólo que estoy algo sorprendido. Yo quiero que seamos amigos que nos llevemos bien por lo buenos momentos vividos.

—Esta bien— respondió Jennie —sólo amigos. Ahora la verdad no quiero que pienses que soy mala, pero tengo mucho trabajo atrasado.

—Oh..esta bien te dejo trabajar— hablo Mino y salió por la puerta, dejando a Jennie con un signo de interrogación por el cambio de actitud rápido de Mino.

Jennie continuó haciendo su trabajo cuando noto que ya sólo faltaban dos minutos para su salida. Ya estaban cerca de ser las 9 de la noche, de seguro Lisa ya venía por ella.

Apago el ordenador y se dispuso a salir. No vio por ningún lado a Mino y lo agradeció con internamente.

Al salir del edificio pudo divisar en la vereda junto a la calle a Lisa sobre el capo de un auto. Camino a pasos rápido hacia su pelinegra. 

—Amor— hablo Jennie haciendo que Lisa levantará la vista de su móvil. 

—Mi amor— dijo Lisa, se acercó y la beso en los labios.   

Jennie no se lo esperaba así que quedó en shock. No por que no quería sino porque estaban fuera de la empresa de Mino y el aun no sabía de si romance con Lisa.

—Perdón— dijo Lisa al ver que Jennie no respondía su beso. Y se alejó con la mirada hacia abajo

—No, por favor—dijo Jennie y la tomó por las mejillas para levantar su cabeza y besarla —te amo y Lisa sonrió posando las manos en la cintura de la morena. 

Mientras tanto a una distancia no muy lejana la imagen era apreciado por un moreno que cuando vio a las dos mujeres besarse se sintió un estúpido. 

Vio como las mujeres subían en el auto en el cual estaban apoyadas.

—Tengo que hablar con Jackson— dijo tomando su móvil.   

Pero lo que el no sabía es que Jackson llevaba ya tres de los siete días que tenía que cumplir en prisión.

—Maldita sea— gruño al ver que el móvil de su amigo estaba apagado tomó su móvil y llamo a uno de sus otros amigos. 

—John— dijo una vez la llamada fue contestada —necesito tu ayuda ¿sabes algo de Jackson Wang?

—Hola Mino— hablo su amigo al otro lado de la línea —Jackson Wang esta preso ¿no sabías?

Mino se quedó helado tras la noticia, no se había enterado de eso. 

—¿Como pasó?— dijo preguntando a Su amigo John. 

—Al parecer su mujer lo engañaba y el la encontró con las manos en la masa— dijo y después soltó una risa, Mino no entendió —mejor dicho las manos en la tortilla.

Mino corto la llamada y miro hacia donde estaba antes las mujeres y se encontró con un lugar vacío.

Ahora entendía todo, la morena le había visto la cara y lo había juzgado a el por serle infiel cuando ella ya lo había sido mucho antes. Ahora entendía el día que fue con Jackson a buscarlas y sólo encontró a las amigas de ambas y ellas no estaban. Entendía los nervios de las otras dos mujeres cuando le preguntaron por Jennie y Lisa.

—Quien lo creería Jennie, que ahora te gusta las mujeres— dijo mientras reía por haber sido tan tonto al no darse cuenta.